Actualmente, el mercado cosmético de España está valorado en 8.200 millones de euros. Su éxito se debe a que la mayoría de las personas busca frecuentemente la manera de tener una piel más sana y estéticamente agradable.
No obstante, la disponibilidad de productos presentes en el mercado puede significar un problema para el rostro si no se cuenta con un diagnóstico preciso. En este sentido, lo recomendable es adquirir fórmulas cosmecéuticas específicas que realmente solucionen la afección de la piel. Gracias al proyecto iMstant Cosmeceutics, ahora es posible obtener un autodiagnóstico de análisis facial a través de un selfie sacado con un teléfono inteligente. De esta manera, cada persona conocerá los requerimientos exactos de su piel.
¿En qué consiste la cosmecéutica y cuáles son sus beneficios?
La cosmecéutica es una industria que elabora productos cosméticos utilizando activos provenientes de la industria farmacéutica. Debido a esto, las fórmulas son más efectivas sobre la piel y logran resultados de tratamientos médicos no invasivos.
Se trata de productos tópicos híbridos, con características cosmético-farmacéuticas, que contienen ingredientes biológicamente activos con un efecto sobre el usuario.
Otra ventaja relacionada con este tipo de productos se basa en la seguridad que proporcionan, ya que cada fórmula está avalada por investigaciones y estudios clínicos, lo que asegura su efectividad y baja probabilidad de daño.
Tecnología de autodiagnóstico en la cosmecéutica
Para lograr resultados personalizados utilizando cosméticos, la empresa iMstant Cosmeceutics ha ideado una tecnología de autodiagnóstico. El proceso consiste en utilizar la aplicación iMstant Scan4D, la cual funciona con técnicas avanzadas de inteligencia artificial. Gracias a esto, el software es capaz de detectar de manera precisa los problemas de la piel.
El sistema de diagnóstico cuenta con la capacidad de hacer un modelo 3D del rostro del paciente. Asimismo, cuenta con biovisión artificial y realidad aumentada. Una vez que realiza el análisis facial, arroja un diagnóstico que incluye poros abiertos, manchas y exceso de grasa, entre otros. Dicha evaluación es analizada junto a datos demográficos, medioambientales y demás información proporcionada por el usuario.
Cuando finaliza el proceso, el diagnóstico cosmetológico es capaz de prescribir una fórmula cosmecéutica única según la situación de la persona. En esta prescripción, se indica la dosis y los ingredientes activos que componen la crema o booster personalizado.
Esta aplicación se puede utilizar desde cualquier teléfono inteligente. El diagnóstico y la prescripción están supervisados por profesionales de la cosmetología.