El alcalde Ustarroz, el concejal Troitiño y el portavoz de los vecinos

JUAN F. MTNEZ. El alcalde de Majadahonda, José Luis Alvarez Ustarroz (PP), aseguró en el pleno del Ayuntamiento que no está condicionado por el «miedo» a la querella que podría interponerle AEDAS por presunta prevaricación. El motivo es el retraso provocado por su petición de un nuevo estudio, que retrasa la licencia de construcción de los pisos de 210 familias situados frente al Cerro del Espino. En respuesta a un portavoz de la Plataforma de Afectados por la Parálisis Urbanística de Majadahonda, que reclamaba así un pronunciamiento público en el pleno -la respuesta del alcalde fue grabada por las cámaras-, Ustarroz se apercibió de la situación y le recriminó al portavoz su presencia en el turno de «ruegos y preguntas»: «me sorprende que venga al pleno porque la interlocución es bastante fluida», dijo. Fue entonces cuando precisó que «a todo lo que me quieran preguntar les responderé sin ningún tipo de miedo porque estoy convencido de que es lo mejor para los intereses del Ayuntamiento». Las conversaciones continuarán este viernes 26 de junio (2020) en el despacho del alcalde.


«LA LICENCIA MÁS DIFÍCIL DE ESPAÑA» PROVOCA «GENTE PERJUDICADA». El único error que cometió el alcalde en su «defensa» es que reconoció que «hay gente perjudicada por haber dado una señal» para acceder a los pisos, aunque precisó que «la relación jurídica del Ayuntamiento es con la empresa AEDAS». También admitió que sigue por la prensa la evolución de los acontecimientos en torno a este asunto que podría terminar en los juzgados: «Se dice en algunas noticias que he leído por ahí, en alguna información o en alguna difusión, incluso desde su propia Plataforma, que es un expediente que está concluso y terminado. Esa es una información que no puede estar más alejada de la realidad porque es un expediente de una complejidad técnica extraordinaria, me atrevería a decir que no hay ninguna licencia en España más difícil de tramitar que esta, y hay informes jurídicos tanto del personal de la casa como ajenos que son contradictorios, por lo que (el retraso) está justificado». Con ello parecía responder al calificativo que hizo la Asociación de Promotores a la Concejalía de Urbanismo de Majadahonda como «una de las tres peores de España».

«LA INFORMACION SOBRE LA PARCELA AEDAS HA ESTADO RETENIDA UNA SEMANA». El joven alcalde pareció incómodo en las respuestas en torno a esta asunto. No en vano se juega mucho: una querella por prevaricación, avalada por Price Waterhouse con 230 millones de euros de indemnización por “imputabilidad objetiva” acabaría con su incipiente carrera política si es admitida a trámite. Y aunque él se jacta de que también es abogado y los letrados del consistorio le aseguran que la ganaría sin problema, seguramente AEDAS no contrataría a un abogado de oficio ni a un funcionario para defender sus intereses. De ahí que el alcalde evidenciara a veces en sus respuestas cierto nerviosismo. Otro momento de ello se produjo al ser cogido en un «renuncio» cuando fue sorprendido por la portavoz de Cs, Ana Elliot: «sobre el caso de la parcela RN-1 (AEDAS) tiene usted una información retenida desde hace una semana», algo que el alcalde negó. Aunque ninguno de los dos especificó de que información se trataba, Ustarroz se ofreció rápidamente a entregársela a la concejala al término del pleno, alegando que la había recibido «esta misma mañana».

«CREIMOS AL CONCEJAL TROITIÑO PERO 4 MESES DESPUES NO HAY LICENCIA». El portavoz de la Plataforma de Afectados por la Parálisis Urbanística de Majadahonda dijo que los 210 vecinos llevaban 3 años esperando la licencia de obras, que habían dado una «señal importante», que muchos de ellos estaban pagando «alquileres» y que la venta de sus viviendas actuales previa al acceso de las nuevas «pierde valor cada semana» por la crisis económica que sigue a la pandemia de coronavirus. Añadió que el 28 de febrero se reunió con el concejal de Urbanismo y reveló que Manuel Troitiño les dijo que «el tema estaba resuelto y en semanas se resolvería la licencia de obras. Le creímos, pero 4 meses después no hay licencia, cuando es un tema sobre el que la Fiscalía no ve ninguna irregularidad», en alusión a la iniciativa judicial que interpuso Cs. Por último indicó que no existe «ninguna objeción en los últimos 6 años y sí en cambio un informe del Ayuntamiento donde tampoco se ven objeciones». Por eso les escama que «años después hay que esperar a un nuevo informe cuando la concesión de una licencia es un acto reglado y puede concederse sin más demora y con todas las garantías». Y es que «esa licencia es la ilusión de muchas familias y traerá al municipio una fuerte inversión económica«, concluyó. Algo que parece no preocupar al alcalde ni al Ayuntamiento porque mientras esa licencia siga en el limbo, otras promotoras de Majadahonda pueden seguir construyendo y vendiendo sus pisos.

Majadahonda Magazin