Cubillo, Canals y Utrera (MJD) bajo el libro

El historiador Xavier Casals, doctor en Historia por la Universidad de Barcelona que compagina la investigación histórica con la politológica y la docencia académica con la divulgación de la historia, afirma en un artículo publicado en «El Periódico» que «Federico Utrera, autor del mejor estudio de este tema (‘Canarias, secreto de Estado’, 1996), señala que el presidente argelino Huari Boumedian apoyó a Cubillo para impulsar un estado saharaui (apoyando al Frente Polisario) y otro canario (con el MPAIAC) para rodear a Marruecos. A su vez, «algunos estrategas africanos de la época, que tenían sus ideólogos en las embajadas europeas de Argelia, Libia, Marruecos y, en menor medida, Túnez» pensaban que «las islas servirían como excelente plataforma de ‘modernidad africana», subraya Utrera». El motivo de la cita y el elogio se debe a que «hace 40 años, el 5 de abril de 1978 Antonio Cubillo, líder del Movimiento por la Autodeterminación e Independencia del Archipiélago Canario (MPAIAC), fue apuñalado hacia las 20.30 horas en su domicilio de Argel. Sus agresores eran dos españoles que actuaron inducidos por José Luis Espinosa. Este era un infiltrado en la organización al servicio de un famoso comisario de policía: Roberto Conesa. Cubillo sobrevivió a la agresión con importantes secuelas y nunca se pudo probar quién la orquestó, pero fue un crimen de Estado, ya que -como veremos- el MPAIAC era entonces una amenaza para España».


Xavier Casals fue jefe de redacción de la revista catalana de historia L’Avenç y director de la revista Clío. Y titula el artículo «El ‘caso Cubillo’, un crimen de Estado. Una posible pérdida de las Canarias, el peligro más serio en la España de la Transición, se cerró discretamente dejando tras de sí una tragedia aérea y una muerte irresuelta». Tras citar el libro de Utrera, el historiador añade: «En este marco, tras la muerte de Franco, Cubillo ganó fama con un programa radiofónico diario emitido desde Argel, ‘La Voz de Canarias libre’. Y su minúsculo MPAIAC creó serios problemas al Gobierno español en el plano exterior, al ganar apoyos la ‘africanidad’ de Canarias, que agudizó al crear un brazo armado a fines de 1976, las Fuerzas Armadas Guanches (FAG). Estas iniciaron su actividad en noviembre de 1976 centrándose en la llamada ‘propaganda armada’. Hasta enero de 1979 cometieron 70 acciones violentas, un 80% de estas con explosivos (la mayoría de factura artesanal)», concluye el libro». Y Xavier Canals sentencia: «en definitiva, el peligro más serio del Estado durante la Transición, una pérdida de las islas Canarias, se cerró discretamente, dejando tras de sí una tragedia aérea y un crimen irresuelto». Leer más.

Majadahonda Magazin