La imagen recoge el momento en que la portavoz de Cs le dice al dirigente de «Vecinos por Majadahonda» que no puede usar su micrófono para replicar al alcalde al impedirle hablar en el turno de «ruegos y preguntas»

LIDIA GARCIA. El Grupo de concejales de Ciudadanos (Cs) en el Ayuntamiento de Majadahonda, que ha sido quizás uno de los mejor preparados por curriculum que ha estado en la corporación municipal desde que se refundaron los ayuntamientos democráticos en 1979, (y de ahí el éxito de la noticia sobre el reconocimiento a su portavoz, la economista Ana Elliott, que deja la política por la «puerta grande»), tomó una decisión que afea bastante su final de legislatura. Después del viaje a Bruselasgratis total” de 2 de sus componentes, su último gesto ha sido alinearse con el alcalde del PP en los «ruegos y preguntas» de los plenos del Ayuntamiento. O al menos mostrarse cicatero con el derecho de los vecinos a expresarse en las sesiones. Según fuentes de Cs, los concejales «naranjas» piensan que los vecinos tienen derecho a hablar pero deben hacerlo “a pulmón” para enfrentarse al primer edil, mientras que este utiliza su potente micrófono para acallar sus palabras.


Carpa de Cs en la Gran Vía con varios de los concejales que le ordenaron a su portavoz que no le dejara su micrófono a «Vecinos por Majadahonda»

La todavía portavoz naranja, Ana Elliott, tuvo que comunicarle este jueves 30 de marzo (203) al dirigente de “Vecinos por Majadahonda”, José Luis Ramos, que no podía utilizar su micrófono para contestar al alcalde cuando le negara el derecho a intervenir, como sí había hecho en los dos últimos plenos en un gesto de generosidad tan inusual como alabado. Pero esta vez su negativa se debió a una razón de peso: “Mi grupo municipal me lo ha ordenado”. La “artimaña” del grupo naranja recuerda a la del concejal de Deportes, Eduardo González (PP), al que una «cámara indiscreta» sorprendió apagando el micrófono de un vecino que había ido a hablar al pleno, en la época en la que el ya pronto ex-alcalde del PP lo permitía. Preguntada por el incidente la actual candidata, Eva Sáenz, manifestó desconocerlo, ya que ella no forma parte del grupo de concejales.


La candidata de Cs cambió la hora de su carpa para no coincidir con la procesión en la Gran Vía

Por otra parte, Cs no quiere aprovechar las fiestas religiosas de Semana Santa para hacer campaña al paso de las procesiones por la Gran Vía y ha anunciado que retirará su «carpa» porque su candidata quiere participar en el evento religioso como «procesionaria» pero no para hacer propaganda política. Tras evacuar consultas con las autoridades religiosas de la ciudad, el Domingo de Ramos hubo Mesa Informativa de Cs pero después de las 12.00, cuando ya pasó la procesión, pues Cs no quiso importunar a los integrantes de la tradicional marcha religiosa. Al cierre de esta edición, el resto de los partidos no había confirmado su ubicación el domingo en la Gran Vía salvo «Vecinos por Majadahonda«, que sí había confirmado que no saldría ese domingo por «respeto» a esta procesión, aunque sí lo haría en los meses de abril y mayo «y no solo en la Gran Vía«. Por su parte, «Más Madrid» tampoco salió el domingo y no lo hará ya más hasta después de la Semana Santa.

Majadahonda Magazin