Las consecuencias de la «batalla campal» que se vivió en las fiestas de Majadahonda comienzan a tener repercusiones en las localidades vecinas, en especial en Las Rozas que celebra sus fiestas patronales de forma prácticamente inminente. El consistorio roceño ha tomado una serie de medidas con el objetivo de evitar un posible contagio de la violencia y de esta forma impedir que se repitan las imágenes vividas en Majadahonda. Por ejemplo, algunas de las decisiones que se han tomado son la introducción de tres cámaras de videovigilancia, que controlarán permanentemente el recinto, el cercado de la discoteca móvil, la ampliación de la zona de seguridad y de atención sanitaria, la prohibición del acceso al recinto ferial con cristal y delimitar el acceso al parking del recinto ferial . Además, la presencia policial se reforzará con 150 agentes que velarán para mantener la seguridad de todos los asistentes y evitar que los posibles conflictos vayan a más. Los medios de comunicación a nivel nacional se han hecho eco de estos sucesos y recogen en sus noticias el lamentable episodio de violencia vivido en Majadahonda así como las medidas tomadas por Las Rozas para evitar un conflicto de características similares. A continuación reproducimos la cobertura ofrecida por ellos en esta materia:


Recinto ferial de Las Rozas

TELE 5 (Fernando López García): Varios ayuntamientos de Madrid refuerzan la seguridad en sus fiestas para evitar batallas campales. Las brutales imágenes de la batalla campal que se produjo el pasado fin de semana en Majadahonda, han puesto en alerta a la localidad madrileña de Las Rozas que da comienzo a sus fiestas este fin de semana. Según su alcalde, José de la Uz, la discoteca móvil este año se va a vallar por primera vez. Se va a ampliar la zona de seguridad y de atención sanitaria. Se va a prohibir el acceso al recinto con cristal que se pueda arrojar y van a incrementar la presencia policial con 150 agentes. Presencia policial para evitar peleas como la que también se produjo en Aranjuez hace dos semanas o los enfrentamientos con la policía en las fiestas de Pinto que también se saldó con otros 3 detenidos y varios heridos. En todas ellas el cóctel es el mismo, jóvenes que en muchas ocasiones suelen ser menores de edad, y que combinan alcohol y drogas. La mayoría de estos altercados se producen después de un botellón que se salda con una larga lista de heridos y detenciones.

CUATRO: En las últimas semanas se han registrado graves incidentes en las fiestas de distintos municipios madrileños. La última batalla campal entre jóvenes y policías tuvo lugar el pasado fin de semana en Majadahonda y se saldó con 17 agentes heridos y 27 jóvenes detenidos, entre ellos siete menores. Por ello municipios como Las Rozas, cuyas fiestas patronales tendrán lugar la próxima semana, se blindan ya para no tener que lamentar altercados como estos. Las vallas y cámaras de seguridad se reparten por los recintos con la finalidad de evitar macropeleas como la sufrida en la feria de Aranjuez hace quince días, o los altercados contra la policía de Pinto en agosto.

ABC: Tener la fiesta en paz. Eso es lo que pretende el municipio de Las Rozas durante la celebración de San Miguel, su patrón, del 22 de septiembre al próximo 2 de octubre. Para ello, reforzará la presencia de efectivos policiales entre un 30% y un 40% los días «grandes», el último fin de semana del mes, cuando se prevé la mayor afluencia de público. Además de los 150 miembros de Policía Local, Guardia Civil y Emergencias de esas fechas –127 el resto de días– por primera vez, la discoteca móvil estará perimetrada, contará con una sola puerta de entrada y salida y tres vías de evacuación. Además, el acceso dispondrá de un marcador para contabilizar el aforo y la Policía Local tendrá detectores de metales y perros de la Unidad Canina con el fin de que los asistentes no introduzcan armas, botellas de cristal, drogas o sustancias peligrosas. Tres cámaras de videovigilancia controlarán permanentemente el recinto. Otros años los agentes se tenían que limitar a contemplar las imágenes y hacer controles aleatorios y/o actuar si observaban algo sospechoso.

El vallado y el aumento de medios, objetivo del equipo de gobierno, otorgarán mayores garantías, precisaron fuentes municipales. Por ejemplo con los menores, a los que no se les permitirá acceder a los lugares en los que se pueda beber alcohol. Además del incremento de las patrullas uniformadas y de paisano, se instalarán bolardos, maceteros y otros elementos que obstaculicen el paso de vehículos entre la zona centro y la plaza de España. Y en el recinto ferial se delimitará el acceso al parking con el fin de que ningún vehículo pueda acceder sin control, entre otras medidas destinadas a impedir atentados terroristas. Está por ver si este «blindaje» es suficiente para evitar altercados derivados del cóctel alcohol-drogas y multitud, como en la decena de sucesos que se han registrado en las fiestas patronales de la región este verano. La Delegación de Gobierno subraya que los incidentes registrados son «hechos aislados». «La colaboración entre todos los cuerpos policiales es absoluta», y recuerdan que entre agosto y septiembre se han celebrado 40 juntas extraordinarias de seguridad para analizar los dispositivos de las fiestas.

 

Majadahonda Magazin