AGENCIA EFE. La hasta ahora delegada del Gobierno en Madrid, Mercedes González, es la nueva directora general de la Guardia Civil, tras la dimisión de María Gámez, han indicado a Efe fuentes del Gobierno este miércoles 22 de marzo (2023). Delegada del Gobierno en Madrid desde marzo de 2021, el nombre de Mercedes González sonó con fuerza como posible candidata del PSOE a la alcaldía de la capital, pero finalmente el partido optó por la ministra de Industria, Reyes Maroto. Mercedes González, de 48 años y licenciada en Periodismo, fue concejala del Ayuntamiento de Madrid entre 2015 y 2021, asumiendo la portavocía en asuntos de urbanismo. Residente en Majadahonda (Madrid), es la pareja del anterior secretario general del PSOE de Majadahonda, Javier Vales. Su antecesora, María Gámez, que ha permanecido en dicho cargo desde enero de 2020, ha presentado este mediodía su dimisión por las investigaciones que afectan a su marido por supuestas adjudicaciones de la Junta de Andalucía. La UDEF implica a Juan Carlos Martínez en un supuesto tráfico de influencias por cobrar de Santana, una empresa a la que el gobierno andaluz inyectó casi 137 millones de euros.
Titulares en la prensa. Los medios de comunicación han enjuiciado de diferente forma este nombramiento: «Mercedes González: la artillera multiusos de Pedro Sánchez para la Guardia Civil. El presidente socialista premia a la ya ex delegada del Gobierno, que hace unos meses fue apartada como candidata a la alcaldía de Madrid y la sitúa al frente del Instituto Armado tras la dimisión de María Gámez», titula El Confidencial en crónica de Ignacio S. Calleja. «Mercedes González, de soñar con ser alcaldesa de Madrid a dirigir la Guardia Civil en medio de la tormenta. La actual delegada del Gobierno, que puso en marcha hace un año la anhelada agrupación socialista de la capital, ha tenido como principal caballo de batalla la lucha contra las bandas juveniles en su mandato», resaltan Patricia Peiró y Juan José Mateo en El País, comenzando su reportaje con una de sus frases: «Ya sabes que cuando me dan, respondo…». Por último, Andrés Bartolomé en La Razón destaca: «Mercedes González, la nueva directora general de la Guardia Civil: encontronazos con Almeida y Ayuso e imputada por prevaricación. La querella se ha archivado, aunque el denunciante ha recurrido». Y explica que «el Juzgado de Instrucción Número 24 de Madrid ha archivado la querella por presunta prevaricación que presentó la Asociación por la Reconciliación y Verdad Histórica contra la delegada del Gobierno en la Comunidad de Madrid, Mercedes González, por cambiar de ubicación una protesta contra la Ley de Memoria Democrática el pasado mes de julio. Tras tomar declaración el pasado 10 de febrero a González y examinar la «abundante» documentación presentada por la Abogacía del Estado, considera el titular del juzgado que “no existen elementos suficientes para imputar a la investigada la autoría de los hechos, ya que lo que resulta acreditado es que siguió los mismos criterios para la valoración del lugar de celebración de la concentración de la asociación querellante”, y “ninguna” de las “manifestaciones” alegadas “nos puede llevar a la conclusión de que la decisión presentara indicios suficientes de la comisión de un delito de prevaricación”, concluye.
Así justifican su dimisión la propia directora general y el ministro. «Es una decisión difícil, pero quiero proteger a mi familia y a la Guardia Civil. Tomo esta decisión por principios, honestidad y responsabilidad. Los valores y la ética están por encima de cualquier proyecto. No voy a permitir que alguien pueda utilizar esta circunstancia personal para dañar a la Guardia Civil o a sus representantes», ha dicho Gámez en una rueda de prensa urgente en la sede de la dirección general de la Guardia Civil. Además, ha dicho que «servir a los españoles es el mejor patriotismo». También ha querido dar las gracias, por su confianza, al presidente del Gobierno, al ministro del Interior, a la de Defensa y a todo el equipo directivo y de mando de la Guardia Civil y dice abandonar el cargo «satisfecha de lo que ha conseguido y orgullosa de haber puesto» su granito de arena para que la Guardia Civil continúe como una de las instituciones más valoradas y queridas por la ciudadanía española. Gámez sustituyó a Félix Azón al frente de la Guardia Civil en enero de 2020, ambos con Fernando Grande-Marlaska como ministro del Interior. Anteriormente, fue subdelegada del Gobierno en la provincia de Málaga y concejal en el Ayuntamiento de Málaga. Marlaska ve su dimisión como un «ejemplo de decencia». El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha señalado posteriormente que la dimisión de la directora general de la Guardia Civil es un «ejemplo de decencia democrática» y se ajusta al ejercicio de «profilaxis» del Gobierno. Para él, Gámez ha sido «la mejor directora de la Guardia Civil en sus 178 años de historia» al señalar que ha transformado la Benemérita «hasta convertirla en una institución moderna y avanzada, capaz de dar respuesta a los retos actuales y a los desafíos de futuro».
«Lucro injusto» del marido de María Gámez, según la UDEF: El proceso judicial está en el Juzgado número 6 de Sevilla, cuyo titular es José Ignacion Villaplana, quien investiga los pagos de la Junta de Andalucía a una empresa de uno de los hermanos de Juan Carlos Martínez, marido de Gámez, durante los años 2009, 2010 y 2011. Recientemente, la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF) de la Policía Nacional, entregó en el citado Juzgado un informe sobre presuntas irregularidades cometidas en la concesión de préstamos por parte de la Agencia IDEA a la empresa Santana Motor, que recibió unos 36 millones de euros en créditos y cerró en 2011. En el atestado policial aparece citado en 19 ocasiones el nombre del marido de María Gámez, Juan Carlos Martínez, quien fue jefe de gabinete del ex consejero de Obras Públicas Francisco Vallejo y director de gabinete del exconsejero Gaspar Zarrías, ambos del PSOE. Según el citado informe, los investigadores aprecian un «lucro injusto de este exasesor político» a través de una sociedad y apunta, además, a un supuesto «mecanismo de retribución por la concesión de fondos públicos». La dimisión de Gámez también coincide con las investigaciones judiciales por las presuntas irregularidades en obras en 13 comandancias y con el ‘caso Mediador‘, afectando a dos generales retirados, Pedro Vázquez Jarava y Francisco Espinosa Navas, este último en prisión por las mordidas en las que también está imputado el exdiputado socialista Juan Bernardo Fuentes Curbelo, alias ‘Tito Berni‘.
De alcaldable en Madrid a ‘jefa’ de la Guardia Civil. Por su parte, Mercedes González se formó como periodista en la Universidad San Pablo CEU y se especializó en Comunicación de Instituciones Públicas y Políticas con máster en la Universidad Complutense y en la George Washington University. Su andadura en la vida política comenzó entre 2007 y 2008, cuando trabajó como asesora del grupo socialista en la Asamblea de Madrid para, a continuación, entre 2009 y 2011, convertirse en asesora también en la Vicepresidencia Tercera del Gobierno y Ministerio de Política Territorial. Fue además directora de Comunicación y Relaciones Institucionales de la Federación Española de Municipios y Provincias. El primer cargo electo de González llegó en 2015, cuando fue elegida concejal socialista en el Ayuntamiento de Madrid; cuatro años después, en los comicios de 2019, figuró como número dos en la lista del PSOE que encabezaba Pepu Hernández, a quien coordinó la campaña. Experta en temas de urbanismo, fue además portavoz del grupo municipal socialista en la Comisión de Desarrollo Urbano y Obras y Equipamientos y portavoz adjunta en la de Medio Ambiente y Movilidad. A los 6 años de convertirse en concejala del Ayuntamiento de la capital, González dejó su acta para sustituir a José Manuel Franco al frente de la Delegación del Gobierno en Madrid, aunque desde ese mismo año su nombre sonó con fuerza como posible candidata para la Alcaldía de Madrid para las elecciones municipales de 2023. Sin haber confirmado nunca su intención de encabezar dicha lista, la posibilidad finalmente decayó en septiembre de 2022, poco antes de que se pusiera sobre la mesa el nombre de Reyes Maroto como candidata, y la propia González explicó que nunca había aspirado a la Alcaldía y que su voluntad era centrarse en su labor como delegada del Gobierno. Con todo su vinculación con la política municipal se mantiene, ya que desde noviembre de 2021 es secretaria general de la Agrupación Socialista de la Ciudad de Madrid, un cargo de nueva creación en la estructura del PSOE en la Comunidad de Madrid. Desde ese puesto y desde la delegación de Gobierno ha tenido en estos meses discrepancias públicas tanto con la presidenta regional, Isabel Díaz Ayuso, como con el alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, con quien, por otro lado, mantiene una buena relación personal, según han confirmado ambos en varias ocasiones, desde que coincidieron como concejales en el Ayuntamiento de la capital, resume The Hufftington Post.
No se, a mi esta señora siempre me pareció que » aguantaba bien» el tipo.
Me alegro por ella.
Bravo por Mercedes! Me alegro mucho.