JULIA BACHILLER. Majadahonda vivió un día histórico este domingo y muchas anécdotas lo recordarán para siempre. Antes de las 10:00 de la mañana ya se podían oír pequeños grupos de jóvenes que se dirigían a la plaza frente al Ayuntamiento. A la convocatoria acudieron mayores, jóvenes y niños, todos ellos con camisetas y banderas del Rayo Majadahonda. Durante el trayecto recorrieron la Gran Vía y una vez finalizada la zona peatonal continuaron por la carretera de Boadilla del Monte para finalizar por la carretera de Pozuelo hasta llegar al campo del Cerro del Espino. Era un grupo de unas 80 personas, entre los que se encontraban los concejales de Ciudadanos Alfonso Reina, Mariene Moreno, David Ayuso y Antonio Rodríguez. Durante todo el trayecto fueron innumerables los cánticos así como las tracas de petardos y bengalas utilizadas. Tanto al principio de la comitiva como al final dos coches de la Policía Local facilitaban el paso de estos aficionados, los cuales en algunos tramos interrumpieron incluso el paso de vehículos para facilitarles el tránsito. Majadahonda Magazin realizó este recorrido con ellos y hemos de destacar la ilusión reflejada en sus caras y la ausencia de incidentes. La llegada al campo fue bastante sonora pero inmediatamente accedieron al mismo ante las atónitas miradas de muchos seguidores del Racing de Santander.


El único incidente por llamarlo así se produjo casualmente con la acreditación de Majadahonda Magazin, único medio de prensa diaria en la ciudad y del cual se extravió su pase a pesar de haberse personado en el club y enviado la acreditación de la manera en que se nos indicó en las oficinas del mismo. Por fortuna, la eficacia y diligencia del gerente, Eduardo Fernández, evitó el infortunio pero solucionado el problema inmediatamente se nos dio acceso al campo junto al resto de los periodistas. Dentro del campo un gran número de aficionados, tanto de un equipo como de otro, disfrutaban de lo lindo con los prolegómenos. Tal y como marca la normativa federativa, los seguidores del Racing tuvieron otro acceso al campo desde donde accedían a sus localidades directamente con los eficaces servicios de seguridad tratándolos exactamente igual que a los de los aficionados del Rayo Majadahonda. En esto, como en todo, también hubo fair play y deportividad.

Transcurrida la primera parte del partido fue impresionante ver a las aficiones del Rayo y del Racing, incansables en todo momento. Así llegó la segunda parte y con ella los goles pero eso no acalló a ninguna de las aficiones. Al final victoria del Racing y las gradas comenzaron a vaciarse. Cesaron los cánticos y vítores del Rayo Majadahonda, caras de tristeza y desilusión, aunque en el fondo se sabía que era un partido difícil. Pero todos los aficionados guardaban esa pequeña esperanza, la que nunca se pierde. Y en el exterior del campo la afición del Racing mantuvo un gran respeto con la del Rayo, abandonando los lemas y cánticos cuando esta pasaba y dirigiéndose a los locales cercanos e incluso algunos acercándose al centro de la ciudad. En palabras de un gran aficionado y seguidor del Rayo, Iñaki Estévez, “no nos venimos abajo, son muy grandes jugadores e igual la afición”. Momento histórico para el club, para sus aficionados y para Majadahonda. Y ahora a Santander, esto aún no ha acabado.

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