Ingo Volckmann, propietario del Atlético Baleares, celebró el título de Copa Federación como un aficionado más sobre el césped de Son Malferit. Antes se sentó en la grada, con los aficionados, algo que habitualmente hace este heterodoxo presidente alemán de un club español, que ni saluda a los directivos rivales ni le inmuta que en el palco esté Angel María Villar, al que tampoco saludó. De hecho al presidente del Rayo Majadahonda, Enrique Vedia, y a los directivos, los sentó en la grada y al sol, lo que no pudo evitar que las cámaras de televisión captaran a Villar bostezando y medio dormido en un par de ocasiones. «Estoy muy feliz, esto es lo que necesitábamos y lo hemos conseguido», dijo eufórico ante los periodistas. El alemán reconoció al Diario de Mallorca que este éxito les va a dar autoestima para el futuro. «Era importante ganarla, ya que la temporada estaba siendo vacía. Ya la hemos ganado, y ahora, lo que toca es celebrarla», resaltó.
El diario alemán Spiegel entrevistó al empresario hotelero Ingo Volckmann, que compró en Mallorca el club de fútbol Atlético Baleares: “El berlinés quiere un club de la tercera división del fútbol profesional español para establecer con jugadores europeos un know-how alemán”. Y añade: “30.000 alemanes viven en la isla mediterránea española, casi tantos como en Itzehoe o Bad Nauheim, y regentan restaurantes, compañías inmobiliarias, disfrutan de la zona de marcha o de su jubilación. Un alemán ha ido un paso más allá: Ingo Volckmann, empresario hotelero de Berlín. De 46 años de edad, compró el insolvente club de fútbol mallorquín CD Atlético Baleares”. Así nació en Berlín el primer dueño alemán de un club en el extranjero. Fundado en Palma de Mallorca en 1942, el club lo preside Guido Düsseldorf, que vivió durante 30 años en la isla y está casado con una mallorquina. El objetivo de los dos alemanes es que el Atlético Baleares suba de la tercera liga española (2ªB) hacia arriba, por lo menos a la segunda división (2ª A), y para hacer del club un referente en el fútbol profesional español utilizando también los jugadores alemanes”. Finalmente solo ha fichado como entrenador al ex jugador internacional Christian Ziege.
Volckmann vive incluso en Mallorca, opera en las Islas Baleares con varios hoteles y tenía un plan para invertir en el fútbol desde hace algún tiempo. Quiso unirse al Atlético Baleares antes pero fue sorprendente como algunos protestaron su plan de rescate financiero para sacar al club de la angustia: «De repente llegó la llamada de Mallorca: se habían reunido con el entrenador y un amigo de Manacor en un parking” dice el empresario. «Entonces todo sucedió muy rápido.» Sin embargo Volckmann se paró frente a varias dificultades: «No es fácil asumir a un alemán en un club de Mallorca», dice, la gente es bastante escéptica, sobre todo cuando se trata de fútbol. Pero los seguidores españoles se han dado cuenta rápidamente de que Volckmann y su equipo traen el bienestar al club y que éste se encuentra en el corazón: «Fue un alivio para todos los aficionados que su equipo favorito pudiera seguir existiendo e incluso siendo competitivo», dice.
Volckmann recuerda una situación en un restaurante: «Nos gusta charlar con varias personas sobre el Atlético Baleares”, dice. Y cuenta como de repente un camarero se acercó y le dio las gracias por haber ayudado al club. «Experimenté un par de veces», dice Volckmann sobre el estímulo que refuerza sus proyectos. Según los informes, ha puesto en el club alrededor de 700.000 euros. Pero, ¿cómo después de declararse en quiebra puede volver a la pista? La experiencia alemana del fútbol es la idea de Volckmanns. Desde el área deportiva Patrick Messow es el responsable y también es de Berlín. Él cuida junto con Volckmann posibles fichajes, a la cantera y la coordinación. «Patrick me ha encontrado dos jugadores de la primera liga holandesa, un holandés y un alemán, que son propensos a jugar a partir de la segunda ronda con nosotros», decía Volckmann. Thilo Leugers nació en Lingen y se formó en el Twente Enschede, Tim Vincken había jugado más de 70 partidos en la Eredivisie. Messow estaba bien conectado en el mercado holandés, pero hacía hincapié en que Volckmann quería continuar con el núcleo del equipo local. Los grandes rivales de la ciudad son el club RCD Mallorca de segunda división, en el que el alemán Utz Claassen es un importante accionista.
“Recientemente Volckmann dejó de seguir al equipo para probar al preparador físico del Hertha, que ha puesto en marcha un nuevo centro de formación con equipos modernos e incluso una cámara de altitud para mejorar la resistencia. «Esto es para mostrar que no sólo voy a invertir, en lo deportivo quiero realmente lograr algo. Creo en la isla y quiero ser el número uno aquí,» dice Volckmann. Otro plan es trabajar con los clubes alemanes. El mayor sueño fútbolero de este empresario de hoteles sin embargo, no será capaz de cumplirlo, incluso si tuviera una gran cantidad de dinero en la mano: «Toni Kroos, con el Real Madrid, es alguien casi cercano”, pues ha veraneado en Mallorca. Pero, ¿quién sabe? Tal vez las estrellas cuando envejezcan quieran ir en algún momento a la isla favorita de los alemanes que se jubilan. Y para Volckmann sería muy bonito”, concluye el artículo.
https://www.youtube.com/watch?v=SbGNvFDMMi0
