VIANKA RAMOS. El Club Baloncesto Majadahonda (CBM) concluyó su jornada anual con el Torneo de Fin de Temporada 2014-2015 donde disputaron una serie de partidos en las categorías Benjamín, Alevín, Infantil y Cadete. Además del CBM, al torneo se sumaron otros equipos invitados como el Club de Baloncesto Pozuelo, Club Baloncesto Instituto Veritas, Club Europeo de Madrid, Colegio Menesiano Madrid y A. D. Estrecho. Todos los encuentros se diputaron en el habitual Polideportivo El Tejar ubicado en Majadahonda.
El torneo realizado en el Polideportivo El Tejar contó con la participación de 4 jugadores por categoría en formato semifinal y final, excepto en las categorías de Benjamín y Alevín Masculino que tuvieron 3 participantes que disputaron en formato triangular. Cada partido estuvo dividido en 4 periodos de 10 minutos a reloj corrido siendo a reloj parado el último minuto del segundo y último cuarto. En el caso de Benjamín y Alevín Masculino transcurrieron 2 periodos de 10 minutos a reloj corrido donde los últimos 3 minutos de cada periodo fueron a reloj parado. El resto de las reglas correspondieron al reglamento de la Federación de Baloncesto de Madrid.
Con respecto al equipo de Infantil B Masculino, un portavoz oficial del CBM hizo a MJD Magazin un resumen del 2014-2015: “Se acabó una larga temporada para nuestros chicos del Infantil B Masculino, la cual desde el inicio se presumía complicada debido a que el equipo era un “popurrí” de jugadores del que no sabíamos qué podría salir».
«Tras 9 meses con más de 90 entrenamientos y 26 partidos, lo que ha salido es un excepcional grupo humano, que han sido grandes compañeros dentro y fuera de la pista, y que han dejado de lado los resultados para centrarse en progresar como jugadores y personas disfrutando de nuestro amado baloncesto” añadió.
Finalmente, el portavoz del CBM concluyó que «agradecemos a todos ellos y a sus familias el apoyo y la confianza mostrados durante todo el año. Es difícil gestionar una plantilla de 15 jugadores en la que cada sábado 3 se quedan sin jugar, y desde el inicio lo hemos llevado de una manera excepcional, sabiendo cual era nuestro objetivo inicial del año: Aprender disfrutando. Nuestra gloria más grande no consiste en no haberse caído nunca, sino en haberse levantado después de cada caída”.