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Marcos García Montes, abogado defensor de Bruno H.,  conocido como «descuartizador de Majadahonda».

JORGE RUBIO. Bruno H., conocido en la prensa como «el descuartizador de Majadahonda» ha contratado al abogado «mediático» Marcos García Montes, cuya primera decisión ha sido denunciar «la vulneración de sus derechos fundamentales y recibir presiones para autoinculparse». Dichas presiones se habrían producido «por parte de una mujer que dice ser psicóloga de la Guardia Civil para que Bruno se autoinculpe de las muertes sucedidas en el chalé de Majadahonda«, según informa la agencia Europa Press. El letrado ha presentado un escrito ante el juez de Instrucción número 1 de Navalcarnero donde sostiene que «en función del resultado de esta investigación y de lo que diga el análisis realizado sobre los restos de ADN encontrados en una picadora industrial en el chalé de Majadahonda, no descarta pedir la nulidad del proceso», prosigue la agencia.


Marcos García Montes

Marcos García Montes

El abogado, especializado en asuntos del «corazón», famosos y prensa rosa y paticipante en programas de «telebasura», ha relatado que el día 1 de junio, tras una serie de correos electrónicos, «la supuesta psicóloga de la Guardia Civil se entrevistó con la madre y hermana del presunto descuartizador en una cafetería de la capital y en un momento, cuando la madre de Bruno se levantó, instó a la hermana, Leticiaa que le dijera a su hermano que se declarara culpable y confesara porque iba a obtener «beneficios» y una «reducción de la condena«. Además, le instó a que no siguiera con el despacho de abogados que le estaba defendiendo», continúa Europa Press.


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Vista aérea de la prisión de Valdemoro.

Según Marcos García Montes, «la supuesta psicóloga acudió a la prisión de Valdemoro a entrevistarse con Bruno en un lugar que no es el locutorio general y en un momento dado llegó a decir que si no colaboraban con ella, podría lograr «que le cambiaran de módulo y le suspendieran las comunicaciones con su compañera sentimental«. Por todo ello, el abogado preguntó al juzgado si la supuesta psicóloga trabajaba a sus órdenes, algo que le negaron según su versión. Por eso habría pedido al juez investigar «quién es esta mujer y a la Guardia Civil que abra una investigación interna», finaliza la agencia.

Mientras tanto, las investigaciones por encontrar los restos de Adriana G., la inquilina argentina desaparecida, prosiguen centrándose la búsqueda en el vertedero de Pinto, el lugar al que son llevados los contenidos de los cubos de basura de Majadahonda. Por el momento no se ha producido ningún avance en este apartado de la investigación.

 

Majadahonda Magazin