JULIA BACHILLER. Como parte de la adoración eucarística que ha teniendo lugar en la parroquia de Santa Catalina Mártir (Majadahonda) el 16 de octubre (2020), bajo el lema “40 horas por la Vida”, a las 21:00 horas, el Santísimo se retiró a la capilla para dar comienzo el testimonio y posterior coloquio ante el altar mayor, en el cual intervinieron el doctor Jesús Poveda, la doctora Mercedes Vázquez, e Irene Fernández, colaboradora de la «Escuela de Rescate”. Como moderadora y presentadora del acto actuó la periodista de Radio María, Mónica Martínez.
La primera intervención estuvo a cargo del doctor Jesús Poveda, quien al ver el lugar donde se realizaba exclamó: “Me esperaba un salón de actos y no «el salón” sacramental. Seguidamente hizo su propia presentación: “Soy médico, acabé la carrera de medicina antes de que la carrera acabara conmigo”, a lo que añadió: “En la actualidad soy profesor de la Facultad de Medicina” de la Universidad Autónoma (UAM), en el Departamento de Psiquiatría. Como activista provida, el Dr. Poveda dirige una institución de la que dijo: “La «Escuela de Rescate» es una iniciativa que pusimos en marcha hace muchos años el 4 de abril de 2009. Se trata de ayudar a mujeres que van a acudir a un establecimiento abortista y ofrecerles una alternativa antes de que intentar contestar a la dificilísima pregunta de «¿qué necesitas para no abortar?». Cuando estás en la puerta de un establecimiento de estos, presupones que la gente va mayoritariamente a por información, análisis o directamente a abortar. Nosotros lo que estamos intentando hacer es ofrecerle a la mujer una última ayuda, en el último momento, para ofrecerles alternativas”.
En relación con el procedimiento que aplican lo describió así: “primero presentarnos, es muy importante la autenticidad. Cuando vas a un «rescate», las dos cosas importantes son el respeto a la mujer en la decisión que tome y la capacidad de ofrecer alternativas reales”. En su exposición contó varios casos con los que se ha enfrentado y relató como «la casuística es muy variada». Una herramienta de gran valor con la que cuentan es una ambulancia con la que realizar ecografías «in situ», donde las madres pueden ver y escuchar el latido fetal, algo que en la clínica evitan hacer. También contó las consecuencias que le provoca esta actitud: “A veces la experiencia no es tan gratificante como resolver la cuestión. A veces puedes ser denunciado por alterar el orden público. La semana pasada me llamó el abogado para decirme que había sido archivada mi causa de alterar el orden público, porque una vez al año, el 28 de diciembre, hago un poco de resistencia, una resistencia que es sentarme. Pero sentarse delante de un establecimiento donde hacen abortos es ahora mismo alterar el orden público. Y si viene un policía y te dice que te levantes y dices que no, es desobediencia. Y si te levanta y tú te sientas, es desacato”. Próximo capítulo: la experiencia de la psicopedagoga Irene Fernández (rescatadora) y de la Dra. Mercedes Vázquez (Paliativos de enfermos y ancianos)