SONIA BLUE. «La casa de Majadahonda la compramos nosotros, no sé si le quedan ciento y pico mil euros de hipoteca, tiene un valor de 900.000 euros, tenía embargo preventivo, que está levantado a día de hoy, era una derivación de mi deuda a Makoke y está resuelta. Es que esa casa está libre de cargas. La de la finca igual. Y la idiotez de que no se ha pagado ni un duro de la casa de La Finca (Pozuelo), no se le ocurre ni a Rompetechos…». Con estas palabras, la revista del corazón 10 Minutos recoge el testimonio del tertuliano Kiko Matamoros sobre la titularidad de la deuda que recae sobre la casa del ex matrimonio en Majadahonda, donde vivió junto a su ex pareja, la modelo Makoke, así como la cuantía en la que está valorada. Matamoros señala que la parte de la deuda que recaía sobre él ya ha sido satisfecha y que por tanto la casa se encuentra libre de cargas por su parte. Esta misma casa fue el lugar donde se cometió la agresión conyugal de Matamoros hacia Makoke, según desvelaba el atestado que la Guardia Civil realizó cuando se personó al domicilio que ambos compartían.

«En la casa he puesto entre 600.000 y 700.000 €. Hay un acuerdo mutuo y ante notario. En ese contrato privado de lo que se habla es que las cantidades que he entregado yo para comprar esa vivienda, que es de Makoke, en el momento en el que se venda me las tiene que devolver. Y en el contrato se reflejan las cantidades que se han entregado. Hay una firma por parte de los dos, un acuerdo mutuo que está protocolizado ante notario», dice la revista. Y recuerda: «Se separaron hace tres meses y al principio se esforzaron por convencernos de que su ruptura había sido muy civilizada. Sin embargo, ahora todo ha cambiado y el cruce de acusaciones entre ellos es constante».

Después de que Makoke se sentara en la silla del ‘Deluxe’, Kiko me concedió esta entrevista para contestar a la que fue su mujer durante veinte años y según me cuenta está «bastante cabreado». Unas palabras en las que habla claro y sin pelos en la lengua sobre su divorcio y todas las polémicas que le rodean, como la famosa infidelidad, la venta de su casa y su amistad, más que entrañable, con Sofía Suescun. Os dejo algunos de sus dardos, algunos de ellos envenenados, que Kiko lanza contra todos y contra todo. Así es él». Después de que su ex se desahogara en un plató, el colaborador de Telecinco responde «punto por punto y en exclusiva» en esta entrevista con Kiko Hernández. Y de Makoke revela: «Me casé con ella porque quería hacerle ese regalo. Ella tenía mucha ilusión por casarse y, como yo la quería, pues quería hacerle ese regalo porque ya eran muchos años juntos y porque no pensaba separarme ni nada», concluye.

La publicación Periodista Digital difundió este documento en el que queda patente la violencia utilizada por el tertuliano de Telecinco sobre su mujer: “le agarra de los pelos tirándola al suelo para golpearla repetidas veces e incluso llegando a pisarle la cara“. Sin embargo, dicha agresión no tuvo la habitual repercusión privativa de libertad para el agresor, ya que según relataba ella misma al instructor del atestado, “no voy a denunciar al padre de mi hija, no quiero perjudicarle, solo quería que se fuese de casa“. Una agresión que sin embargo comenzaba con otro altercado violento horas antes cuando la pareja se encontraba en una discoteca madrileña. Y el delito era en esta ocasión la imprudencia temeraria a manos del volante durante el viaje de vuelta a Majadahonda: «Durante el trayecto (aproximadamente unos 20 kilómetros) que separan la capital (Madrid) de la localidad de Majadahonda en la madrugada de ese 17 de enero”, Kiko Matamoros “condujo temerariamente su vehículo a 200 kilómetros por hora poniendo así en riesgo no solo su propia vida y la de su entonces pareja sino también la del resto de usuarios de la vía”.