El fotógrafo Alfonso Zubiaga lleva más de 30 años residiendo en Majadahonda: «Me gusta mucho»

ELENA MARTICORENA. El fotógrafo Alfonso Zubiaga volvió de sus vacaciones en Asturias en este verano de 2022 para seguir desvelando en esta última parte de la entrevista concedida a Majadahonda Magazin su trayectoria y compartir sus reflexiones sobre su obra. «Majadahonda es el sitio donde vivo desde el año 1987 y donde tengo mi estudio. Mi vinculación con el municipio es muy profunda porque llevo muchos años residiendo en él y me gusta mucho» afirma. Su evolución como artista es innegable y así lo transmite el fotógrafo: «Al venir de la fotografía publicitaria me costó mucho cambiar el chip para empezar a hacer fotos más creativas. Cuando siempre te has dedicado a hacer fotos en las que te daban un boceto y una idea y tu solamente tenias que hacer una fotografía más bonita de lo que realmente te estaban contando, cuesta bastante adaptarse a la idea de fotografía creativa. En definitiva que las imágenes tengan un mensaje o una intención era un nuevo objetivo para mí. A medida que he ido realizando distintas series, encuentro puntos de coherencia en todo mi trabajo, sobre todo lo que más destaca es que soy un constructor de imágenes, es decir estas se van formando hasta la imagen final. Muchas veces hago series de fotos que no vuelvo a ver en varios años y cuando ya se claramente lo que tengo que hacer con ellas o la forma de elegirlas, comienzo a realizar el trabajo final».


Elena Marticorena

¿Cómo describirías tu obra? Mi obra explora, por una parte, los residuos de la fotografía, lo que ahora se llama la post-fotografía. Últimamente estoy trabajando con mi archivo, con fotos realizadas hace 20 o 30 años. Cuando yo empecé, cada vez que se hacía una sesión de fotografía y se utilizaba película, se sacaban bastantes fotos. Era muy común sacar tiradas de fotos más claras y otras más oscuras, que después eran descartadas. Personalmente le entregaba a cada cliente la cantidad suficientes de fotografías, pero aún así yo me quedaba con muchas sobrantes. Además, hoy en día, se pueden hacer al día mil millones de fotografías, de las cuales el 99% son fotos que no se usan para nada, que desaparecen, y que pasan a la basura. Y habiendo tal cantidad de basura fotográfica, se puede empezar a utilizar como obra de arte.


Fotografía Binario II. Asturias de la serie «No es caos, solo binario» de Alfonso Zubiaga

¿Y lo que no es basura fotográfica? Por otro lado, tengo un proyecto, que se basa en proyecciones nocturnas sobre islas. Lo que hago es proyectar en lenguaje binario, la palabra «Fucking Art» que representa, un poco, lo que significa ser artista hoy en día. Es decir, la gente piensa que los artistas no comemos, y es muy difícil sobrevivir en el mundo del arte. Además, el tema del reciclado tiene también un factor importante que es la memoria. Yo voy viendo imágenes que he realizado hace ya casi 30 años y eso hace despertar la memoria, y te hace volver a recordar el momento o los instantes que detuve y plasmé en una fotografía. Soy un enamorado de la fotografía, aun llevando trabajando en ella casi 40 años, creo que he tenido mucha suerte de haber desarrollado esta profesión, pero sobre todo de haber podido vivir de ella.

Majadahonda Magazin