Arquitectura: una enorme mansión se ha inaugurado este mes de mayo (2024) en Majadahonda fruto del esfuerzo de sus propietarios y del carácter emprendedor de una saga que comenzó sus inicios de manera humilde, proporcionando un gran número de empleos en esta ciudad y aportando una riqueza y prosperidad que también redunda en forma de impuestos.

MARIANA BENITO. Una enorme mansión se ha inaugurado este mes de mayo (2024) en Majadahonda fruto del esfuerzo de sus propietarios y del carácter emprendedor de una saga que comenzó sus inicios de manera humilde, proporcionando un gran número de empleos en esta ciudad y aportando una riqueza y prosperidad que también redunda en forma de impuestos. Hablamos de los Labrandero, cuyo origen radica en el empresario Don Pedro Labrandero, que falleció el 25 de enero de 2023 dejando un enorme vacío entre familiares y amigos que lo conocieron y apreciaron. Con un lleno apoteósico y una ausencia de representación institucional del Ayuntamiento de Majadahonda, su funeral se celebró el lunes 6 de febrero en la iglesia de Santa Catalina Mártir de Majadahonda. «Agradecemos vuestro cariño y que nos acompañéis para dar gracias por haber compartido nuestra vida con una persona tan buena, que ya está al lado de Dios nuestro Señor», había notificado la familia a sus más allegados, pero se encontró con que las muestras de afecto eran innumerables hasta el punto de llenar el templo y tener que salir los asistentes al exterior por falta de aforo. Sí asistieron conocidos representantes de la sociedad civil y del comercio de Majadahonda.


Pedro Labrandero, fundador del grupo Labrandero e Hijos

«UN MAJARIEGO DE BIEN». El párroco Francisco Ruano pronunció una sentida homilía en la que destacó el carácter extremadamente laborioso de Don Pedro Labrandero y su ejemplo para su familia y el resto de la ciudad. También subió al púlpito su hija, que recordó entrañables momentos en los que su padre, ya sin apenas habla, dirigía su mirada hacia su esposa transmitiendo todo el amor que había acumulado durante tantos años de matrimonio. El acto litúrgico concluyó con el cántico de «La Muerte no es el Final«, la célebre canción compuesta por el sacerdote español Cesáreo Gabaráin Azurmendi. “Hoy, el cielo es más cielo que ayer, pues ha llegado a él Pedro Labrandero, un Majariego de bien”.


La casa de los Labrandero está construida con un estilo sobrio pero no por ello deja de ser majestuosa y elegante

PRIORIDAD: EL EMPLEO. Con este escueto mensaje, el miércoles 25 de enero de 2023 la familia Labrandero comunicaba la triste noticia del fallecimiento del más longevo de su dinastía y desde la redacción de este medio de comunicación trasladábamos nuestro más sentido pésame a familiares y allegados de tan insigne vecino de Majadahonda. Sus últimas palabras en un acto público al recibir un galardón como empresario de Majadahonda fueron las siguientes: “No sé si lo merezco, pero con mucho orgullo acepto el premio. El grupo que represento, que es Labrandero e Hijos, con muchísimo esfuerzo, atendido por mis hijos, ha aumentado sus comercios de tal manera que no sé por qué razón nuestra plantilla ha subido más de un 50% y la construcción de viviendas la tenemos en gran apogeo. Por todo esto yo pregunto: ¿Es así como se fomenta el empleo?. Creo que sí, así es como se fomenta el empleo. Aumentando mi plantilla y haciendo todo un esfuerzo para que todos los que están a nuestro lado puedan seguir viviendo de Labrandero. Los empleados son estos que con su gran esfuerzo y trabajo siguen y están a nuestro lado, haciendo todo su esfuerzo”. 

Los almacenes Labrandero de fruta y verdura son un emblema de calidad en Majadahonda

«PROFETA EN SU TIERRA». Este discurso fue pronunciado en junio de 2017, durante las “Primeras Jornadas de la Economía Social y el Emprendimiento Autónomo”, cuando el Ayuntamiento le hizo entrega de un reconocimiento empresarial como fundador de una empresa familiar, momento en el que los asistentes pudieron escuchar esas emotivas palabras. Y seguidamente su hija, Mª Ángeles Labrandero, agradeció este premio diciendo: “Él sí es profeta en su tierra, la gente le quiere y le admira en el pueblo. Como empresa familiar ha logrado inculcar a sus descendientes la devoción por el trabajo. El tesón, el compromiso con la sociedad, con sus trabajadores y con sus clientes, vinculando de esta forma el apellido Labrandero a Majadahonda y haciendo más grande a este nuestro querido pueblo”.

El nuevo «casoplón» de los Labrandero en Majadahonda

BIOGRAFIA DE PEDRO LABRANDERO: “Pedro Labrandero Gregorio nació el 15 de mayo de 1926. Hijo de Sofía y Lino y descendiente de los primeros fundadores del pueblo de Majadahonda, pocos pueden presumir de tanta “autenticidad” en sus apellidos. Como generación cercana a la guerra civil, sus estudios se vieron interrumpidos por la misma. El hambre y las necesidades en la familia lo obligaron a comenzar a trabajar desde muy jovencito. Conoció al amor de su vida, su esposa Mª Angeles Labrandero Gala, y crearon su hogar con la sólida base del amor y el respeto. Ella es otra Majariega autentica y como no, otra gran mujer no detrás de un gran hombre, sino a su lado, trabajando mano a mano con su esposo. Ambos comenzaron con el negocio de frutas y poco a poco fueron dimensionando esta actividad, hasta el momento actual que es una referencia en todo el sector». 

Pedro Labrandero

PEDRO LABRANDERO NO SE JUBILÓ NI CON 91 AÑOS Y FUE «PROFETA EN SU TIERRA»: «Los beneficios que conseguían, lejos de gastarlos, los invertían en la promoción y construcción, siendo en la actualidad una actividad paralela en dimensiones e importancia. Podemos afirmar que Pedro es una de esas personas “especiales” que nacen cada ciertos años: los que le conocen le admiran por su talento innato, listo e inteligente como pocos, trabajador incansable y hombre de valores sólidos. Su trayectoria se define por el trabajo (todavía no se había jubilado con 91 años) el esfuerzo y siempre la rectitud y transparencia en los negocios. Sí, es profeta en su tierra, todo el mundo le quiere y admira. Como empresa familiar ha logrado inculcar a sus descendientes la devoción por el trabajo, el levantarse una y mil veces ante los inconvenientes, el tesón, el compromiso con la sociedad y con sus trabajadores y clientes, vinculando el apellido Labrandero a Majadahonda y haciendo más grande a este nuestro querido pueblo».

Una majestuosa mansión recuerda su legado y su memoria.

«APASIONADO DE LA POESÍA, no ha olvidado en los más entrañables momentos de su vida dedicarnos sus inspiraciones a sus 4 hijos, 9 nietos y sus 5 y medio bisnietos… Pero si algo es de destacar de este Majariego de prestigio, es su corazón: es un hombre bueno, como tal se le quiere, como tal se le recordará dentro de muchos años. Y ha sabido unir trabajo, emprendimiento y bondad en una vida apasionada que muchos han podido compartir”, señalaba la semblanza escrita en 2017. Aunque tuvo sus ideas, Don Pedro Labrandero siempre mantuvo una actitud de neutralidad política y su dedicación fue siempre la empresa. Cuando se va a cumplir el año y medio de su fallecimiento, descanse en Paz este alma tan ligada a Majadahonda, cuyo apellido ennoblece y da prestigio a esta ciudad y cuyo funeral estuvo a la altura de su personalidad y de su alma. Y ahora una majestuosa mansión recuerda su legado y su memoria.

Majadahonda Magazin