«Uso protector solar, busco sombra durante las horas pico y llevo sombrero y gafas de sol. Este verano, disfruto del sol con respeto y precaución. La clave es encontrar el balance adecuado, disfrutando de sus beneficios sin ignorar los riesgos». ©Carlos Garcia Pozo

MIGUEL SANCHIZ. (1 de agosto de 2024). En este «Verano de Veterano» quiero hablar del sol, ese astro que tanto nos da, pero que también puede ser un enemigo insidioso si no tomamos precauciones. El sol nos proporciona la vital vitamina D, esencial para la salud ósea y el bienestar general. Sin embargo, como veterano, he aprendido que la exposición sin protección puede tener consecuencias graves. En mi juventud, pasé muchas horas al aire libre, disfrutando del calor del sol sin preocuparme por los riesgos. No teníamos la misma conciencia que existe hoy sobre los daños que los rayos ultravioleta pueden causar. Con el tiempo, los efectos acumulativos de esa exposición se hacen evidentes: manchas en la piel, arrugas prematuras y, en los peores casos, un mayor riesgo de cáncer de piel. Por eso, hoy en día, soy más cauteloso y animo a otros a hacer lo mismo.

Miguel Sanchiz

Curiosamente, he reflexionado sobre cómo los pueblos que tienen menos sol parecen enfrentar diferentes desafíos. He leído que en lugares con poca luz solar, hay una mayor incidencia de trastornos del estado de ánimo, y algunos estudios sugieren que hay un índice más alto de suicidios en estas regiones. Esto me hace pensar en el poder del sol no solo para nuestro cuerpo, sino también para nuestro ánimo. La luz solar estimula la producción de serotonina, la hormona que nos ayuda a sentirnos bien, lo que podría explicar por qué la falta de sol puede llevar a una sensación de tristeza o depresión. Sin embargo, la relación entre el sol y la salud es un equilibrio delicado. Mientras que una cantidad moderada de exposición solar puede ser beneficiosa, es crucial protegerse adecuadamente para evitar los efectos nocivos. Uso protector solar, busco sombra durante las horas pico y llevo sombrero y gafas de sol. Este verano, disfruto del sol con respeto y precaución. La clave es encontrar el balance adecuado, disfrutando de sus beneficios sin ignorar los riesgos. Así, podemos seguir gozando de este maravilloso astro que nos ilumina y calienta, mientras cuidamos de nuestra salud.

 

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