El torero Manolo Navarro con Jesulín de Ubrique: murió en la residencia de Las Rozas por coronavirus

LIDIA GARCIA. Marcos es un paciente de la residencia de mayores «Reina Sofía» de Las Rozas, con capacidad para 500 ancianos, y ha concedido desde su habitación una entrevista a Onda Cero. No todos la han escuchado pero transcrita es mucho más desgarradora, labor que hacemos desde MJD Magazin porque al igual que en los hospitales, estas circunstancias creemos que no difieren mucho del resto de las residencias de mayores de la Comunidad de Madrid, España e incluso del resto del mundo. Marcos siente como «si estuviéramos delante de un pelotón de fusilamiento, y dijeran: “hoy no os fusilamos, venga iros para dentro otra vez. A ver si mañana…”. Esperando caer o salvarte. Porque además, yo no soy médico ni nada, pero es la desatención total. Hay unos médicos que se meten abajo…, que ya te digo: no hemos visto un médico en un mes y medio. El señor que está conmigo ya lleva años aquí y tampoco. Nada de nada. Y luego hay gente que tiene que salir a otro hospital por cosas de otra enfermedad que tiene. Lo vuelven a traer pero no les hacen pruebas a ver cómo viene el hombre o si está bien o está mal. Lo meten en la habitación que le toca con uno que esté bien o mal. Si le toca con uno que esté mal y él está bien… ¡pues a tirar la moneda al aire!. Esto es de verdad… Lo que pasa es que ya llega un momento que te haces a la idea, porque yo creo que aquí entre que la gente es mayor… está hecha a la idea. Aquí los oyes toser y la mayoría dice: «no vayas por ahí, no te cruces en el pasillo con uno, que ese lo tiene»… Pero ¿cómo que lo tiene?. ¿Lo tiene y está aquí en una habitación? ¡En un pasillo! No se entiende, pero bueno… Esa es la situación». Esta es la entrevista:


Carlos Alsina

¿Cuánto tiempo lleva usted en esta residencia de mayores «Reina Sofía» de las Rozas? Marcos: -Un mes y medio. ¿Cómo han sido estas últimas semanas? Marcos: Han sido muy duras porque ha fallecido bastante gente y además la desatención es total, ni médicos, ni te vienen a… hay veces que ni hay, que sepamos nosotros, nos tienen desatendidos. Si no fuera por las auxiliares que hay, que las mujeres encima te dan ánimos. Aquí no viene nadie, los que por ejemplo como yo, que tomo sintrón, tampoco te hacen las pruebas, ni pruebas de glucosa si eres diabético. Estamos esperando… el que se muere pues se ha muerto, así de bruta es la cosa.

La información que ustedes tienen de lo que está sucediendo en la residencia. ¿Se la facilitan las auxiliares que van a las habitaciones? ¿Se van enterando ustedes de las conversaciones que tienen unos con otros? ¿A quién echan de menos cada día?. Marcos: –Exactamente. Te van diciendo este no está, le han bajado abajo que hay un módulo cerrado solo para eso. Y hay muchísimas auxiliares de baja ya con coronavirus. Hay gente más nueva pero no te dicen nada. Hay enfermos que lo tienen o casi seguro que lo tienen, y están en las habitaciones con todos nosotros, y salen por los pasillos… Y nadie dice nada. Nada…esperar, como dijo el ministro astronauta (Pedro Duque), ¡como la sanidad es tan buena, nos dejan vivir otro rato!. El ministro es un genio de la botella, ¡hay que fastidiarse!, yo tengo… no llega a 80 años, pero vamos, ¡tendré derecho a vivir!... Es la forma más sibilina que he visto de morirte, porque aquí ya convivimos con la muerte, no sabemos cuándo, no podemos salir de las habitaciones, no tienes contacto con tu familia… Por teléfono y nada más. Aquí nadie sabe absolutamente nada, y luego claro, la pobre gente que trabajan aquí tienen la orden de no decir nada. Cuando ves que al de la habitación tal no le han bajado, te enteras que se ha muerto. Aquí va a haber, ellos dicen que entre 47 y 50, pero aquí va a haber 70 u 80 muertos, eso seguro. Yo he tenido amigos que se han muerto y luego te dicen que se ha muerto de un ictus. ¡Se ha muerto de coronavirus!. Por ejemplo, el torero, que era el más antiguo que había en activo, Manolo Navarro, ese murió de coronavirus y dijeron que era de un ictus”.


El torero Manolo Navarro falleció en la residencia de Las Rozas

Las personas que tienen síntomas y que ellas mismas sospechan que están contagiadas del coronavirus ¿se les han hecho las pruebas correspondientes? Marcos: –Ninguna, aquí no nos hacen ninguna. Bueno, al que bajan ya para el módulo de abajo es que está muy fastidiado y yo no sé lo que allí abajo le harán. Pero es la desatención total. Aquí no vemos un médico… Desde que yo llegué no he visto un médico. De vez en cuando te toman la temperatura, si no tienes fiebre, estupendamente. Y si ya estás muy malo y te mueres, pues estas muerto y a la basura. Es que es tremendo ¿Eh?. Porque yo no sé, la gente es mayor aquí, pero no sé si se da cuenta la gente de que estamos en pena de muerte, que nos puede tocar a cualquiera. Claro, ya llega un momento que ya… diciendo espero, si tengo suerte me salvo, y si no pues…. Fíjate la preocupación para todas las familias. Y así estamos.

¿Y los medios de protección, las mascarillas, los guantes…? Marcos: –Nada, no tenemos nada, hay dos o tres auxiliares de enfermería que sí llevan el equipo bien. Las demás, una de esas de plástico y una mascarilla algunas. Otras ni mascarilla. Y nosotros nada de mascarilla, claro. Yo la pedí, y no hay mascarillas. Eso es como estamos aquí y hay 500 personas… bueno había. Han venido una vez los militares a desinfectar la habitación de un muerto, y dicen que han desinfectado parte de las zonas comunes de abajo. ¡Pero como no salimos!. Aquí en las habitaciones de seguridad no ha venido nadie, absolutamente nadie. Así es el plan que tenemos aquí. Escuche la entrevista completa.

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