El pastor Antonio Robledo ©Cristina San Román

LIDIA GARCIA. «A ver si despejan el Monte del Pilar. Es una vergüenza que mi tio el pastor y su mujer. Dos personas mayores incomunicados allí, sin agua ni nada. Y están despejando el recinto ferial que allí no va ni dios. Ni hay gente viviendo ni animales como ovejas y cabras que mantienen el monte». Este fue el grito desesperado en redes sociales de Sandra Hernández Solís, sobrina nieta de Antonio Robledo y su mujer. «Es mi tio abuelo, el pastor de Majadahonda, es una bella persona y siempre con una sonrisa para todos». Y este el relato de su familiar: «Les llevaron con un tractor un poco de leche y algo más, les llega la nieve por la cintura y sacan algo de agua con la nieve para las ovejas y limpiar. El otro día fue un policía amigo de mi tío a ver como estaban. No pueden ir al médico, que mi tía tenía que ir. Están sacando agua como pueden de la nieve y se la dan a las pobres ovejas. Se están quedando sin comida. Y si les pasa algo no pueden salir ni entrar. La nieve les llega a la cintura, les han llevado con un tractor un poco de leche y agua. Una vergüenza».


El pastor Antonio Robledo y Antonia, su mujer ©Cristina San Román

Y añaden: «Es mejor despejar zonas inútiles (recinto ferial) o calles de urbanizaciones de bien antes que esta. Por mi calle no ha pasado ni una máquina tampoco y la estamos despejando como podemos nosotros. Desde que dejó de nevar ya podían estar despejadas las calles. Yo no sé que pasa, las ovejas las pobres sin salir. Las dan agua como pueden de la nieve y aun tienen algo de paja para ellas. La vida de las personas es más importante que otras cosas, como la recogida de basura. Hay que priorizar en lo importante, una cosa es no poder moverte con el coche y vivir cerca del pueblo y otra es tener a dos personas mayores incomunicadas, sin casi comida porque no pueden salir ni pueden ir al médico».


El pastor Antonio Robledo con las torres de Madrid al fondo ©Cristina San Román

«Que trabajan duro todos los días para mantener el Monte del Pilar bien y no haya riesgo de incendios. Donde ellos solos no pueden limpiar la nieve porque no tienen con que. Y porque les llega la nieve por la cintura. ¡Deberían de tener mejor organización! El problema son las ovejas también. Son animales y no entienden. Necesitan salir. Ellos no quieren vivir aislados. Tienen su casa en el pueblo a la que suelen ir varios días por semana. Y mi tia viene a comprar. Jamás podríamos pensar que cayera algo así de nieve, allí están generalmente bien y tranquilos de ruidos y cuidando de los animales y trabajando. Y sí, la culpa es del Ayuntamiento por no priorizar ciertas cosas ante otras inútiles», concluye su sobrina nieta.

El pastor Antonio Robledo ©Cristina San Román

LOS ARGUMENTOS DE QUIENES JUSTIFICAN AL AYUNTAMIENTO. La llamada de auxilio de Sandra Hernández Solís generó 111 comentarios en redes sociales hasta este viernes 16 de enero (2021). Pero también hubo quise se puso de parte del Ayuntamiento, como Cristina Villar, con quien la sobrina nieta polemizó. Estos fueron sus argumentos: «No sé. Si son muy mayores (deben vivir) cerca de gente. Si estás aislado es difícil que alguien te ayude, te apoye, te lleve comida… En fin. ¿Y cómo viven allí? ¿No tendrían que estar en una residencia? ¿O en el centro del pueblo para que les podamos ayudar? El Ayuntamiento se ha preocupado de recoger la basura, que implica a miles de majariegos y la salud de todos…»

Majadahonda Magazin