JULIA BACHILLER. El Ayuntamiento de Majadahonda vivió este martes 26 de marzo de 2019 una jornada un tanto excepcional pero animada: mientras en el interior daba comienzo a las 10:00 horas el pleno, en el exterior una hora más tarde se manifestaba el sindicato CPPM de la policía local junto con CCOO. Día ruidoso con las habituales «perlas» del pleno transformadas en pedradas y el colectivo de policía (CPPM) pitando a pleno pulmón para hacer notar su presencia. En el interior del salón de plenos el contenido del orden del día y las mociones perdían interés, dado que el debate sobre las mismas venía cargado de campaña electoral en sus dos niveles, nacional y municipal. Así las cosas, los diversos partidos políticos sacaron su artillería ideológica pesada, oculta durante toda la legislatura, pero la pérdida de credibilidad era manifiesta: se había estado echando de menos en muchas otras ocasiones para romper la monotonía y el aburrimiento de otros plenos. En este, penúltimo de la legislatura, los concejales aportaron en sus intervenciones por primera vez un grueso enfrentamiento entre ideologías en lugar del amiguismo y el pasteleo o «biscotto» al que nos tenían acostumbrados. Tras presenciar parte del desarrollo del mismo, ya que también seguíamos la manifestación del exterior, pasaré a mencionar algunas de las situaciones que tuvieron lugar en esta ocasión.


Foxá salpicó sus intervenciones con humor

Las intervenciones del alcalde Narciso de Foxá, que se retira de la vida política tras ser sustituido en su partido por José Luis Alvarez Ustarroz, fueron numerosas, combinando seriedad y un toque de humor al que no nos tiene demasiado acostumbrados. Así fue en la ocasión que contestaba airado al Partido Socialista, que le recordaba que sin la ayuda de Ciudadanos no hubiera gobernado. Foxá respondió: “No nos ha tocado en una rifa”, rememorando el resultado electoral de 2015 que le dio 11 concejales al PP y 6 a Cs. A lo que añadió: “¿Con 3 concejales pretende gobernar usted?”, enojo que le hizo olvidar de quién era el siguiente turno “¿A quién le toca ahora?”. Y bajando la guardia sonriendo e irónicamente provocador, concluyó: “¿Quién se atreve?”.

Africa Sanchez (PP) no le gustaron las «escenas» de PSOE y Cs

Se atrevió la concejal Silvia Rey (Cs), quien tras escuchar las alegaciones a su moción que pedía el cumplimiento de las mociones aprobadas en los plenos de esta legislatura, cerró el debate en tono sereno y respetuoso. Y ante los comentarios críticos suscitados por el resto de los grupos hacia su partido, que no tenían relación con lo solicitado, los definió como “paradójicos, incongruentes e increíbles”. Silvia Rey se volvió filosófica en su autodefinición: “para unos somos de izquierdas y para otros de derechas”. Y finalizó asegurando que ”no votamos colores, votamos propuestas” al haber sido acusados por el PP de dar su voto en reiteradas ocasiones a partidos más afines a la izquierda.


Ventura (PSOE) combinó tragedia y comedia

El socialista Luis Ventura, que tampoco repite en las listas, también aprovechó uno de sus turnos para «arrear» críticamente a Ciudadanos con ironía y escepticismo: “los veo muy reivindicativos”. A lo que añadió: “les han engañado” refiriéndose al PP, “han defraudado a los vecinos y no han sabido ejercer de líderes de la oposición”. Ventura no quiso olvidar el acuerdo del pleno por el que los recientes terrenos que se destinarán a uso religioso en el barrio de Roza Martín contaron con una rectificación de Cs, por lo que definió la situación como “el regalo de despedida que el Sr. Foxá le ha hecho a la iglesia”.

Los ediles del PSOE salieron y entraron del «salón» en un abrir y cerrar de ojos

Otro que se va, Juancho Santana (IU), también reprochó a Cs no haber aceptado su voto en esta materia y haber preferido pactar con el Partido Popular, y manifestó una vez más que su intención en esta legislatura había sido el cambio de Gobierno: “con tal de desalojar al PP del municipio tenían mi voto gratis y hubieran podido tener la alcaldía”, pero los concejales naranjas «ni siquiera secundaron una moción de censura” contra Foxá cuando surgieron imputaciones y casos de mala gestión. Estas acusaciones desencadenaron el enfado del concejal David Ayuso (Cs), quien aprovechando una moción del Grupo Socialista y tras la aceptación de la misma, dio un giro inesperado y arremetió contra los tres concejales del PSOE. Y lo hizo con el «argumentario» nacional:

Angel Alonso y Fátima Núñez (PP) también dieron el «cante» oratorio

“Nuestro partido no pacta ni con separatistas, ni con pro etarras, ni con populistas. Nuestro partido hace política útil, nuestro partido se llama Ciudadanos no Socialista, que de obrero y español a ustedes después de esta legislatura les queda muy poco”. Apurando sus últimos momentos en el pleno (Ayuso ya anunció que no iba a repetir como concejal) seguidamente añadió: “Su presidente «okupa» va a acabar como el peor presidente de la democracia de este país”, momento en el que el alcalde tuvo que intervenir por la reacción de los concejales socialistas. Fue la edil socialista Elisa Piñana, que tampoco repetirá tras el resultado de las votaciones primarias que la han desplazado a puestos secundarios, la más ofendida con los comentarios, por lo que recibió una amonestación por parte del alcalde al interrumpir al concejal de Cs.

Mercedes Pedreira le puso algo más de seriedad al pleno

La tragicómica escena desató las risas de Irene Salcedo (Somos), que también se retira de la política pero se mostró extrañada por la palabra «amonestación», que empleó el alcalde “como si fuera una tarjeta roja”. A ello Foxá aclaró que en realidad era «amarilla» porque “al final de las amonestaciones viene la tarjeta roja, por si no lo sabe”. El rifirrafe verbal continuó con las palabras de Foxá dirigidas al Grupo Socialista: “luego ustedes dicen que son demócratas, pero aquí no se puede interrumpir al que habla”: Y se dirigió a uno de sus concejales: “usted ha dicho barbaridades Sr. Ventura, interrumpe porque no le gusta lo que le están diciendo”. Retomando su turno, el ya finiquitado concejal Ayuso siguió con la política nacional y no local:

Foxá dijo que no eran «insultos» sino «juicios de valor»

“Este partido no insulta, usa los términos que todos los españoles entendemos que está sucediendo, con independencia del color: ustedes han pactado en Cataluña 21 puntos de la vergüenza y encima los han apoyado. Ustedes han pactado con pro etarras como son los partidos de Bildu y de la extrema izquierda”, palabras que provocaron que los 3 concejales socialistas abandonaran el pleno, acompañados de un provocador “¡hasta luego!” del concejal de Cs, quien prosiguió: “ustedes cuando no oyen lo que quieren escuchar, se levantan y se marchan. Ese es el ejemplo democrático del Partido Socialista, los demás nos sentamos mientras nos insultan, es una vergüenza, así les va a ir en las próximas elecciones”, finalizando con un vaticinio sobre su próximo resultado electoral: “tres son muchos, uno se queda corto”.

Juancho Santana (IU) desveló que prefería un alcalde de Cs antes que a otro del PP

Los socialistas apenas llegaron a la puerta y regresaron cuando el concejal naranja concluyó su psicodrama. En respuesta a lo sucedido el candidato del PSOE en las próximas elecciones municipales, Manuel Fort, que se encontraba entre el público asistente, y que durante la intervención del concejal naranja indicó con gestos de sus manos a los concejales de su partido que guardaran calma, no pudo evitar intervenir en el turno de los ruegos y preguntas de los vecinos. Y tras desvelar que había acudido a los tres o cuatro últimos plenos sin intervenir en ellos, se dirigió al alcalde diciendo: “usted y yo hemos compartido 12 años en este pleno, años muy duros, donde nos hemos llevado casi «a la cárcel». Pero yo nunca había oído los insultos que yo he oído en este pleno. Mucho menos me esperaba que usted lo consintiera, permitiendo este tipo de actuación sin hacer nada y a mi entender incluso la ha animado. Nosotros nos hemos llevado generalmente bien en los tiempos que yo he estado aquí de concejal, pero últimamente observo como una desconsideración al conocimiento y hacia la sapiencia, o hacia las intervenciones de algunos concejales y concejalas, que no lo entiendo. Todos hemos aprendido y todos hemos empezado, y todos nos hemos equivocado y algunos muchas veces. Yo le rogaría, en lo que le queda de mandato, que este tipo de intervenciones no se permitieran en el pleno”.

Maria José Montón, Fátima Núñez y Angel Alonso (PP) durante el pleno

Al discurso Narciso de Foxá contestó: “por un lado están los límites de la libertad de expresión y por otro los límites del insulto y la desconsideración. Yo no he oído ningún insulto, lo cual no quiere decir que no los haya habido, usted está entendiendo por insulto un juicio de valor”. Y explicó la diferencia con un ejemplo: “es usted un sinvergüenza», eso es un insulto. Decir «no me gusta lo que está haciendo con el dinero público», que implica ser un sinvergüenza, no es un insulto”. Y concluyó: “que digan que yo lo he animado cuando no he abierto el pico… Como persona me puede gustar más o menos, pero como alcalde ni he intervenido. Y si hubiera escuchado un insulto como juicio de valor lo hubiera cortado. Para finalizar reveló su criterio de «arbitraje»: “tengo que aplicar el mismo baremo para todos, ¿usted sabe las desconsideraciones que tenemos que aguantar el equipo de gobierno todos los plenos por parte de los otros grupos políticos y las cosas que nos dicen? Y es que eso, para usted, no cuenta”.

Majadahonda Magazin