MANU RAMOS. «Unas 70 personas (entre ellas había varios niños) han desafiando la ley de memoria histórica homenajeado en el cementerio de Majadahonda a los nazis Ion Mota y Vasile Marín. La Policía ni se ha personado». Con este breve mensaje, el periodista Israel Merino del diario “Público” se personó este sábado 13 de enero (2024) junto al cementerio de Majadahonda para comprobar si la Delegación del Gobierno permitía o prohibía el acto organizado por la Asociación para la Custodia del Monumento a los Legionarios Rumanos caídos en Majadahonda en un terreno privado cedido por un particular. Finalmente el acto se produjo y el periodista publicó su crónica. Las redes sociales analizadas por MJD Magazin registraron unos 1.000 comentarios, la inmensa mayoría de personas de fuera de Majadahonda. La única vecina majariega que se pronunció vive en Hamburgo y se trata de Loreto: «Yo soy vecina de Majadahonda aunque ahora vivo en Hamburgo, no me suena nada esa zona… pero si la noticia es veraz, menos mal que me fui!». De todos los demás comentarios, en un 75% los autores se insultaban mutuamente o proferían descalificaciones hacia los organizadores o sus contrarios ideológicos. Esta es una muestra de los menos agresivos y más racionales.
Estefanía G. Díaz: «Si sólo han asistido 70 personas por qué le damos bola, por favor. Straisand, Straisand, Straisand«. Xoxe: «A mi parecer, enviar policía a ese grupo de frikis le daría aún más visibilidad de la que tiene y que merece. Es más, creo que «Público» también la ha cagado publicando eso por cuatro matados fanáticos». El troll de la amnistía: «Es un tema político, ahí no puede entrar la justicia, tiene amnistía permanente, tú eres el facha por meter algo que es político en judicial. R3V: «Qué poquito os gusta la libertad de expresión». Fonsi Loaiza: «Esto ha pasado hoy con total impunidad en Majadahonda (Madrid). Fascistas de Falange han organizado este homenaje a dos neonazis rumanos. Así campa a sus anchas el fascismo en España».
Jati: «Y los comunistas en pleno centro de Madrid, y etarras en Euskadi todos los días, te importa? No, porque eres un cínico o un ser prescindible». Dutch: «El fascismo campa a sus anchas y los rojos están sembrados por España. Todo en equilibrio». Alexis: «Majadahonda es una no-go zone». Juan Manuel Díez Hevia: «No sé si reír o llorar». Rocío García: «¿y porqué la Falange no se puede manifestar, reunir, o hacer homenajes? Aaaahhh, porque Vd. lo dice… ya». Carlos J. Sánchez España: «Yo diría que unos cuantos que se han perdido y no saben donde viven. Pero (decir que) «El fascismo campa a sus anchas por España» me parece que es un mucho exagerar». J. Perez Prida: «Que cantidad de trastornados, miremos el futuro, el pasado nos hace retroceder, como sigamos así, acabarán apareciendo nostálgicos del pleistoceno, que pena no tener un mínimo de conocimiento para poder avanzar». Miguel Angel Díaz Cortés: «Y una con un niño en brazos». Quique Borredá: «Todos los años en la misma fecha. No es nuevo, jamás se les ha impedido hacerlo. Terrible». E.M.: «¿Por qué tendría que haber ido la policía? De los homenajes a etarras no dices ni una palabra».
CRONICA DEL DIARIO PUBLICO (Israel Merino): «En pleno enero de 2024, algo menos de 100 fascistas se han congregado en las inmediaciones del cementerio de Majadahonda (Madrid) para homenajear a dos nazis. Desde por la mañana, el ambiente era denso cerca del monumento de la Guardia de Hierro de Majadahonda, una especie de monolito que homenajea a los rumanos nazis Ion Mota y Vasile Marín —dos héroes para el fascismo español y europeo—. A pesar de no estar comunicada a Delegación del Gobierno —según informó El País—, Falange Española de las JONS y La Vieja Guardia han usado todo su poder de convocatoria para montar un acto con megafonía, vino y ofrendas al que solo han asistido unas 70 personas. Aunque en su mayoría eran de provectísima edad, en el acto se podía ver a algunos hombres de mediana edad, varios grupos de chicos jóvenes sosteniendo banderas falangistas e incluso algunos niños —también había un cura rumano—. El acto, a pesar de estar planteado para las 12.00, ha empezado algo más tarde. Tras montar un micro y dos altavoces, se han leído varios documentos y manifiestos a trompicones —el lector tenía resaca o evidentes incapacidades cognitivas—, para después proseguir con una especie de ofrenda rumana con vino y un pan casero. Tras la ofrenda se ha procedido a cantar el ‘Cara al Sol’ y el himno de la Guardia del Hierro. Tras esta parte, que ha durado cerca de 20 minutos, se ha procedido a cantar el Cara al Sol y el himno de la Guardia de Hierro, cántico del grupo político rumano que apoyó y colaboró con el nazismo y el franquismo también en el campo de batalla. Después, a modo de ágape o colofón, se han comido las viandas ofrecidas. Entre el público, aunque la mayoría de asistentes eran extremadamente ancianos, se turnaban los clásicos cuadros de la ultraderecha española (pantalones de pana, polos con bordados de la bandera, gafas de aviador) con neonazis embutidos en botas militares y cazadoras tipo Bomber».
«En general, el ambiente era raro y denso, habiendo muy poca camaradería entre los neonazis españoles, singularmente racistas por naturaleza, y los rumanos. Además, al estar el monumento muy cerca de la tapia del cementerio municipal, todo se veía tan macabro como un cocido en agosto. Uno de los grupos organizadores e instigadores ha sido Falange Española de las JONS, cuyo liderazgo recae sobre Manuel Andrino. Este sujeto —asistente también al aquelarre, por supuesto— es rechazado incluso en muchos círculos fascistas por no ser apoyado por la familia de José Antonio Primo de Rivera, fundador de la organización. El homenaje del 13 de enero a los nazis Mota y Marín lleva realizándose durante años en Majadahonda. Sin embargo, no es muy bien recibido por todos. El PSOE —en la oposición de este municipio a pocos kilómetros de Madrid— ha solicitado al equipo de gobierno popular que retire el extraño monolito, pero no se ha actuado de ninguna forma. Desde el Ayuntamiento muestran su intención de derruirlo, aunque aseguran que no es un trámite sencillo por encontrarse en terrenos privados. El acto, en el que se han realizado constantemente saludos romanos, se han mostrado banderas fascistas y se ha homenajeado a dos soldados nazis, podría ser un presunto incumplimiento de la ley de memoria histórica. Sin embargo, en la zona no había presencia alguna de policías uniformados», finaliza la reseña.
Ganas de joder, de tocar los c###### de esa gente.
No tienen nada más útil que hacer?
Ir a picar piedra, por ejemplo????
A picar y levantar piedra los vascones que homenajean día sí y día también a los asesinos etarras, ¿Eh, fenomeno?…
Diario Publico está es la mejor noticia que tiene que dar, que diario más pobre. Dejar que la gente pueda manifestar sus ideas, que están en una parcela privada, y cuando proetarras, independentistas, etc, lo hacen, y además en lugares públicos y de forma multitudinaria, a eso sí lo llamáis «libertad de expresión», y lo consideráis muy respetable.
Soy vecino de Majadahonda desde hace 23 años.
No tenia ni idea de que ese monumento estuviera ahi ni de lo que significaba. El diario público lo unico que hace es meter cizaña, como siempre. De hecho el sabado pasé por alli y ni me di cuenta así que poca gente habría.
Deberíamos preocuparnos de otras cosas mas importantes y no de dos rumanos muertos en la mitad del siglo XX. Y el periodico este tambien.
Me parece simplista y engañoso, igualar al fascismo y/o nazismo, con una de las expresiones de sobrevivencia del pueblo vasco llamada ETA ( pueblo,a quien el franquismo llegó hasta prohibirle su propia lengua, en su territorio ; arrestaba y no pocas veces ejecutaba y desaparecía,a sus ciudadanos por gusto y capricho ).
Hay mucha diferencia en la magnitud de la maquinaria bélica (ejércitos transnacionales) empleada por uno y otro bando y por supuesto en la intención final. El fascismo, franquismo antes, y hoy en día el sionismo, (apoyado por la trans nacional bélica yanqui), busca la desaparición o anulación total de una raza y/o cultura, para consolidar la propia como «superior». En mi estadías en Madrid ,durante el franquismo, pude constatar el temor constante en que vivían ciudadanos o estudiantes vascos en esa «sucursal del cielo».
Si fuera un homenaje a la Pasionaria brazo ejecutor de múltiples sentencias, no habría nada que decir, curioso la doble vara de medir de estos zurdos hipócritas .