TONY DEL VALLE. El día después de las “puches majariegas”, lo que ahora se conoce como “la noche de Halloween”, se pudo presenciar un bonito partido de fútbol –sin goles-, donde jugaba el equipo majariego como visitante, y el Atlético de Madrid B como local, siendo desplazada toda la afición majariega a la grada sur. Muchos tenían el corazón partido entre los dos equipos y dejaban que volaran los sentimientos para que eligieran equipo. Y al final se decantaron por el equipo del pueblo, el C.F. Rayo Majadahonda. El partido empezó con un fuerte respeto entre ambos, librándose una bonita batalla por el control y dominio del medio centro. Esta batalla la ganó el Rayo Majadahonda, con más experiencia, mejor técnica y mejor posicionado que el equipo local, jugando al toque y espacio, pero romo en ataque. En los primeros 45 minutos se vio un partido de control y juego por parte del equipo visitante que era el Rayo Majadahonda y un Atlético de Madrid B solo con destellos y de vez en cuando arreones, siempre dirigido por un futbolista que está un escalón más alto que el resto de sus compañeros: Keidi, el albanés residente en Majadahonda.


La falta de pegada de ambos equipos hacía inviable el gol. Los majariegos, dirigidos en el centro de campo por el joven debutante y canterano Escobar junto con Vicente y Carlitos, hacían que el Rayo tuviera la posesión y control del partido, pero sin pegada final cara al gol. “Correcaminos” Coto por la banda derecha se las tenía con el número 3 atlético Sergi –otro “viejo” conocido que militó en el Rayo como cedido y ya ha jugado con Simeone en el primer equipo– y por la otra banda “el niño de Segovia” Jorge de Frutos, con el número 2 atlético Rafa Muñoz. En el centro del ataque se vio al “morenito de Perú” Jeisson –una vez más- solo ante el peligro, luchando contra la férrea defensa atlética. Destacar que durante la primera parte, solo hubo un tiro del Rayo Majadahonda que salió fuera y otro del Atlético B que se estrelló en el larguero en falta directa sacada por el número 6 Cristian. También se produjo otro disparo que salió también fuera, pero este detalle, no fue motivo para ver a un Rayo Majadahonda moviendo el balón, controlando el partido y exhibiendo un bonito fútbol.

En el descanso, –ignoramos lo motivos- se quedó en la caseta “correcaminos” Coto y salió en su lugar Francis. Este cambio resultó a la postre muy negativo para el Rayo Majadahonda, ya que cuando tuvo que abandonar el terreno de juego por lesión Jeisson, dejó al equipo majariego huérfano en ataque. Esto provocó que Frutos se pusiera de “9” con Francis por la derecha y Dani por la izquierda, ya que este entró por el lesionado Jeisson. La segunda parte fue un calco de la primera, con dominio absoluto del Rayo Majadahonda en el centro del campo, pero sin pegada ni puntería cara al gol. En el minuto 56 Frutos se quedó solo ante San Román, fallando la más clara ocasión de todo el encuentro. Su tiro fue directamente al cuerpo del portero. El Atlético de Madrid-B, siguió en la misma tónica que en la primera parte, con un fútbol ramplón y con arreones esporádicos que la defensa majariega, con un grande Andújar, se encargaba de diluir como un azucarillo en un café.

Se llegó al final del partido con dos puntos perdidos por parte del Atlético de Madrid B y con un punto ganado por el Rayo Majadahonda, que parece lo mismo pero no lo es. En resumen, las “puches majariegas” sentaron fatal a los delanteros de ambos equipos, que fueron inoperantes en las porterías contrarias, haciendo valer un cero a cero que beneficia a los majariegos y perjudica a los atléticos, poniéndoles a solo 5 puntos de los puestos del descenso. Con este resultado el Rayo majariego se queda a un punto de los puestos de playoffs y a esperar el próximo domingo que vuelve a tocar en casa contra otro filial de primera, el Celta B. MVP: sin lugar a dudas Andújar, dueño, amo y señor de la defensa majariega, ordenó, mandó y organizó todas las salidas del balón jugado con toque y calidad extrema. En la rueda de prensa posterior, Iriondo declaró: «Ninguno de los dos ha merecido ni ganar ni perder. El empate es justo»

Atlético de Madrid: San Román; Rafa Muñoz (Solano, 83’), Tachi, Montoro, Sergi; Cristian Rodríguez, Arona, Toni Moya (Zaka, 70’), Manny; Keidi y Perales (Ródenas, 80’). Suplentes: Rentero, Conde, Caio, Juan Moreno.
Rayo Majadahonda: Basilio, Rubén, Juan Cruz, Jorge García, Andújar, Vicente, Coto (Francis, 46’), Escobar (Óscar, 55’), Jeisson (Dani M., 64’), Carlitos y De Frutos. Suplentes: Ordóñez, Salcedo, Fonda, Ayoub.
Árbitro: Fernández Rodríguez (Comité Gallego). Mostró tarjeta amarilla a los locales Zaka (90`) y Keidi (92’) a los visitantes Andújar (15’), Coto (45’), Carlitos (58’) y Francis (91’).
Incidencias: El día de todos los Santos se jugó en el Cerro del Espino ante no más de 400 personas, -contando con familiares, padres, abuelos, novias, amigos de jugadores, empleados, vigilantes de seguridad, guardia civil y directivos de ambos clubes- el partido correspondiente a la 12 jornada del campeonato Nacional de Liga de Segunda División B, entre los equipos C.F. Atlético de Madrid y el C.F. Rayo Majadahonda, que terminó en empate a cero y reparto de puntos, uno para cada uno.

Marca: MVP del Rayo: Juan Cruz, Vicente y Carlitos (2). Empate sin goles entre el Atlético B y el Rayo Majadahonda en el Cerro. Un choque muy disputado pero con algo de falta de ritmo. Ese resultado frena las aspiraciones de los de Majadahonda, cuartos en zona de ‘playoffs’ con 21 puntos. Mientras que el filial atlético se queda en mitad de la tabla con 15 puntos. Leer más. Mundo Deportivo (Chema G. Fuente): El equipo rojiblanco no pudo pasar del empate ante el Rayo Majadahonda en el derbi del Cerro del Espino. El choque de este miércoles se dirimió en una batalla del medio del campo en el que no hubo un claro vencedor. Atlético y Rayo se anularon mutuamente en la mayoría de las acciones, con pocas oportunidades de peligro para los dos equipos. En el minuto 25, Toni Moya sacó de esquina y Basilio, un ‘ex’ del Atlético no llegó en la salida sin que nadie pudiese embocar. Podo después, la mejor oportunidad, un disparo al travesaño de Cristian y justo al final de la primera mitad, otra de las grandes ocasiones, un disparo peligrosísimo de Manny. En la segunda mitad, una ocasión peligrosa del Rayo, en una contra, que desbarató San Román. De nuevo el meta colchonero frenó un postrero ataque mientras que el Atlético llevó algo de peligro en las botas de Manny.

Revista Vavel (Adrián Barrios Merillas). MVP del Rayo: De Frutos. El Majadahonda dilata el paso a planta del Atlético B. El filial rojiblanco sufre un nuevo decaimiento ante un Majadahonda que continúa con su ‘media inglesa’ y con paso firme. El filial de Óscar Fernández, que se acercó a su salida de la UVI tras su accidente de octubre gracias a las buenas sensaciones mostradas en Valdebebas, ha sufrido una nueva recaída en su reciente mejoría. Fue precisamente su compañero de casa, un Rayo Majadahonda rebosante de salud, el que provocó este último frenazo en su definitivo pase a planta.

Así las cosas, la jornada intersemanal se planteaba como un idóneo chequeo médico para un Atlético B que recibía a un club amigo como el Rayo Majadahonda, equipo con el que comparte el estadio de la Ciudad Deportiva Wanda, aunque permítanme llamarlo como siempre, Cerro del Espino. Una primera mitad en la que literalmente no pasó nada, salvo un larguero de Cristian Rodríguez que fue de los pocos que tejió algo diferente. Mientras, el Majadahonda vivía con tranquilidad en el duelo gracias a su robusto estado actual. Ya en el segundo acto, tras un arranque algo más animado y con algunas intervenciones de San Román y Basilio, la nada se volvió a apoderar de un choque claramente destinado al empate. Los leucocitos rojiblancos batallaban ante el trastorno que provocaban los arranques de De Frutos y compañía, pero no daban con las solución. Nada cambió, nada funcionó, el Majadahonda era impenetrable y el empate ineludible. En definitiva, continuando con la metáfora de la presente crónica, el Atlético B sigue enfermo y en cuidados intensivos, pero con la calma que siempre da el saber que está en las mejores manos posibles. En cambio, en Majadahonda -soñando por todo lo alto por segundo año consecutivo- siguen disfrutando de un equipo que parece ir a más y sin frenos.

Gol de Madriz (Miguel Romero). MVP del Rayo: Vicente (2) y Juan Cruz (1). Faltó chispa: mucho fútbol y poca sustancia ofensiva en un partido jugado de poder a poder en el que las defensas, y no es tópico, pudieron con los ataques. Atlético y Majadahonda quisieron ganar. Pusieron fútbol además pero sin fisuras y ya saben cuando el planteamiento es perfecto el marcador es 0-0. Fue una mañana de defensas y cuando alguien superaba la línea trasera rival aparecían los porteros. Salvo el remate pocos peros. Lo que sí fue justo es el marcador porque cada cual fue mejor a ratos. Si tomamos la posesión quizá los de Iriondo, si contamos ocasiones quizá los de Oscar. Lo mejor la entrada, claro que los socios majariegos también jugaban en casa y eso animó. El guión era previsible; balón para el Majadahonda. Así es con Iriondo, por lo menos desde que entrenaba al C del Atleti y ya ha llovido y hasta nevado. Quiere que sus equipos tengan la pelota y la cuiden. Así que la “discusión” fue un monólogo, el visitante con la pelota, el local (este vez le tocaba al Atlético) a esperar una contra. Al Majadahonda le costaba hilar el juego ante la presión de un equipo joven. El filial se lo creyó y poco después Manny ponía a prueba la fiabilidad de Basilio que respondía con solvencia. No se alarmó el equipo de Iriondo que tiene un patrón innegociable; Carlitos probó fortuna de lejos, Juan Cruz exploró su banda y la primera mitad murió en campo rojiblanco aunque sin requerimiento a San Román.

El asueto le sentó mejor al filial que en seis minutos creó más peligro que en toda la primera mitad. Las llegadas de Rafa por derecha y Manny en el costado contrario obligaron a Basilio a ganarse el jornal con buenas intervenciones. La respuesta llegó con un disparo de De Frutos que sacó San Román a córner. El encuentro cogía ritmo. Lo malo la lesión de Jeisson. El partido estaba animado porque ambos querían jugar, apenas había faltas y las llegadas se sucedían. Lo que faltaba era precisión, para el último pase y otras veces para el remate. Perales volvió a probar a Basilio con un remate algo forzado; Francis ejecutó alto un libre directo. El filial buscó profundidad con un segundo punta, una de las pocas alternativas ofensivas que permitía su banco y el Majadahonda pensó que no podía descuidar su zaga; recuperó el balón, el control del juego para evitar sustos finales. Sólo tuvo uno en las botas de Manny que no llegó a contactar con claridad tras una carrera extenuante. Por el contrario, el Rayo visitó con asiduidad el área de San Román aunque casi siempre se topó con la defensa colchonera. Ródenas tuvo la última de los colchoneros pero no llegó a contactar con el balón cuando estaba sólo ante el portero y, sobre la bocina, de hecho ahí acabó el partido De Frutos se quedó en buena posición dentro del área, remató fuera por poco. El empate no puede disgustar a ninguno porque nadie fue mejor que el otro tan claramente como para merecer los tres puntos.

La Gradona (Marcos Pérez Barrio): El Atlético de Madrid B no pudo pasar del resultado inicial ante el Rayo Majadahonda. El encuentro fue igualado, sin que ninguno de los dos equipos mereciera claramente el triunfo. En la segunda mitad, San Román tuvo algo más de trabajo, teniendo que atajar un tiro del delantero De Frutos. Atleticodemadrid.com. Reparto de puntos en la Ciudad Deportiva Wanda. Máxima igualdad en el duelo disputado en la Ciudad Deportiva Wanda. Nuestro equipo dispuso de las más claras, una de ellas, un palo de Cristian Rodríguez. Partido muy igualado el que se disputó en la Ciudad Deportiva Wanda desde el primer minuto. Ambos equipos trataron de dominar el medio del campo, pero fue un duelo de poder a poder en la línea medular que hizo que nadie se hiciera con el dominio del juego en la primera parte. En el segundo tiempo el partido continuó con la igualdad inicial y el marcador no se movió. Los nuestros siguieron intentándolo, pero no lograron perforar la portería rival. Por su parte, las pocas ocasiones de las que dispusieron en el Rayo Majadahonda las desactivó San Román.

 

 

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