MIGUEL SANCHIZ. Mª José Terol es majariega e imparte sus lecciones en la Universidad Francisco de Vitoria como destacada terapeuta del cuerpo y creadora del innovador Método Terol (MT). Es la protagonista de este domingo 26 de mayo (2024) en esta sección de «Gente Maja que se Moja» porque ha dedicado su vida a transformar el dolor y las limitaciones físicas en movimientos que sanan y fortalecen. Hija del renombrado barítono Pedro Terol, Maria José heredó de su padre no solo un legado de excelencia, sino también una profunda apreciación por el arte, que ha sabido trasladar a su propia expresión del movimiento y la terapia corporal. Desde su temprana iniciación en la danza hasta superar adversidades personales significativas —incluyendo lesiones graves y batallas contra el cáncer—, su camino ha estado marcado por un incansable espíritu de superación. A los 35 años comenzó a desarrollar su práctica profesional, que culminaría en la creación del Método Terol (MT), un enfoque terapéutico que enseña actualmente en un marco académico universitario.
Este método no solo ha ayudado a Maria José en su propia recuperación, sino que también ha permitido a cientos de alumnos y pacientes recuperar la movilidad y mejorar su calidad de vida. En esta entrevista, exploraremos cómo las experiencias de vida de Maria José han influenciado su enfoque en la terapia del cuerpo y cómo su legado artístico ha informado su técnica única. Del escenario operístico a la sala de terapia, Maria José Terol continúa la tradición familiar de hacer una contribución significativa y duradera a través de su arte. Tiene una magnífica pagina web www.metodoterol.es. Entré en la página y quedé asombrado. Voy a entrevistarla.
Comenzaste tu contacto con el cuerpo a través de la danza desde muy temprana edad. ¿Cómo crees que esta experiencia inicial influyó en tu enfoque posterior hacia el movimiento y la terapia corporal? –Mi contacto con el cuerpo a través de la danza desde muy temprana edad fue determinante para la creación del Método Terol. La danza sentó las bases del MT y sin esa experiencia hubiera sido imposible haber creado la metodología. No comenzaste a desarrollar tu práctica como profesora y terapeuta del cuerpo hasta los 35 años. ¿Qué te motivó a hacer esta transición y qué desafíos enfrentaste al principio?. –Efectivamente, no comencé a desarrollar la práctica como profesora y terapeuta del cuerpo hasta pasados los 35 años. Comencé a dar clases de danza a niños y poco tiempo después comencé a enseñar también a sus madres. En las clases de gimnasia dirigidas a mujeres de mediana edad, me di cuenta de que muchas de ellas tenían necesidades particulares y dolencias que requerían de una atención específica. En los años 80, el entrenamiento personal en España prácticamente no existía. Yo fui de las pioneras en dar asesoramiento y entrenamiento individualizado dirigido a aliviar dolencias específicas para alumnos que me pedían ayuda.
Has enfrentado múltiples lesiones graves a lo largo de tu vida. ¿Podrías compartir cómo estos desafíos físicos te llevaron a desarrollar y perfeccionar la técnica del MT?. –En estas primeras sesiones individualizadas, me di cuenta de que aplicando aquel protocolo que yo había aplicado en mí misma para superar mis dolencias, solucionaba también las dolencias y malestares corporales de aquellos alumnos que me pedían ayuda. Así fui desarrollando un sistema que comenzó con pilares muy básicos y poco a poco fui desarrollando más y sofisticando más para poder ayudar a personas con una gran diversidad de patologías. Con el tiempo venían a tratarse conmigo, médicos traumatólogos, fisioterapeutas y profesionales de la salud de todo tipo. En pocos años se hizo muy evidente para mí que había creado un sistema que no sólo era muy eficaz para superar mis malestares corporales, que para aquel entonces ya estaban totalmente superados, también era altamente eficaz para superar los malestares corporales de todo tipo, aplicándolo también a personas con perfiles muy diversos.
¿La mayor dificultad? –La mayor dificultad con la que me he enfrentado durante todos estos años ha sido demostrar que este sistema por mí creado puede insertarse a nivel académico y transmitirse a otros profesionales de la salud, para que ellos también lo apliquen a sus pacientes. Para conseguirlo, tuvimos que desarrollar tres cátedras de investigación en el departamento médico de la Universidad Francisco de Vitoria y una de ellas con la colaboración de la Universidad Autónoma de Madrid. Durante estas investigaciones tuvimos que testar que la metodología era eficaz en 100 individuos derivados de la Seguridad Social, todos ellos con dolor crónico y como consecuencia afectados por hernias discales y limitaciones físicas serias. Me enorgullece decir que los resultados fueron asombrosos. Gracias a todo ello, hoy podemos decir que el método Terol, y a diferencia de otros sistemas, ha sido testado y probado médicamente y es altamente eficaz en el 100 × 100 de los casos.
Mencionaste que tus propias recuperaciones se convirtieron en episodios de descubrimientos corporales. ¿Cómo fue el proceso de pasar de usar estos métodos para tu propia sanación a enseñarlos a otros?. –Efectivamente, a lo largo de mis años, he superado un accidente de tráfico casi mortal, en el cual de los 10 huesos principales que tiene la cabeza, yo me rompí cinco. Tuve un cáncer de mama, y me hicieron una histerectomía total a los pocos años. Para superar estos episodios, el tesón, la paciencia, la auto observación, la respiración y la atenta escucha hacia mi cuerpo, han sido claves para el MT. La base de la técnica del MT es el alineamiento corporal. El alumno o paciente del método Terol sabe exactamente cuál es una buena postura y por qué. El paciente ha entendido perfectamente cuáles han sido las causas que le han llevado a padecer molestias corporales o a tener lesiones o patologías. Sabe cómo corregirlas y prevenirlas.
¿Y que aprende? –El alumno del método Terol aprende a diseccionar las distintas cadenas musculares del cuerpo, sabe cómo pisar correctamente. Conoce, conecta y fortalece los cimientos y los pilares de su cuerpo constantemente a través de la buena postura y sabe qué partes del cuerpo tiene que mantener siempre alineadas y al mismo tiempo relajadas y liberadas de carga. Nuestros pacientes o alumnos conocen su cuerpo y saben cómo coordinar la respiración con el movimiento en cada esfuerzo de la vida, de una forma adecuada y eficaz, no solo para conseguir los mayores beneficios y resultados como consecuencia de la actividad física, también para proteger las partes vulnerables del cuerpo ante los esfuerzos. Nuestros alumnos entienden que tener una buena postura tiene un impacto permanente y directo sobre nuestra salud física, mental y emocional y que por ello, y para conseguirlo, el entrenamiento desde un protocolo eficaz, es vital.
Has mencionado que el sedentarismo y el reposo absoluto son la peor medicina. ¿Puedes expandir sobre cómo llegaste a esta conclusión y cómo influye en tu enseñanza y práctica?. –En el cuerpo, como en la vida, la falta de movimiento, nos atrofia, nos entumece. El cuerpo está constituido por un 70% de agua y así como le ocurre a un estanque o a un río, cuando el agua se estanca y no fluye, se pudre. Igual con un vehículo, si no se le mueve acaba deteriorado. Estamos hechos para el movimiento. La vida es movimiento. La mejor medicina es el movimiento alineado y ordenado. Después de casi 45 años de trabajar con la técnica del MT, ¿cuáles son tus metas o visiones futuras para este método?. –Cuanta más gente en el mundo pueda beneficiarse de esta poderosa técnica, mejor. Mi sueño es que muchos terapeutas y profesionales de la salud, aprendan el MT, para que puedan también transmitir esta técnica y ayudar a muchísimas personas.
Gracias, Miguel, por esta interesante entrevista .
Hace unos cuántos años, yo fui alumno y paciente de la Dra. Terol en la Universidad Francisco de Vitoria. Aprendí a pisar correctamente, conseguí habituarme a mantener mi cuerpo bien alineado y lograr caminar con la postura adecuada . Asimismo,
avancé en el conocimiento de mi cuerpo y a respirar con mayor eficacia, sobre todo, cuando realizo ejercicio físico .
Un agradecido saludo .
Gracias a María José Terol,no sólo me desaparecieron los dolores que tenía en cuello y rodillas los cuales eran fuertes, a pesar de haber ido a médicos y diferentes terapeutas,sino que he ganado en agilidad.
Hace quince años que hago el método Terol y no tomo ningún tipo de medicamento
Sensacional esta entrevista reveladora del M.T a un nivel de conocimiento, desconocido para mi y que puede aliviar mis dolores crónicos. Una esperanza!
Gracias Maria José! Si la gente conociera la efectividad de tu método para curar los dolores de espalda, sin duda lo integrarian en su vida como el comer o el beber. Un fuerte abrazo
Conocer a María José me ha cambiado la vida!!
Tengo una escoliosis de unos 40 grados de curvatura desde los 14 años.
Nunca me había molestado, pero
hace unos años empecé a sentir un dolor crónico insoportable.
Después de visitar a bastantes especialistas sin grandes resultados,una amiga me recomendó el método Terol.
Esto significó un antes y un después!
Llevo varios años dando clase con María José y estoy fenomenal!
Me ha enseñado a corregir posturas,a respirar bien y a escuchar a mi cuerpo haciendo de su método un modus vivendi.
Es una grandísima profesional pero sobre todo ,una gran persona a la que quiero y admiro.
Mil gracias por todos tus buenos consejos,María José!!
Eres INCREÍBLE!!
Desde luego conocer a María José y su “Método Terol” fue toda una suerte que me mantiene sin dolor alguno desde hace ya muchos años, y de paso me ayuda a mantenerme en forma. Su Instituto de Posturología – que comparte con su hija Sonia – es una auténtica maravilla del sentido común con resultados asombrosos. Lo sorprendente es que su posturología no se incluya en cualquier plan de salud pública y/o en cualquier plan de rehabilitación (traumatología etc.). Last, but not least María José es simplemente un “sabio encanto” y es un auténtico placer compartir tiempo con ella.