Es difícil entusiasmarse con los impuestos; incluso si no tienes que pagar tantos impuestos en tu comunidad o si tienes los impuestos más bajos de Europa, como en Andorra, muchas veces éstos pueden llegar a ser complicados. Sin embargo, nadie escapa de la ley y tarde o temprano hay que declararlos. A continuación, presentamos algunos errores comunes que pueden aparecer y consejos útiles que le servirán al momento de declarar sus impuestos.
Declarar impuestos sin ayuda
Sin ayuda es muy fácil estresarse, sobre todo cuando se trata de declarar los impuestos. Muchas veces tenemos la necesidad de demostrar nuestra capacidad, para manejar temas personales y otras veces simplemente no queremos que personas extrañas manejen algo tan privado como nuestros gastos. Sin embargo, podemos pedir ayuda al momento de ocuparnos de la temporada de impuestos. Si pedimos ayuda entendemos el proceso paso a paso, evitamos errores de principiante y aprovechamos oportunidades para ahorrar dinero. No importa si es la primera vez que estamos declarando o ya lo hemos hecho múltiples veces; si nos sentimos desorientados o no sabemos cómo proceder, nunca está de más reconocer que necesitamos ayuda y pedirla.
No declarar a tiempo
Este es otro error muy frecuente pues muchas veces bien sea por mal hábito o por falta de tiempo, tenemos la mala costumbre de dejar todo para última hora. Entonces creemos que las fechas límites corresponden al día que nos toca declarar. Por eso es importante ver el calendario tributario y recordar que quienes no presenten oportunamente la declaración, pueden ser sancionados y dependiendo de la comunidad en la que se encuentren tener que pagar una multa correspondiente. En general, los expertos sugieren que es mejor presentar las declaraciones de impuestos antes de tiempo que hacerlo tarde. Mientras más temprano la presente, más posibilidades tendrá de evitar el robo de identidad relacionado con los impuestos, un crimen que ha ido aumentando. Además, si espera un reembolso, también es más probable que lo obtenga antes.
No facilitar todos los documentos a las áreas contables
Declarar los impuestos muchas veces implica mucho papeleo y otras tantas entre tantos papeles se pueden olvidar cosas importantes. Sin embargo, a nadie le gustaría estar en la posición de Shakira así que es importante siempre tener todo en orden. Así pues, es importante entregar los documentos al área contable de forma oportuna; el no hacerlo podría generar que estos dejen de ser contabilizados y dicha omisión provocaría un error, en el establecimiento de los ingresos finales.
No declarar por tener bajos ingresos
Incluso si está por debajo del umbral de declaración, debe presentar la solicitud sin importar lo bajos que puedan llegar a ser sus ingresos como empresa o como individuo. Asumir que solo se declaran impuestos si el ingreso o patrimonio es mayor a un monto determinado, sin tomar en cuenta que para estas declaraciones se deben considerar cualquier tipo de gastos, incluyendo las tarjetas de crédito.
No declarar por tener ingresos de dinero en efectivo
Podríamos pensar que las propinas o el dinero en efectivo son un ingreso no declarable, sin embargo esto es algo erróneo. Todas las retribuciones que el empleado reciba, se consideran ingresos y por lo tanto deberán ser consideradas en la relación de ingresos y egresos que se debe realizar antes de declarar los impuestos. Es importante que saber el empleado puede recibir diferentes tipos de propinas, como las propinas en efectivo son toda propina recibida por parte de clientes, propinas electrónicas (pagadas por ejemplo, con tarjeta de crédito o débito), propinas distribuidas al empleado por el empleador y las propinas recibidas de otros empleados como parte de todo arreglo de compartir propinas. Además, se propinas recibidas tanto directa como indirectamente.
No estar al tanto de las normas contables
La eliminación, unificación o nacimiento de impuestos siempre traerá consigo reformas de las normas contables. Siempre hay estar al tanto puesto que las normas contables varían constantemente, por lo que es importante que el responsable de la contabilidad esté pendiente de estos cambios. Para llevar una buena contabilidad, la información es clave. Cometer uno o varios de estos errores puede conllevar a una declaración de impuestos que no se ajuste a la realidad. Incluso pudiera recibir multa, de la cual el monto podría variar de acuerdo a la gravedad y al momento en que se esté solventando la situación.
En todo caso, es importante que cada nación haga una planificación tributaria con el fin de generar conciencia en los contribuyentes en relación a sus ingresos y de lo que pueden estar pagando en impuestos. Al hacer esta planificación cada ciudadano podría proyectar esa cifra y el día que le corresponda pagar pues, se tiene el flujo de caja para hacerlo. Como ciudadanos tenemos muchos deberes, entre ellos cumplir las obligaciones fiscales. Infórmate constantemente y realiza los trámites necesarios para evitar alguna sanción por parte de la autoridad fiscal.
