SILVIA ANULA. El jugador de fútbol y ex futbolista del Rayo Majadahonda (2008-2015) Carlos Dotor, que dio el salto al Celta de Vigo, club en el que milita actualmente, afirma este domingo 19 de noviembre (2023) en una entrevista para el diario «La Voz de Galicia» que, en su etapa en el Rayo Majadahonda disfrutaba jugando al fútbol mucho más que ahora en Primera División. Y cuando se le pregunta cómo fueron sus inicios en el Rayo Majadahonda, Carlos Dotor responde: «Fue una experiencia muy bonita. Era el equipo de mi pueblo, estuve en el Rayo Majadahonda desde los 6 a los 14 años. El campo estaba al lado de mi casa, iba a entrenar con mis amigos y disfrutaba más que ahora. Me gustaba el fútbol desde el primer día, siempre estaba en mi jardín dándole patadas al balón. Comencé en el colegio, después pasé al Rayo Majadahonda y me lo pasaba bien, pero el sueño de ser futbolista no estaba en mi cabeza. Comencé a pensar que podía ser posible en el segundo año del Castilla, en Primera RFEF. Destacaba, no tenía lesiones y tiraba para adelante. Fue cuando empecé a pensar que podía vivir de esto».
El fotoperiodista Xoán Carlos Gil explica que «Carlos Dotor González (Madrid, 2001) dio el salto al Celta asumiendo que sería un año duro y difícil en lo personal, pero, de repente, se ha encontrado que el principal hándicap es el colectivo. El centrocampista no tiene dudas de que el equipo dará la vuelta a la situación e indica que la plantilla está a muerte con Rafa Benítez (entrenador). En lo personal, piensa que está creciendo día a día después de ganar 5 kilos de masa muscular. Venía preparado para todos los escenarios y decara: «He cogido unos 5 kilos, estoy en el proceso. Creo que cada vez voy creciendo más, física y mentalmente, me veo mejor cada día. La verdad es que se nota en el campo, porque, además, el año pasado había tenido una lesión de pubalgia, perdí kilos y me faltaba fuerza. Estoy trabajando en el gimnasio con el readaptador, con Pedro Docampo. Está muy pendiente de mí. Por las tardes, trabajo el tren superior y seguro que consigo todos los objetivos. También cuento con el apoyo del nutricionista», informa el redactor deportivo.
—¿En qué año llama el Real Madrid a su puerta?. Carlos Dotor: Cuando estaba en el cadete B. El Madrid había venido años atrás a buscarme, pero mi padre no me dejó salir por los estudios, era bastante desastre y me quedé. Pero a partir de ahí, fui estudiando a regañadientes y, finalmente, en el club convencieron a mi padre para dejarme ir. —¿Qué es el fútbol para usted? C. D: Una diversión, lo que me gustaba desde pequeño. — ¿Tenía algún jugador de referencia? C. D: Me gustaban Isco y Ozil. —¿Era madridista? C. D: Sobre todo, de pequeño. Mi familia era muy del Madrid, pero con los años, esa pasión y ese fanatismo lo vas perdiendo y te centras más en lo profesional, en tu equipo. Yo en los últimos años era fan del Castilla más que del Madrid.—¿Los filiales son una burbuja? C. D: Es verdad. Cuando sales del Madrid, parece que vas a otro mundo. En un filial, todo es gente joven y estás mas protegido, pero en el Celta me he encontrado unas grandes instalaciones, profesionales geniales. — ¿Qué conocía del Celta? C. D: Poco, pero era un equipo que veía mucho. Veía por la tele a Aspas, Nolito, Orellana… Eran jugones. Era un equipo que siempre seguía por la tele. —Dicen que fuera del fútbol es un gran cocinero. C. D: Me gusta mucho e hice cursos, pero ahora me la hace el club. Yo cocino en los días libres», concluye La Voz de Galicia.