Residentes del Monte del Pilar frente a la parroquia de Santo Tomás Moro

FRANCISCO (un vecino de Majadahonda). Estas líneas que siguen tienen como finalidad exponer lo que un vecino de Majadahonda sintió y siente ante las manifestaciones de personas dirigidas por el PP y por Vox durante las semanas de pandemia. La primera sensación que sentí al ver a decenas de personas arremolinadas en la Gran Vía o en torno a la parroquia de Santo Tomás Moro, día tras día a las 21 horas, fue de estupor. ¿Acaso no sabían estas personas del peligro que corrían de contagiarse al no guardar la distancia ni portar muchas de ellas mascarillas protectoras? Pues no, debía ser que no pues, una y otra vez, un día tras otro, repetían su actuación. Muchas de estas personas llevaban la bandera española atada al cuello, dejando caer la misma por la espalda a modo de capa. En bastantes de las personas que llevaban así colocada la bandera nacional, nuestra insignia nacional, ¡ésta estaba cubierta parcialmente por el toro del anuncio del coñac de Osborne / Domecq!


Me preguntaba y me pregunto el porqué de esta apropiación indebida por unos pocos ciudadanos de una insignia, de un símbolo nacional que debería identificar a todos los españoles. Pues no, parece que las consignas de ambos partidos a nivel nacional, dejando caer su influencia sobre nuestro municipio madrileño al que no se usa más que como escenario político, eran y son las contrarias. Es decir, usar una y otra vez la bandera nacional como signo identificatorio único y excluyente. ¿Con qué derecho?, ¿por qué razón usan el PP y Vox al municipio de Majadahonda, sus calles y plazas como si de un feudo propio se tratara? ¿Acaso no somos muchos españoles igual de patriotas, igual de responsables de los éxitos y fracasos de nuestro país? ¿No queremos TODOS una España fuerte, unida, segura y libre en torno al orden, la justicia y los valores democráticos? ¿Acaso no somos todos los españoles los que, UNIDOS, deberemos ayudar a levantar España después de la terrible pandemia de Covid? ¿Acaso esto solo lo pueden hacer los de un grupo político? ¿Cómo es posible que el PP y Vox no reflexionen sobre el alcance devastador que, sobre las personas más débiles de la sociedad, ancianos y niños, crea ese clima adicional de miedo y alerta callejeros que han estimulado con marchas abanderadas por la insignia roja y gualda? ¿Justifica asustar a los más débiles una presunta protesta a un gobierno…, sea cual sea este? Y, ¿por qué en vez de sacar las banderas del PP y de Vox se esconden estos grupos detrás de la bandera española?

La estrategia del PP y de Vox que hemos tenido que ver los vecinos en Majadahonda es impropia de una sociedad civilizada y, además, oculta la discusión política constructiva rebajándola a un conflicto callejero y sin argumentos racionales. Esto es lo que hemos tenido que ver en Majadahonda los vecinos que hubiéramos deseado que, después de las salidas a los balcones a las 20 horas, a aplaudir y dar las gracias a los que, como sanitarios, como fuerzas de seguridad, como transportistas y como un larguísimo etc., se han dejado la piel por todos y todas, otros lo hubieran hecho a las 21 horas a dar las gracias. Y no a molestar al vecino que, sin venir a cuento, tenía que soportar el estridente ruido de una persona o varias, golpeando cansinamente cacerolas en una ventana, balcón o en la propia calle. ¡Qué “hábil estrategia”! Esto es lo que el dúo PP / Vox han hecho durante este confinamiento en Majadahonda: más de lo mismo en la estrategia de un partido, el PP ahora unido a Vox, que repite lo que hizo cuando Esperanza Aguirre y sus secuaces saquearon la Comunidad de Madrid y colocaron en Majadahonda a los más corruptos y abusadores de la población. Desde la perspectiva de los que amamos Majadahonda, Madrid, España y Europa, deseamos fervientemente que esta forma de tratar a nuestro municipio acabe inmediatamente y no vuelva nunca más.

Majadahonda Magazin