JORGE RUBIO. Tiempo de despedidas en el Ayuntamiento de Majadahonda. Si el propio alcalde, Narciso de Foxá, anunciaba hace unos meses que no repetiría en el cargo “salvo mandato superior” y el concejal de Izquierda Unida (IU), Juancho Santana recordaba que su acta quedaría libre en 2019 por haber sobrepasado el límite de 2 legislaturas que marca su partido, el último pleno del año 2017 registró otro adiós: el de David Ayuso, edil de Ciudadanos (Cs), que reveló que “casi con total seguridad este concejal no va a ver” la próxima legislatura la aplicación de la RPT aprobada (relación de puestos de trabajo) por lo que para verificar si se cumple o no esa moción “estarán el resto de concejales para reiterar su cumplimiento pleno tras pleno, si es que después de la RPT no se llega a cumplir”. Y lo explicó con la frase de la película «Amanece que no es poco» de José Luis Cuerda. Un guion surrealista repleto de situaciones de humor delirante en un pueblo de la Sierra de Albacete donde un joven ingeniero español que trabaja en la Universidad de Oklahoma regresa a España para disfrutar de un año sabático y junto a su padre llega a un remoto pueblo de la montaña que parece desierto, aunque en realidad todos los vecinos están en misa, como cada día del año.

Lejos de mostrar pesadumbre, David Ayuso defendió además la renovación en los cargos públicos y lo hizo con ese símil cinematográfico: “nos podemos trasladar a una gran película en la que un pueblo le decía al alcalde: “usted es necesario, nosotros contingentes”. Aquí básicamente los empleados públicos son los necesarios y lógicamente nosotros (los políticos) los contingentes. Evidentemente hay que agradecer siempre a los empleados públicos la gran tarea y labor que hacen año tras año con independencia de que haya espíritu navideño, carnavalero o carnavalesco”. Y recordó que con la RPT “habrá que reorganizar todo el Ayuntamiento” y probablemente se proceda a una “funcionarización” de una institución que ya cuenta con 600 funcionarios, según el alcalde. Y con un “Nada más y felices fiestas a todos los majariegos” dijo adiós.

En tono algo más distendido, el concejal Ángel Alonso (PP) también sugirió la idea de que “dentro de 2 años”, cuando concluya la legislatura en mayo de 2019, quizás tendría que pedir trabajo al socialista Zacarías Martínez-Maíllo, que desempeña sus funciones en el banco BBVA y siempre le obsequia con el apelativo de “director financiero del Ayuntamiento” por sus continuos superávits. No le gustó la idea al portavoz del Grupo Socialista, que con menos ironía respondió que “no iba a ser contratado nunca” por su entidad financiera, si es que de él dependiera. Siga en Majadahonda o no, lo cierto es que Alonso sigue viviendo la política con intensidad y al día siguiente cogió el tren rumbo a Barcelona, donde participó como observador de las elecciones en Cataluña por el PP.