J. RUBIO / F. UTRERA. El voto de calidad del alcalde, Narciso de Foxá, salvó este jueves al Grupo Popular de perder una votación en el pleno del Ayuntamiento de Majadahonda tras registrarse un empate a 12 votos. ¿Quien era el concejal número 25? Nada más y nada menos que Juancho Santana (IU), quizás el edil que menos ha «faltado a clase» a lo largo de las dos últimas legislaturas. Y para una vez que lo hace… El asunto, además, no era baladí: proclamar a Majadahonda como «ciudad libre de paraísos fiscales». Era una de las mociones presentadas por  los Grupos Municipales Ciudadanos, Socialista, Somos Majadahonda e Izquierda Unida con la que pretendía instar una política de contratación que favoreciese las buenas conductas tributarias de las empresas adjudicatarias del consistorio y que desde las instituciones centrales se trabaje en esta misma dirección. Pero Santana había anunciado que un viaje a París de carácter familiar y sacado con mucha antelación le iba a impedir asistir al final del pleno. Nadie pensó que tuviera transcendencia, pero…

El encargado de presentar la moción fue Alberto Moreno (Somos Majadahonda) que destacó que según su estimación «hecha a la baja» el dinero que se encuentra en este tipo de paraísos es de «7,6 billones de euros», aunque según otras entidades, como Tax Free alcanza los «24 billones». Para ilustrar de forma más significativa esta cifra recordó que el PIB español ronda el billón de euros y que por tanto, en «la cifra más moderada hablamos de 7,6 veces el PIB español». Conscientes de la dificultad de llevar a la práctica esta moción, el portavoz de Somos destaco que «sabemos que no tenemos medios para saber si hay empresas que evaden impuestos en paraísos fiscales y que se presentan a concurso. Pero sí podemos introducir elementos de ética fiscal en nuestros plenos«. Una moción que no supo convencer al Grupo Popular ni a Centristas de Majadahonda que votaron en contra y gracias a través del voto de calidad del Alcalde esta iniciativa fue rechaza dejando el siguiente resultado: 12 votos a favor (Ciudadanos, PSOE, Somos) y 12 votos en contra (PP y Centristas).

«La verdad es que he leído esta moción con muchísima atención. Me parece que el Ayuntamiento se declare zona libre de paraísos fiscales es poco serio. ¿Cómo se sabe que las empresas no están en paraísos fiscales? Nosotros no tenemos esa capacidad. Eso lo tiene que determinar la ley«, señaló Mercedes Pedreira (Centristas) en su intervención. También aprovechó su turno para presentar una alternativa «que el Ayuntamiento se dirija al Gobierno para que se presente una ley para que en la normativa de contratos públicos se comprometan a asegurar que no tienen cuentas en paraísos fiscales». Para cerrar su turno de palabra, Mercedes Pedreira recurrió a la ironía para asegurar que «podríamos decir que somos una zona saturada fiscalmente» para terminar su intervención de forma más preocupada señalando que «si nos metemos en este charco, podemos acabar en el juzgado».

El paraíso fiscal de Delaware

El encargado de dar la réplica por parte del Equipo de Gobierno fue Manuel Ortíz (PP) que calificó la iniciativa como «pretenciosa» ya que se imaginaba que «alguno soñaba por la noche que esta noticia salía por la mañana en la portada del New York Times». Ortiz señaló que a pesar de estar de acuerdo con el espíritu de la propuesta, su voto iba a ser en contra al ser «una moción ilegal». No le faltó ironía al señalar que «si esas empresas no le comunican sus fondos opacos a Hacienda ¿nos lo van a decir a nosotros?». Además, destacó que «el Ayuntamiento ya favorece las conductas fiscales responsables» y que «se pide a las empresas un certificado de que estén al corriente de pagos con la Administración Pública».

La silla vacía de Juancho Santana (IU)

Alberto Moreno aprovechó su turno de réplica para destacar que las empresas que trabajan en «países que son paraísos fiscales no son el objetivo de la moción» y que en los de las compañías del IBEX «891 empresas están en paraísos fiscales, de las cuales prácticamente la mitad están en Delaware» para terminar asegurando que existe una «política más destinada a la evasión fiscal que al negocio normal«. Moreno admitió que no toda el IBEX 35 tiene fondos en paraísos fiscales y finalmente intervino Narciso de Foxá para exclamar: «¡con esta moción no podremos comprar ordenadores Apple porque esa empresa tributa fuera». No hizo falta, París bien vale una misa, pero no tanto como una votación. «¡Llamamos a Juancho!», exclamó el socialista Zacarías Martínez Maíllo cuando vio que el empate iba a dilucidarlo el voto de calidad del alcalde, pero a esas horas ya estaba camino del aeropuerto rumbo a Saint-Denis.

 

Majadahonda Magazin