MIGUEL SANCHIZ. Prosigue la entrevista con Cesar Vacchiano realizada este mes de marzo (2023) en «Gente Maja que se Moja» y no queda más remedio que preguntarle en esta segunda parte publicada este sábado 8 de abril: Mójese y dígame, por favor, tres cosas que haría usted si gobernara España. Y él responde: «Obligaría, por ley, a que todo proyecto o servicio público estuviera participado y gestionado desde la colaboración pública y privada. Obligaría, por norma del rango adecuado, a que todo desempeño en función pública estuviera precedido por 5 años de empleo en cualquier actividad privada. En el caso de los legisladores, 10 años en funciones públicas o privadas. Nadie podría ser elegido sin experiencia de actividad responsable. Y promovería un acuerdo legislativo para que los miembros del Tribunal Constitucional solo pudieran ser nombrados por el Rey«.

¿Quién tuvo la idea de la «Marca España»? –El concepto de «Marca-País» nace a consecuencia del proyecto de reunificación de Alemania en 1990. Refleja el conjunto de los valores inmateriales que se reconocen por los ciudadanos del mundo a cada nación y que afecta a todos sus ciudadanos. Ha sido objeto de consideración por algunos gobiernos y, en el caso de Alemania, para ofrecer al mundo una nueva visión del país reunificado: “Germany, land of ideas”. El Reino Unido siguió la pauta en su campaña para conseguir los Juegos Olímpicos y Finlandia para significar los valores de su educación. Siguieron otras iniciativas en Canadá o Países Bajos y, en el ámbito del ICEX, con la participación de varios representantes de empresas españolas que tenían proyección internacional, se hizo una recomendación, en 2004, a la vicepresidencia del Gobierno para que se abordara –bien en el propio ministerio de la Presidencia o en el de Asuntos Exteriores y Cooperación– un órgano de promoción y gestión de nuestra marca-país. Por desgracia, la propuesta no tuvo acogida.

¿Y cual fue su papel? –Yo venía trabajando desde tiempo atrás en la valoración de los activos materiales de las marcas y en el reconocimiento económico de los valores reputacionales de las empresas y seguí los mismos métodos que ya venía utilizando para responder a una petición del ministro García Margallo cuando fue nombrado titular de Asuntos Exteriores tras las elecciones de 2011. Desarrollé un modelo basado en 10 atributos de nuestro país, que son fortalezas en el caso de España, promoví una encuesta «on line» a mi lista de contactos entre residentes y extranjeros para ponderar cada atributo y el ministro hizo el resto: consiguió el nombramiento de un comisario idealista, sin ningún presupuesto ni organización, y promovió un «apostolado» de la «Marca España» que fue acogido con enorme simpatía por casi toda la población. Con otros profesores y expertos universitarios fue posible crear un sistema de evaluación y progreso de los atributos de la Marca (MESIAS) y el Servicio Exterior contribuyó con su acreditada calidad diplomática a un reconocimiento que vino a paliar la crisis institucional y de reputación derivada de las decisiones del Gobierno entre 2009 y 2011.

La «Marca España» ¿qué resultados ha obtenido hasta ahora? –Solo queda el recuerdo testimonial como referencia aislada en algunos comentarios de los periodistas que vivieron esa época. El gobierno presidido por el señor Sanchez eliminó las referencias semánticas, los cargos nombrados dimitieron sin actividad reseñable y no queda nada –ni personas ni estructura dedicada– al servicio de una actividad que es patrimonio de la diplomacia pública en muchos países. En todo caso, ha servido para que muchos ciudadanos refuercen su autoestima cuando los valores del país aparecen tras los logros de sus científicos, deportistas, artistas y tantos actos visibles de solidaridad. ¿Marca España cuenta con subvenciones públicas?. –No tiene sentido la pregunta, «Marca España» es un concepto que ha de gestionarse desde las estructuras del Gobierno, con presupuestos adecuados a sus objetivos, como toda acción pública.

¿Cree usted que en los planes de Educación debería impartirse la asignatura «Conocer y amar España»?. –No sé si ese u otro similar serían títulos adecuados, pero el conocimiento del país y su historia es un valor para cualquier ciudadano. Ninguna administración publica del mundo ignora los valores educativos que implican los conocimientos del país en el que nacen sus ciudadanos. Muchos jóvenes de hoy descubren su historia haciendo turismo y recuperan el interés por lo que no aprendieron en la escuela. ¿Por qué no se ha hecho hasta ahora? –Nuestro sistema educativo padece la debilidad de nuestra clase política.¿Está orgulloso de ser español?. –Es obvio que sí. Una de las nacionalidades más preferidas del mundo. Uno de los pasaportes más apreciados.