«La jueza María Gavilán Rubio ha decretado el sobreseimiento provisional y el archivo de las presentes actuaciones del ‘caso elecciones’ por el que estaba siendo investigado el presidente de la Federación, Ángel María Villar. Dos causas fundamentan la decisión de esta magistrada: no puede haber prevaricación administrativa, ya que Villar «no es funcionario público». Y, además, «no hay indicios de delito penal» ya que el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD) no recogió esta posibilidad aunque el informe «está recurrido y admitido a trámite» tras la denuncia del precandidato a la FEF Miguel Ángel Galán (querellante en este caso). El periodista Alfredo Matilla ha explicado en el diario deportivo AS la últimas novedad judicial del “caso Villar”. algo que llega tras haberse tomado la decisión apartar de esta investigación al juez Marcos Ramón Porcar del juzgado de instrucción número 1 de Majadahonda.
El magistrado Marcos Ramón Porcar fue quien comenzó la instrucción de este caso y el que abrió diligencias previas contra Villar por retrasar las elecciones sin justificación y de esta formar alargar su último mandato a cinco años. «Porcar siempre se mostró duro y exigente con Villar tras sus continuos aplazamientos y sus regates en la declaración hasta que decidieron trasladarle a Móstoles para ocuparse de otros casos», dice el periodista. Ahora Galán puede interponer un recurso de apelación a lo largo de esta semana mientras Villar, paralelamente, ya ha pedido una «excepción» para convocar las elecciones en año no olímpico. Los abogados del precandidato Galán, al que apoya sobre todo el fútbol base y los equipos modestos, tienen poca fe en que esto cambie la decisión de la jueza. Sí son más optimistas en los otros casos en los que Villar está inmerso. El ‘caso Recre’, presunto trato de favor al Recreativo de Huelva, por el que debe declarar junto al directivo Padrón el próximo 23 de enero, y el ‘caso Haití’, por el que supuestamente la Federación desvío 219.500 euros de una subvención gubernamental y que debieron ir destinados a la creación de escuelas deportivas», concluye Alfredo Matilla.
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