MANU RAMOS. La presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Ayuso (PP) y su consejero de Educación, Enrique Ossorio, la han «liado parda» en materia escolar. Este jueves 28 de mayo habían anunciado por sorpresa que este lunes 1 de junio todos los colegios de la Comunidad de Madrid tenían que estar abiertos para recibir a los alumnos que quisieran acudir a los centros «de forma voluntaria». Sin embargo, se olvidaron de un detalle: avisar a los centros educativos y pedir el preceptivo permiso del Gobierno central para cambiar de fase. ¿Resultado? Un auténtico cisma con los sectores educativos privados, concertados y públicos, a quienes el aviso les pilló desprevenidos, lo que ha provocado una oleada de protestas que han obligado a retirar la orden, aunque la nota de prensa que la anuncia sigue «colgada» en la página web de la Comunidad de Madrid aunque «según fuentes sindicales, ante la amenaza de dimisión de muchos equipos directivos, la Consejería de Educación envió una modificación de la resolución», revela la periodista Victoria Torres Benayas.


La caótica situación ha provocado incluso la intervención del ministro de Sanidad, Salvador Illa, que ha aclarado que “ellos mismos (el Gobierno regional de Madrid) no han hecho la petición del paso a la fase 2, algo que me parece prudente, y van a mantener las actividades permitidas en esa fase”. Luego hubo precipitación o afán de protagonismo al dictar una orden que no podía cumplirse. De hecho, ante la avalancha de peticiones de información de padres, alumnos, centros y profesores, la Comunidad de Madrid ha tenido que aclarar que «el viernes (5 de junio) de la semana que viene, Madrid pedirá el salto a la Fase 2» que permitirá la apertura de colegios, aunque posteriormente aclaró que «tras la negativa del Ministerio de Sanidad, los alumnos de Madrid solo podrán volver a las clases cuando la región pase a la fase 2, previsiblemente el (lunes) 8 de junio; mientras que las escuelas infantiles solo podrán hacerlo cuando la región pase a la fase 3″.

La periodista Victoria Torres Benayas de «El País» y el diario «La Razón» han abordado la situación escolar madrileña. La primera recoge que la Federación de Sindicatos Independientes de Enseñanza (FSIE), mayoritaria en la enseñanza concertada, también rechaza la vuelta por “precipitada, improvisada e innecesaria”. Ven “imposible pensar que los centros podrán ajustarse a las instrucciones, no solo sanitarias, en dos días de un fin de semana”. Isabel Galvín, secretaria general de Educación de CC.OO, sindicato mayoritario del sector público, ha celebrado así la «marcha atrás» de Ayuso: «es una buena noticia porque en Madrid no hay condiciones para adelantar al 1 de junio actividades previstas en la fase 2”. Y ha añadido que «tampoco hay tiempo material para subsanar déficits y falta un informe de riesgos, así como garantizar las medidas higiénicas, sanitarias y organizativas necesarias. Exigimos prudencia y rigor”.

EL CONSEJERO DICE QUE LA CULPA DE SU ORDEN PRECIPITADA «ES DE PEDRO SANCHEZ Y PABLO IGLESIAS«. La respuesta del Gobierno regional ha sido acusar de trato discriminatorio al central. “Nuestros alumnos tendrán menos oportunidades el próximo mes de julio en la EBAU que los de otras partes de España gracias a Pedro Sánchez y a Pablo Iglesias”, ha respondido el consejero de Educación, Enrique Ossorio, que ha asegurado que el Gobierno central aprovecha “cualquier ocasión para perjudicar” a Madrid, señala el diario La Razón. Ossorio ha criticado que el Ejecutivo se niegue a que los estudiantes madrileños retornen ya a las aulas para preparar la prueba de la evaluación para el acceso a la universidad (EvAU) porque corresponde a otra fase, cuando sí concedió a Cataluña hace dos semanas la apertura temporal de los colegios para limpiarse y desinfectarse y hacer trámites administrativos, pese a que no correspondía a su fase.

El consejero ha recordado que la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso (PP), pidió al Ministerio de Sanidad “algo tan razonable” como la vuelta a las clases de los alumnos de segundo de Bachillerato y de los estudiantes de primaria en los que se habían detectado “más problemas en la educación a distancia”, por lo que necesitaban “un refuerzo”. Ossorio ha explicado que la Comunidad llevaba días esperando una respuesta, por lo que había comenzado a elaborar una resolución sobre “cómo debería llevarse a cabo” esa posible vuelta a las aulas, aunque finalmente su propuesta ha sido desestimada, informa Efe. “Supone un perjuicio sobre los alumnos de segundo Bachillerato”, defiende el consejero, que advierte de que los estudiantes madrileños competirán en la EvAU con alumnos de otras regiones que sí han podido volver a las aulas para hacer un repaso del curso.

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