Voluntarios de los campos de trabajo internacionales en las instalaciones majariegas de GREFA.
JORGE RUBIO. La agrupación ecologista GREFA realiza durante el mes de agosto dos campos de trabajo internacionales en sus instalaciones de Majadahonda. Estas actividades consisten en la realización de trabajos de voluntariado por parte de personas adultas de diversas nacionalidades y siempre de interés comunitario ambiental, social o cultural. GREFA comenzó con estas actuaciones en los años 90, aunque fueron abandonadas durante un tiempo, hasta hace cuatro años en las que se retomó esta iniciativa. Ahora, jóvenes de todo el mundo han llegado a Majadahonda para contribuir con su trabajo desinteresado a mejorar las instalaciones de GREFA y ayudar a que los proyectos medioambientales puedan salir adelante.
Servicio Civil Internacional
Estos campos de trabajo se realizan de forma conjunta entre GREFA y el Servicio Civil Internacional (SCI). Esta última organización es la encargada de realizar las gestiones para que se puedan realizar estos trabajos de voluntariado por prácticamente todos los países del mundo. Para poder participar en estos campos de trabajo internacionales no se exigen muchos requisitos, salvo ser mayor de edad, tener compromiso con el proyecto por el que se ha optado y en algunos casos, la realización de un curso teórico. Los costes del transporte tienen que ser asumidos por el voluntario, aunque la estancia en el país extranjero está garantizada por la organización que oferta el campo de trabajo.
Los voluntarios de los campos de trabajo internacionales en las instalaciones de grandes águilas de GREFA.
Fernando Garcés, miembro de GREFA, ha señalado a MJD Magazin que «este año se han organizado dos campos de trabajo, uno de los cuales termina el 16 de agosto, mientras que el segundo comenzará a partir de la semana que viene y se prolongará hasta finales de mes». La principal función de los voluntarios es la mejora de las instalaciones majariegas de GREFA, como la realizada en uno de los nuevos recintos de educación ambiental o la limpieza de los lugares donde residen las aves que son acogidas. En total, una quincena de voluntarios procedentes de países como Polonia, Rusia, República Checa, Turquía o Taiwan, entre otros se han sumado al primer campo de trabajo. A estos muy pronto les darán tomarán el relevo otros voluntarios que llegarán próximamente a Majadahonda para sumarse al próximo campo de trabajo internacional de GREFA.
Además de estas actividades de los voluntarios, el trabajo en GREFA no cesa durante los meses de verano. A los proyectos de la agrupación que se han realizado estos meses, como la suelta de galápagos europeos por la sierra de Madrid, hay que sumar las incidencias relacionadas con la fauna salvaje. Por ejemplo, el Hospital de Fauna Salvaje ha vivido una autentica vorágine de actividad durante el mes de julio recibiendo a los vencejos caídos de sus nidos por culpa de la ola de calor. Gracias al trabajo de los voluntarios de los campos de trabajo internacionales, GREFA puede continuar con su labor de ayuda al medio ambiente durante estos complicados meses de verano.
