F. UTRERA. Con el rechazo del Grupo Popular y la abstención centrista, el voto a favor de Ciudadanos (Cs), PSOE y Somos (IU estaba ausente) reprobó al ex alcalde de Majadahonda, Ricardo Romero de Tejada, del que se quitará la placa que preside la entrada al Ayuntamiento por sentarse en el banquillo de las “tarjetas black”, con la que gastó 212.000 euros como consejero de Caja Madrid antes de su quiebra. El apasionado debate, sin embargo, afloró una durísima pugna dialéctica. Manuel Ortiz, del Grupo Popular, reclamó la misma medida para el ex alcalde socialista de Majadahonda, José María Rodríguez Colorado, ya fallecido pero condenado por corrupción en el juicio del saqueo de los fondos reservados, y para los ex presidentes de Andalucía, Manuel Chaves y José Antonio Griñán. Se olvidó de la socialista de Majadahonda María Enedina Álvarez (PSOE), también imputada en las tarjetas black, pero achacó a Somos “preocuparse más del pasado que del presente o del futuro” porque Romero “dejó de ser alcalde en 2001”.

Para Manuel Ortiz (PP), en todos los procesos judiciales de Romero de Tejada (tamayazo, campo de golf) ha salido absuelto y el de las tarjetas black “aún está en juicio”. El portavoz “popular” dijo que también “el padre de Espinar (senador de Podemos) gastó 178.000 €” y acuso a la filial majariega del partido morado de “seguir los principios jurídicos del modelo venezolano: cárcel para el jefe de la Oposición”. El concejal entonó entonces su discurso más personal: “Cuando vine a vivir a Majadahonda con mis padres y mis tíos existía un modelo de ciudad que construyó Romero de Tejada y usted seguramente estaba en Andorra” dijo dirigiéndose a Alberto Moreno, entonces embajador en aquel país. A Romero de Tejada le agradeció “el auditorio Alfredo Kraus, el ambulatorio de la Seguridad Social, la peatonalización de la Gran Vía…”, por lo que juzgó la moción “bastante atrevida y desconocedora de la Historia de Majadahonda”.

David Ayuso (Ciudadanos): “Nuestro partido es un abanderado de la lucha contra la corrupción y aunque esto es un caso de administración desleal por el uso de una tarjeta cuyo dinero ha devuelto, puede definirse como “un caso de corrupción en diferido”. Es verdad que no existe una condena firme y tengo el corazón partío por ello, pero tampoco existe en el caso de la Casa Real (Urdangarín) y se han retirado sus placas (en Baleares). No estamos criminalizando a Romero de Tejada porque desconozco si lo ha hecho bien o mal pero no quiero que se vincule su nombre a Majadahonda». Cs esperó hasta el final una abstención del PP para sumarse a ella y que la moción saliese solo con los votos de PSOE y Somos, pero la negativa del Grupo Popular le empujó a votar sí a la reprobación».

Elisa Piñana (PSOE): “Hay varias placas a Romero de Tejada y queremos que sean retiradas todas, no solo la de la Plaza del Ayuntamiento. Lo solicitamos hace 2 años cuando empezó a estar cuestionado e imputado y Majadahonda no merece recordar su nombre porque no es motivo de ejemplaridad. Los políticos son personas honestas, íntegras, con actitudes y valores y reprobamos esta forma de hacer política que tenía Romero de Tejada por el perjuicio público y moral, con límites delictivos e imputaciones graves”.

Alberto Moreno (Somos): «no nos causa ninguna satisfacción presentar esta moción, pero Romero de Tejada provoca vergüenza ajena y oprobio. No es plato de buen gusto ver el nombre de Majadahonda asociado a las tarjetas black y a la Gurtel. Posiblemente también estaríamos de acuerdo en quitar todas las placas de todos los alcaldes y también podríamos haber esperado a la sentencia, pero reprobamos esta forma de hacer política y a estos políticos. Y es cierto que la crisis económica nos obliga a ser más proactivos al defender la honradez, honestidad y transparencia de los políticos así como su rendición de cuentas”.

Mercedes Pedreira (Centrista): “He sido concejala con Romero de Tejada y creo que de esa época solo quedamos Narciso de Foxá y yo. Tuvimos incluso contenciosos en las tribunales con sentencias curiosas”, dijo en alusión a una que también ganó el entonces alcalde del PP. Soy partidaria de retirar las placas por el culto a la personalidad que conllevan, pero creo que esta moción debía esperar algo más. Cuando haya sentencia condenatoria estaré de acuerdo y la aprobaré, pero mientras tanto defiendo su presunción de inocencia. Y desde luego su caso no es comparable al de su sucesor (Willy Ortega). Yo no hago reprobaciones por noticias de periódicos, no es el momento”.