«La virtud fue su mayor defecto. La ambición, habilidad y capacidad goleadora que adornan al equipo que dirige Víctor Fernández empañaron la victoria por goleada del juvenil vallisoletano de División de Honor, porque en defensa se destaca menos. Y todos querían ser, frente a un buen Rayo Majadahonda, delanteros, mediapuntas, goleadores, asistentes, dribladores… La victoria por goleada en la 6ª jornada del grupo 5º de la División de honor fue un festival de goles que, hasta el final, no hizo justicia de lo visto en el campo, porque los madrileños son también un buen equipo que no se vino abajo. Aunque el juvenil vallisoletano mostró muchos de los quilates que adornan su fútbol». El histórico periódico vallisoletano El Norte de Castilla, que dirigiera Miguel Delibes y en el que trabajó el escritor Francisco Umbral, se deshace en elogios hacia el equipo de Alberto Alvarez, que no sacó nada de los anexos del nuevo Zorrilla pese a marcar 4 goles fuera de casa. Y también la influyente web Blanquivioletas.


El Norte de Castilla (Fernando Bravo): «Apenas habían transcurrido dos minutos desde que Daniel Reinoso pitó el inicio del encuentro, cuando la habilidosa delantera del Real Valladolid provocó un penalti que nadie discutió. Dalysson marcó y el equipo de Víctor decidió quedarse merodeando en torno a la portería visitante. Y tuvo la fortuna de cara porque un habilidoso y afortunado Víctor, que hizo triplete, marcó su primer gol de la tarde diez minutos después. El Rayo Majadahonda, que se había traído una ruidosa ‘clá’ de familiares y amigos y demostró sus cualidades, a pesar de la que se le venía encima. No bajó los brazos en ningún momento y eso le permitió sacar réditos de la avaricia local, que descuidó las labores defensivas y lo pagó en el último cuarto de hora. En poco más de diez minutos, el Rayo Majadahonda dio la impresión de poder remontar, pasando de un contundente 6-2 al 6-4 final. Pero el Real Valladolid tenía pólvora de sobra y, cuando los visitantes reaccionaron para disimular el marcador, se vieron sorprendidos por unos delanteros locales que parecían no estar conformes con lo que tenían. De hecho, bien pudieron haber sumado más goles. Campos, a falta de cinco minutos tuvo una de las ocasiones más claras, aunque el partido se había convertido en un toma y daca que, a falta de dos minutos, pudo dar un gol más a los de Majadahonda en las botas de Borao. El juvenil de División de Honor demostró que no solo es cantera para la zaga, con el palentino Apa como una de las estrellas rutilantes, sino que en la línea ofensiva tiene prometedores jugadores como Rafa, Victor o Dalysson, a los que surten de ocasiones jugadores como Arnaiz o Pablo. El de ayer fue un partido entretenido, con goles, defectos de juventud, detalles de calidad y mucha ambición. Una virtud que Víctor Fernández tendrá que modular».

Alberto Alvarez

Blanquivioletas.com (Jesús Domínguez). «El Real Valladolid y el Rayo Majadahonda se dan un festín en un partido en el que los dos ataques estuvieron muy por encima de las defensas. Si goles son de verdad amores, los jugadores de Real Valladolid y Rayo Majadahonda son unos rompecorazones. Desmelenados, como el ídolo adolescente de turno, obraron como tal en un partido en el que las defensas estuvieron bajas como si fuera enero, lo que permitió ver hasta diez tantos y un buen puñado de ocasiones a mayores con marchamo de gol. El conjunto blanquivioleta se impuso por seis goles a cuatro en un choque que en los albores prometía ser plácido, pero luego nada más lejos. Los majariegos se repusieron de varias desventajas y, aunque se vieron siempre por debajo en el marcador, jamás bajaron los brazos, ni siquiera cuando la diferencia era de cuatro tantos. Esto, unido a la falta de intensidad defensiva del Pucela, provocó que hubiera tensión hasta el final (no tanto incertidumbre).

Víctor Fernández, entrenador del Valladolid

Dali adelantó a los de Víctor Fernández (que hizo declaraciones después) desde el punto de penalti a los tres minutos y, a los quince, Víctor marcó el segundo al aprovecharse de la candidez de la zaga visitante. Pozuelo, tras una acción en la frontal, acortó distancias en el veinte, pero Rafa culminó una bonita jugada colectiva para hacer el tercero en el veintidós. La sensación, entonces, era de dominio local, ya que la posesión era suya, aunque los madrileños avisaban cada vez que podían, sobre todo gracias a su goleador. Después de que Pablito, Dali y Rafa tuvieran sendas oportunidades para marcar el cuarto –sobre todo el brasileño, que se topó con el larguero–, el ‘nueve’ rayista fue protagonista de una jugada polémica en la que se pidió penalti, cuando la primera mitad moría, cuando encaraba en el mano a mano a Javi. Reinoso Mangas, que sustituyó al indispuesto De la Fuente Ramos, no lo vio así, pese a las protestas y que el atacante incluso tuvo que ser atendido.

«La sensación al descanso era de control del Real Valladolid ante un Rayo Majadahonda que concedía bastante atrás pero que mostraba buenos conceptos con balón. Dio buena cuenta de ellos en el comienzo del segundo periodo, en el que los de Alberto Álvarez fueron mejores. Así, David Moreno amenazó con un disparo exterior poco antes del tres a dos, obra de Roberto Pérez, tras una combinación con Pozuelo –con quién si no– que cambió el escenario. Esto dio paso un pequeño tramo en el que los blanquivioletas sufrieron y en el que los madrileños perdonaron el empate en hasta tres oportunidades claras, la que más, un testarazo de Toni en un córner que Apa sacó de debajo de los palos. Pero como los visitantes estaban abiertos y los vallisoletanos con espacios son letales, sin embargo, llegó el cuarto, en una jugada de banda a banda que convirtió Víctor. El atacante canario sellaría su hat-trick con un extraño remate a la media vuelta, como aquella ‘espaldinha’ de Ronaldinho, otra vez al rematar un centro desde la izquierda. Pareció y debió ser la sentencia, más aún después de que Orea marcara el sexto en una pena máxima que él mismo sufrió. Aunque aún quedaban cosas por pasar».


El ingeniero y entrenador Alberto Alvarez

«Porque el Rayo Majadahonda no renunció a su estilo, ofensivo y atractivo, ni al verse con esa desventaja, importante y seguramente excesiva para el fútbol que estaba practicando. En el lado contrario, el Real Valladolid se relajó y no le vio las orejas al lobo de milagro, porque permitió a los majariegos crecer demasiado, hasta el punto de que Cristian y Boreo acortaron distancias de nuevo, el primero en una jugada de raza y el segundo después de una buena acción técnica en la frontal del área. Con su equipo partido, desnortado incluso, la afición blanquivioleta tuvo que dar gracias de que no quedase tiempo apenas, porque el encuentro murió en el área local y el poso que quedó al final fue de que la diferencia no fue demasiada. Cierto que el Divi volvió a generar muchísimo en ataque, pero no menos lo es que también concedió muchísimo. No obstante, los tres puntos se quedaron en casa, permiten llegar a los diez y superar en la clasificación tanto al propio Rayo Majadahonda como al Aravaca, que cayó por cero goles a dos ante el Atlético de Madrid». Otra crónica de Jesus Domínguez en Pobla FM.

Real Valladolid: Javi, Apa, Nieto, Óscar (David), Tena, Orea, Dalysson (Campos), Arnaiz, Víctor, Pablo (Raúl), Rafa
Rayo Majadahonda: Lombo, Borao, Alvaro, Toni, Mayorga, Llamas, Roberto Pérez (Ismael), David Moreno (Roberto Rico), Pozuelo, Jiménez, Alan (Rayan)
GOLES: 1-0: m.2, Daly, de Penalti; 2-0: m.14, Víctor; 2-1: m. 18 Pozuelo; 3-1: m.31, Rafa; 3-2: m.52, Roberto; 4-2:m. 64, Víctor; 5-2: m.70, Víctor; 6-2: m.76, Óscar, de penalti; 6-3: m.84, Cristian; 6-4: m.88 Borao.
ÁRBITRO: Daniel Reinoso. Soportó los reproches de la afición madrileña sin perder el control del partido, que no tuvo situaciones de dureza. PItó dos penaltis claros a favor de los pucelanos. Daniel Reinoso Mangas sustituyó a última hora a Óliver de la Fuente Ramos, designado inicialmente. Estuvo asistido en las bandas por Juan Ramón Saludes Rodríguez y Rodrigo Crespo Villa. Amonestó a los locales Óscar de Frutos, Raúl y Campos y a los visitantes Lombo y Mayorga. Jornada sexta del Grupo V de la División de Honor juvenil, disputado bajo un sol de justicia en Los Anexos al tiempo que, en el campo de al lado, era homenajeado el excolegiado profesional Jesús Zancada Lobato.

Majadahonda Magazin