2016-01-26 14.43.06El pleno del Ayuntamiento de Majadahonda vivió este martes escenas de fuerte tensión tras siete largas horas de debate que fueron felizmente reconducidas por los concejales, afectados por la vorágine desencadenada tras la extenuante sesión. Un joven majariego, visiblemente nervioso, intentó intimidar a un periodista de MJD Magazin al grito de “¡no creo en la democracia!” cuando fotografiaba a un grupo de personas en la vía pública, concretamente en los soportales del mismo Ayuntamiento. Otra persona fue expulsada del pleno tras producirse una interrupción del mismo al jalear la moción que presentó una portavoz de “Stop Desahucios”. Otra vecina calificó de “burrada” la presencia en la corporación de la concejala Fátima Núñez (PP), que lo era de Seguridad con Ana Botella cuando ocurrió la tragedia del “Madrid Arena”. Una más salió voluntariamente de la sala entre sollozos tras confesar que le habían cortado la luz y pasaba frío. Y otra rompió a llorar cuando denunció la “masacre” de su colonia de gatos que habían sido exterminados porque el concejal Manuel Troitiño “no los quiso esterilizar”.


Captura de pantalla 2016-01-26 a las 10.46.49Por fortuna, los concejales mediaron en estas situaciones e impidieron que pasaran a mayores: Narciso de Foxá y Manuel Ortiz (PP), Alfonso Reina (Cs), Zacarías Martínez Maíllo (PSOE), Patricio Mackey (Somos Majadahonda) y otros miembros de su grupo, junto con la propia Asamblea Vivienda Madrid (Alerta Desahucio) se interesaron por la situación del periodista majariego que había sufrido el percance. El propio Foxá salió en defensa de la concejala Fátima Núñez porque “ni siquiera ha sido imputada” y Zacarías Martínez le mostró su apoyo tras el pleno. El mismo concejal Troitiño recibió a representantes del colectivo de defensa animal al lado del salón de plenos y todo ello en un día en el que hasta una decena de vecinos intervinieron para formular preguntas y expresar quejas, lo que convertía la sesión en una fiesta de la democracia y la participación ciudadana que los incidentes no consiguieron empañar.

Las representantes de "Stop Desahucios" tras el incidente

Las representantes de «Stop Desahucios» tras el incidente

La representante de “Stop Desahucios”, que fue escuchada con una mezcla de curiosidad, atención y respeto por todos los representantes municipales y el público asistente, dijo en su intervención que su plataforma nunca “ocupaba” casas de alquiler de particulares, pues solo se centraban en las que estaban en poder de los bancos: “son 3,5 millones de casas vacías lo que tienen los bancos en España, de ellas 1,5 millones pertenecientes a Bankia”. Por eso, “cuando una persona no puede pagar un mes de alquiler la alojamos en un piso vacío» de esta misma entidad bancaria. La portavoz recordó que un alto directivo del BBVA hoy en el banco “ha recibido 70 millones de euros de indemnización y en su despacho tenía un Tapiés, un Miró y un Chillida”, por lo que éste negaba que su casa financiera hubiera provocado desahucios “a personas vulnerables”: “ahora entenderán por qué esa gente no comprende lo que es la vulnerabilidad”. La dirigente vecinal añadió que su asociación exigía “un alquiler social, no una expropiación” y apuntó que el Ayuntamiento de París había obligado a alquilar el 25% de la planta hotelera parisina previo convenio municipal para evitar que nadie durmiera a la intemperie: “Aquí solo nos ponen pegas y trabas administrativas cuando en otros países de Europa ni existe la palabra desahucio: no se concibe un ser humano sin techo”. La vecina recordó que a ningún europeo sin recursos de la UE se le cortan los suministros energéticos en invierno y reclamó como gesto la bajada de los altos sueldos en PAMMASA, la empresa municipal de la vivienda, al tiempo que aseguraba que “también hay desahucios en Majadahonda”: «es vergonzoso que en este lugar tan próspero no exista vivienda social asequible».

La foto de la polémica: un joven intentó impedir su difusión

La foto de la polémica: un chico intentó impedir su difusión intimidando al periodista que la tomó

El dramático discurso se vio empañado por un incidente en el pleno y el otro posterior a la salida del mismo con el periodista que ejercía su derecho a la información. Dentro, el alcalde, Narciso de Foxá, expulsó a un vecino que jaleaba a la portavoz de los desahuciados al interpretar que con sus eslóganes interrumpía el pleno. La “tarjeta roja”, aunque ajustada a reglamento, fue criticada por el resto de los portavoces municipales y parte del público debido a su excesivo rigor. Además, varios concejales sugirieron más “flexibilidad” de la habitual al alcalde para lidiar este tipo de situaciones, complejas en cualquier caso. Una vecina propuso incluso que de estos menesteres se encargara el agente responsable de la seguridad en la sala, ya experto por su larga experiencia: “ya estaba con Romero de Tejada”, dijo la señora, provocando cierta hilaridad. Foxá aceptó las sugerencias e hizo gala en el resto de la sesión de menos severidad ante las intervenciones y un mayor orden en el respeto al orador, ya fuera concejal o vecino, llamando la atención incluso a miembros de su propio grupo. Así se llegó al final de la maratoniana y controvertida junta, que ya todos coinciden en que debe desdoblarse para evitar una excesiva fatiga y carga emocional. Y que para otros concejales resultó inolvidable: era la primera vez que intervenían más de diez vecinos en el turno de ruegos y preguntas.


El pleno registró una buena entrada, llegando casi al lleno en ocasiones

El pleno registró una buena entrada, llegando casi al lleno a lo largo de las 7 horas

Y no lo desaprovecharon: desde la solicitud de una “zona azul” en Virgen de Icíar, que dormía el sueño de los justos y el alcalde se comprometió a pintar “en tres meses”, hasta la demanda de un “Plan de Sensibilización Ciudadana” que lleve a cabo una “estrategia local sobre el cambio climático”. Solicitudes de aplicación inmediata del programa C.E.S (Capturar, Esterilizar, Soltar) para gatos, ya aprobado en pleno, o citas con los concejales Manuel Troitiño y Africa Sánchez, que estos demoraban por haberse realizado por vía telemática. Quejas por la usabilidad de la página web o la escasa calidad de las retransmisiones televisivas de los plenos, por el no empadronamiento de algunos concejales y hasta por el incumplimiento de las mociones aprobadas. Un pleno, a lo que se ve, que tuvo de todo menos aburrimiento. (Mañana más información sobre el resto del pleno y editorial).

Majadahonda Magazin