
Toda la verdad sobre el acoso (bullying) a la niña vegetariana en el Colegio Quevedo de Majadahonda: las 5 cartas de la madre y la respuesta de MJD Magazin
MARIANA BENITO. La redacción de MJD Magazin recibió una carta el jueves 2 de marzo a las 11:56 horas en la que una mujer llamada C. G. que facilitaba sus datos personales y los de su hija, su curso, clase y colegio, pedía al periódico “que conocieran la situación que estamos viviendo en un Centro Educativo de Majadahonda por si fuera de su interés”. La carta, escrita en un tono bastante dramático, aludía a lo que estaba padeciendo su hija: “la situación que esta sufriendo en el horario del comedor”; “Desde hace 2 meses, sin descanso, una niña de 11 años debe quedarse, sentada en su sitio”; “además no puede repetir de ningún plato a no ser que se coma todo el menú, que equivale a decirle que se tiene que comer la carne”. “realmente le está produciendo un desequilibrio y falta de alimentación”; “A todo esto, se suma el comportamiento de las monitoras del comedor, que en repetidas ocasiones la sacan fuera para darle una «regañina» por su comportamiento, le dirigen malas contestaciones”; “la miran y le dirigen comentarios poco apropiados para dirigirse a una niña y en un centro educativo”; “pedimos que cesen ese tipo de comportamientos y que se actúe de una manera más humana”, “que cesen los comportamientos hostiles hacia ella”; “Muchas veces no somos conscientes del malestar que el comportamiento de un adulto ( sin ser malintencionado), puede ejercer sobre un niño”; “la importancia de que se sientan seguros y queridos en el centro escolar”; “Es una niña buena y muy sensible y esta situación le está produciendo un verdadero desequilibrio emocional”; “nos gustaría que cambiara esta situación”…
LA RESPUESTA DE MJD MAGAZIN Y UN ANTECEDENTE. Reunido el Consejo de Redacción el miércoles 8 de marzo para analizar el caso, el jueves 9 de marzo aprobó la publicación y a las 08:12 de la mañana se le comunica a esta madre: “Muchas gracias. Sra. G., nos parece muy interesante su testimonio y lo publicaremos. Le mantenemos informada. Saludos cordiales”. El análisis de la situación produjo tal debate y consternación en la redacción que si algo se lamentaba era haber tardado tanto en publicar la carta como la madre pedía, pues su envío coincidió con el cese del alcalde de Majadahonda por parte de su propio partido y la avalancha de noticias en torno a este asunto hizo que la decisión se fuera demorando. Otra de las razones de la tardanza era que esta misma señora u otra con nombre real o supuesto (Deborah T.) ya había hecho pública esta o parecida situación en las redes sociales, concretamente el 14 de enero, suscitando un apasionado debate a favor y en contra. MJD Magazin también se hizo eco de este mismo debate social el 5 de febrero recogiendo la misma controversia pero una semana después el asunto parecía ya zanjado. Hasta que el 2 de marzo llegó la carta de la señora C. G. con el mismo asunto, que finalmente se publicó el lunes 13 de marzo.
LA MADRE NO PIDIO QUE SE SUPRIMIERA SU NOMBRE NI EL DEL COLEGIO. La carta de la señora C. G. se publicó a las 08.32 de la mañana de ese lunes 13 de marzo y a las 08:33 (un minuto después) la redacción recibía de la autora el siguiente email: “Muchas gracias, pero han incluido mis datos personales (eran sólo para ustedes) y me están llegando un montón de emails. Ruego retiren mis datos del artículo. Muchas gracias. C. G. G.”. Aunque en la carta inicial no aparecía ninguna indicación de suprimir el nombre de la autora del escrito o el colegio donde había ocurrido el suceso, creemos que el derecho al anonimato o al pseudónimo para firmar la publicación de sus denuncias, críticas o sugerencias lo tienen todos los lectores de MJD Magazin (y así podrán atestiguarlo el gran número de ellos que así nos lo ha pedido y siempre que acrediten su identidad se le ha concedido). Por esta razón, al minuto siguiente se retiró su firma y se sustituyó por la de quien esto suscribe.
TERCERA CARTA DE LA MADRE, REACCIÓN POSITIVA DEL COLEGIO Y PETICION AL MINISTERIO. Veinte minutos después, ese mismo 13 de marzo de 2023, a las 8:52 horas, recibíamos una tercera carta de la madre con nuevas peticiones: “Buenos días, aparte de solicitaros que eliminéis los datos personales y del centro educativo del artículo de prensa, porque estoy recibiendo bastantes email, me gustaría reseñar: Que el lunes pasado hablé con el centro y el jefe de estudios, que no estaba al tanto de esta situación, nos atendió con bastante comprensión y la situación ha quedado mucho mejor. La niña puede levantarse y regresar al patio cuando se ha comido todo el menú que no lleva carne y puede repetir. Así que, estamos bastante contentos. Todavía queda pendiente que el Ministerio de Educación introduzca un menú vegetariano, al igual que existen otras opciones en los centros, por ejemplo, menú musulmán, bajo en hidratos, en proteínas, etc. Muchas gracias y atentamente”.
CUARTA CARTA DE LA MADRE: «ESTÁ SOLUCIONADO, PERO LA CARTA ESTÁ SACADA DE CONTEXTO Y TONO». Desde la Redacción MJD, ese mismo 13 marzo de 2023 a las 9:37 horas le contestábamos algo perplejos por el cambio de criterio pero satisfechos porque parecía haberse solucionado el problema: “Gracias C., incluimos también en comentarios sus novedades”. Y la Sra. C. G. G,. respondía a las 09:43: “Muchísimas gracias”. Sin embargo, después de comer, a las 15:38 de la tarde del lunes 13 de marzo, la redacción observaba atónita como la citada Sra C. G. G. publicaba un comentario como «Madre de la niña» en la que ya empezaba a emprenderla contra el periódico y recurría a la conocida técnica de “matar al mensajero” y no a la autora del mensaje, que era ella misma: “No ha sido bullying en ningún momento, está completamente sacado de contexto y tono. Simplemente no podía repetir, ni marcharse al patio hasta hasta que terminaba el tiempo que tienen asignado para comer. Está solucionado tanto con el centro como con las monitoras que han puesto de su parte para mejorar la situación”.
QUINTA CARTA DE LA MADRE: PIDE «RETIRAR» (CENSURAR) LA NOTICIA. Ya por la tarde y una vez transcurrida la hora de comer, revisado el correo, efectivamente había llegado ese 13 de marzo de 2023 a las 15:28 otra carta de la Sra. C. G. G., en la que pedía ya no solo retirar su nombre y el de la niña que ella misma había facilitado y que nunca se publicó, sino censurar toda la noticia: “Perdonarme, pero el título del artículo está un poco salido de tono y temo que haya gente que no comprenda que lo que pedimos es más comprensión con la gente vegetariana. Creo que puede crear discordia y malos entendidos y afectar a mi hija, cuando lleva unos días bastante bien en el comedor. Por ello, ruego retiren el artículo para no crear un tenso clima con el centro que no deseamos, pues son muy numerosos los mensajes por las redes y familias. Gracias y disculpen las molestias”. Y al día siguiente, 14 de marzo de 2023, a las 10:36 horas volvía a pedirlo con otra carta, aunque ya solo quería censurar el nombre del centro: “Por favor, insisto, por el bien de la niña y de mi familia, retiren el artículo o por lo menos nombre del centro. Ruego atiendan mi solicitud”. Esta insólita situación, que algunos de los más veteranos de esta redacción jamás habían vivido en más de 40 años de profesión, solo podía tener una respuesta: publicar todo lo acontecido con la máxima transparencia y que sean los lectores quienes juzguen el caso.
Juzgado el caso doy mi veredicto: alucinante
Muy correcta la actitud de Majadahonda Magazine! Como siempre, una publicación transparente y confiable.
No habéis contrastado la noticia, habéis hecho daño a personas inocentes.
¿Pero quien hace daño, la madre que pide publicarla y luego se arrepiente o el periodico que una vez publicada no puede retirarla por el cambio de opinion de la madre?. Solo pregunto, pero por lo poco que conozco me parece que las cosas no se publican y despublican en un periodico a capricho de quien lo pide.
La madre tendría que haber empezado por hablar con el Centro.
M. Magazin tendría que haber contrastado la noticia…Dos actuaciones a la ligera…
Vergonzoso 🤦
Muy bien MJD! 👏👏👏
Está claro que la madre se ha arrepentido de haber hablado, pero que no lo hubiera hecho desde el principio. Ahora ya es noticia.
Alucinante lo que publicáis, pensar en el daño que se hace a los demás.
Todo lo contrario, es un miedo infundado el de la madre por arrepentirse de sacarlo a la luz: todo ha sido positivo. El bullyng se ha cortado, la niña puede comer vegetariano, el Colegio y las Cuidadoras del Comedor han reaccionado de manera ejemplar cortando de raiz lo que decía la carta y el periodico ha cumplido su funcion de manera muy profesional. Felicidades a todos sobre todo a la madre por su valentía.
En primer lugar, no había bullying, en segundo lugar, la niña come lo mismo que antes de escribir la carta, ya que nunca se le ha obligado a comer carne ni pescado y además se le ha puesto siempre más ración de verduras y resto de alimentos incluidos en su dieta, en tercer lugar el centro lo único que ha hecho es explicarle a la madre la situación real que nada tiene que ver con la expuesta en la carta.
La madre no debería haber mandado la carta y menos aceptar su publicación cuando ya había hablado con el centro una semana antes y sabía la situación real.
La niña se queda en el comedor el tiempo que dura su turno, 30 minutos, si quiere repetir y se ha comido todo el menú menos la carne o el pescado puede hacerlo.
Si no se ha comido las verduras y quiere doble ración de patatas fritas, de arroz, pan o de fruta se tiene que tomar primero las verduras al igual que el resto de comensales.
Si empieza a decirles al resto de alumnos que ella come lo que le da la gana y que ellos se tienen que comer todo se habla con ella, fuera del comedor, para que no lo haga.
Los comedores escolares en centros educativos dependen de la Consejería de educación y no se puede dar un menú vegetariano al no ser equilibrado.
Por último, es injustificable que Majadahonda magazine publique esta noticia diciendo «Toda la verdad sobre el acoso a la niña vegetariana»
NO HAY NINGÚN ACOSO y es para denunciarlo a la Guardia Civil
Toda la verdad es que no habéis llamado al centro ni contrastado la información. Ni con el centro, ni con las monitoras, ni con la empresa de comedor. Os delatáis vosotros mismos. Lamentable.
Publicar situaciones de acoso escolar es una obligación.
MJM primero reconoce retraso por el aluvión de noticias de cese del alcalde.
Aunque la madre no haya dicho específicamente que no pongan su nombre, ante la duda el medio debe omitir el nombre. Solo se puede poner cuando la persona lo pida.
Los cambios de opinión de la madre hasta la petición de supresión total de la noticia huelen mucho a presiones, vengan de donde vengan.
Meterse con la madre por esto es otra clase de acoso.
Finalmente, celebremos que el objetivo se haya conseguido.
Último: sobra la palabra inglesa para explicar el acoso. Somos tan imbéciles que cada vez estamos más auto invadidos por términos en esta lengua, como si en español no existieran
Un añadido: Las peticiones hay que hacerlas a la Consejería de Educación de la Cdad de Madrid que tiene las competencias, no al Ministerio
¿Ningún miembro del Consejo de Redacción pensó que contrastar cualquier noticia es un deber ineludible para cualquier medio de comunicación?
¿Cualquier denuncia que les llegue a uds. la publican sin más?
Los protocolos obligan a comprobar la identidad de los denunciantes, cosa que hizo MM. La carta inicial de la madre no pide silenciar su nombre, todo lo contrario: “que conocieran la situación que estamos viviendo en un Centro Educativo de Majadahonda por si fuera de su interés”. No dice nada de omitir nombres, algo que hace MM cuando despues de publicada se lo pide la madre y no tenía porque hacerlo. La veracidad de la denuncia corresponde investigarla a las autoridades de Educación (CAM) o a los jueces si el acoso pasa al ambito judicial.
La verdad que estamos, muy mal de una gota de agua hacemos un mar 🌊 si eres vegetariana 🌱 no pasa nada come en tu casa 🏠 mi hijo es alérgico y buba lo dejé comer en el San Pío X . Por su Salud fin de la historia . Así otra señora publica que si las hierbas 🌿 en las acérelas. Estamos locos a todos queremos me nos resuelvan la vida por tonterías.