JULIA BACHILLER. La inauguración del alumbrado de Navidad en Majadahonda tuvo lugar este sábado 11 de diciembre (2021), acto anunciado dentro del programa de actividades navideñas difundido por el Ayuntamiento. Se hizo tras finalizar el concierto de la reconocida banda “Taburete”, a cuyo concierto se accedió con mascarilla (que luego la mayoría de los asistentes se quitó sin guardar distancia social aunque a la entrada se ofrecía gel). Y llegó el momento de un segundo espectáculo. Este estuvo a cargo del alcalde de Majadahonda José Luis Álvarez Ustarroz y del concejal de Festejos, Eduardo González Camino, quienes sobre el escenario, en compañía de los integrantes del concierto, accionaron el botón del encendido de las esperadas luces navideñas, momento en el cual los focos alumbraron con los colores del emblema nacional. El encendido iluminó el simulado árbol navideño de la Plaza de Colón y la calle central de Majadahonda, la Gran Vía, aunque según aseguraba el consistorio “se llenarán de luz por primera vez distintas rotondas del municipio y las iglesias de la localidad volverán a lucir la estrella de Belén”, algo que habrá que comprobar en los próximos días. A grandes rasgos esto es lo que se pudo apreciar en tan señalado día.

Julia Bachiller

OPINION. Un panorama un tanto desolador aguardaba a los asistentes a la llegada al lugar donde se realizaría el anunciado concierto de «Taburete» y posterior encendido de la iluminación navideña. El conocido Parque de Colón de Majadahonda, donde en las fiestas patronales se realizan los conciertos gratuitos al aire libre, estaba rodeado por una valla de alambre cubierta con una lona negra para ocultar lo que acontecía en su interior. No era la habitual imagen que estamos acostumbrados a encontrarnos, ya que los conciertos de pago se realizan en una enorme carpa cerrada en el recinto ferial para mantener su privacidad y evitar los altavoces al vecindario. Un eficaz dispositivo de seguridad controlaba los tres accesos al recinto, según se nos indicaba tras solicitar dos días antes la acreditación de prensa. Esta debía ser recogida media hora antes en el “Punto de recogida de Invitaciones”, lugar que al final resultó inexistente según aseguraron cuatro diferentes agentes de seguridad a los que preguntamos su localización, optando finalmente por dar acceso al lugar con el carné de prensa.

En el interior Dj Tito amenizaba los minutos antes del comienzo de la actuación. Fue curioso comprobar como muchos jóvenes seguidores del grupo se ubicaban en una zona alta del parque, cercana al Kiosco, presenciando el concierto detrás de las vallas, mientras que otros optaron por quedarse fuera frente a la puerta principal de acceso para verlo desde allí, ya que no podían pagar la entrada. Algunos de estos jóvenes lamentaban que un gobierno de Majadahonda PP-Vox, que lleva «alardeando» desde el comienzo de la actual legislatura de un superávit, llevara casi dos años sin hacer uso del presupuesto de la Concejalía de Festejos pero no les daba la opción de acceder gratuitamente como empadronados. A tenor de lo ocurrido, quizás debería ser algo a tener en consideración. La organización de este concierto coincidió con el encendido del alumbrado navideño aunque este habitualmente se realizaba el mismo día de la inauguración del belén municipal.

Las innumerables quejas vertidas por vecinos y comerciantes en foros y redes sociales por el retraso del encendido provocaron la incertidumbre de saber que dirían tanto el alcalde como el concejal de Festejos o si había alguna reacción del público. No hubo ni lo uno ni lo otro porque, entre otras cosas, la mayoría de los asistentes venían de fuera de Majadahonda, como así pudo apreciarse por los vítores que suelen producirse al mencionarse el nombre de la ciudad. Y es que la fama de «Taburete» llenaba el concierto y evitaba así las posibles recriminaciones o abucheos públicos por la gestión de las fiestas navideñas de este año. No era pues el concierto el lugar para recoger estas reacciones, pues para ello había que pisar las calles, virtuales o reales. Lo cierto es que la tardía y escasa iluminación navideña de esta Navidad 2021/22 se evidencia en lugares como la Casa de la Cultura, calles aledañas a la Gran Vía e incluso en otras principales vías del casco urbano, lo que hace presagiar que las urbanizaciones tampoco formarán parte del encendido navideño, todo lo contrario a lo ocurrido con la bandera, que sí alcanza a la mayoría de los barrios de Majadahonda.