«Dicen que Villaviciosa de Odón está entre las ocho poblaciones con la renta per capita más elevada de la Comunidad de Madrid o entre las diez a nivel nacional, pero, si esto es así, no se corresponde con sus malos servicios, fruto de la desidia y la ineptitud de sus gobernantes. Pero, aunque su posición en ese ranking sea cierta, es un pueblo atrasado, alejado de la modernidad de ciudades como Las Rozas, Majadahonda, Pozuelo, etc., en donde funciona una cierta coherencia entre el bienestar de sus pobladores y los gobiernos conservadores. Aquí, sólo “gozamos” de esa reaccionaria forma de gobierno frente a unos nefastos servicios, lo que no deja de ser una flagrante contradicción». Así se expresa Antonio José Gil Padilla (@agilpadilla) en el portal Villaviciosadigital, en el que destaca las deficiencias que presenta esta ciudad frente a otras como Majadahonda.
El profesor Gil Padilla se define como «analista, marxista, ateo y republicano» y sus comparaciones se centran en los problemas que afectan al día a día de la vida de los vecinos de Villaviciosa de Odón. Según el autor, no tienen un equivalente en las poblaciones aledañas como Majadahonda: «Si nos atuviéramos a los deficientes servicios, a la pobre oferta cultural, a la falta de espacios recreativos y culturales, etc., los ciudadanos, en aras de la razón y de la coherencia, deberíamos estar en permanente estado de protesta, reclamando unas mejores condiciones de vida», concluye en su artículo.
