BÁRBARA DEL CAMPO. Un estudio del Instituto de Salud Global de Barcelona (ISGlobal) en más de 1.000 ciudades europeas, ha evaluado la proporción de mortalidad en las urbes aplicado en la contaminación del aire. Y ha arrojado como sorprendente conclusión que tres grandes ciudades del Oeste de Madrid destacan por sus elevados niveles de contaminación. Majadahonda, Las Rozas y Pozuelo de Alarcón son comparadas ya con Madrid por el hecho de que el tráfico rodado en sus municipios y en las carreteras nacionales que las circundan, así como sus calefacciones y en menor medida sus industrias, generan contaminantes atmosféricos tan altos como los de la capital. Las urbes que se han tenido en cuenta en este análisis son las consideradas como ciudad en la base de datos Europea Urben Audit. Este proyecto se ha publicado en la revista «The Lancet Planetary Health» y también han participado la Universidad suiza de Basel y el Departamento de Ciencias de la Salud Radiológica y Ambiental de la Universidad Estatal de Colorado. Los medidores de dicha contaminación son las partículas ambientales (PM), como son la calefacción domestica o la combustión industrial, con un diámetro menor o igual a 2.5µ, así como el dióxido de carbono (NO 2) que se realiza con vehículos motorizados (coches, camiones). Entre estos dos factores que crean la contaminación, el PM 2.5 es el quinto factor de riesgo de mortalidad global, según el Estudio de la carga mundial de enfermedades, lesiones y factores de riesgo de 2015.


Bárbara del Campo

Algunas de estas muertes pueden ser evitadas siguiendo las recomendaciones de la OMS, quien dicta unos valores de contaminación que aún siguen siendo perjudiciales para la vida de los vecinos. Según el estudio del Ministerio de Ciencia e Innovación de España “el cumplimiento de las directrices de la OMS podría prevenir 51.213 muertes al año por exposición del PM 2.5 y 900 muertes por NO 2”. Esta mortalidad varía en función de la densidad de la población, los km2 y la situación geográfica de las ciudades en las que se ha realizado el estudio. Entre ellas destacan Milán, Atenas o Budapest entre las ciudades europeas con más índices de PM 2.5, seguidas de Barcelona o Madrid, mientras que estas dos últimas tienen los índices más altos en el NO 2 seguidas de Bruselas o Londres. En el Oeste de Madrid, resaltan las ciudades de Las Rozas, Majadahonda y Pozuelo de Alarcón como las más contaminadas. Entre ellas destaca Majadahonda con el porcentaje de muertes por PM 2.5 más alto, seguido de Pozuelo y por último Las Rozas. Aunque destaque Majadahonda en este parámetro, se equipara mucho con Pozuelo, siendo esta última de mayor densidad de población. Sin embargo en NO 2, los valores de los tres municipios del Oeste tienen prácticamente los mismos resultados de contaminación. En ambas variables (PM 2.5 y NO 2) destaca Madrid capital sobre estos tres municipios, pero no de una forma elevada, mientras que los parámetros que miden la contaminación general son muy superiores en la Villa y Corte. Habrá que recordar que Madrid tiene más de 3,3 millones habitantes en sus 600 km2 frente a Las Rozas, que tiene 95.000 habitantes en su urbe de 60 kilómetros cuadrados, Majadahonda, con 70.000 habitantes en 38 km2 o Pozuelo de Alarcón, que reúne en 43 Km2 un total de 86.000 habitantes.

OPINION. Los españoles tenemos un estilo de vida que provoca contaminación atmosférica o sonora, ya sea por el ruido, el calor (aires acondicionados), el frío (calefacciones) o la escasez de espacios verdes, entre otros factores. Esta situación es un problema para los vecinos que habitan los municipios grandes, ya que esto sigue siendo una de las principales causas de mortalidad en todo el mundo debido a las enfermedades respiratorias que afectan a su población de edad más avanzada. Las medidas adoptadas por el Gobierno central ante el avance de la contaminación intentan paliar estos efectos, como son las ayudas para la compra de vehículos ecológicos o la reducción del tránsito de ciertos vehículos en el centro de las ciudades, entre otros. Para reducir estas muertes, los gobiernos están obligados por la Unión Europea a tomar acciones más restrictivas para conseguir unos países más sostenibles y saludables, sobre todo dando ejemplo en las ciudades, que son una buena oportunidad para el ejemplo y el cambio. Por contra, en la retina de todos están esas otras ciudades de Asia o América que registran altísimos niveles de contaminación que causan un elevando índice de mortandad, ejemplos negativos a los que Europa no quiere parecerse.

Majadahonda Magazin