Pedro Sánchez (PSOE), Edumundo Bal (Cs) y Pablo Casado (PP)

JOSE Mª BABOT VIZCAÍNO. Estamos viendo a través de los días y meses, y quizás veamos algún que otro año, como el presidente al que se ha votado para gobernar España nos ha salido equivocado. Por sus actuaciones se está viendo muy claramente el desprecio, por denominarlo de alguna forma, que el tal Sánchez tiene por la democracia. Al decretar un estado de alarma durante 6 meses, haciendo caso omiso de los demás, muestra el absoluto desprecio de este presidente por la Constitución, el Estado de Derecho y nuestra democracia, aunque después saliera el poco hecho jefe de la oposición y, cantándole las cuarenta, le decía que sólo fueran 4 meses, a lo que él se negó en rotundo. No solamente se ríe del artículo 116 que dice, sin remilgo alguno, que como plazo solo son 15 días.


Babot Vizcaino

Este paso que dio Pedro Sánchez es un viaje hacia el totalitarismo político, que es hacia dónde nos quiere meter el gobierno socialmita, aunque eso nos cueste la democracia. Acompañó a tal menester la destitución del abogado del Estado Edmundo Bal y su sustitución por parte de la ministra Dolores Delgado. Al mismo tiempo, el actual presidente Sánchez está luchando porque los jueces del CGPJ sean elegidos por mayoría simple y de esta manera no depender del primer partido de la oposición, y sí de él directamente. O de su Pepito Grillo, lo cual no se llevado a término por la intervención de la Unión Europea. Tengamos muy presente que, en la actualidad , este gobierno está formado por los mayores enemigos de la Corona, de la unión de nuestra Patria, de la libertad de los españoles y de la concordia que nace de la Constitución.

No es necesario tener un máster en política para ver y percibir el camino que ha escogido Sánchez, que es poder ejercer toda su ególatra grandeza en las instituciones que han de guardar su democracia. Recuerdo, y una gran cantidad de los españoles recordamos, otros lo han leído y a otros se les ha contado, que en 1976 votamos con un 88% a favor por el sistema que tenemos en la actualidad. Sin embargo, este asalto de Sánchez a las instituciones es similar a un golpe de estado que se está gestionando desde los Consejos de Ministros. Desde allí nos mintió, una vez más, al asegurar a bombo y platillo que no pactaría jamás con los callejeros, independentistas y demás partidos que están lejos de nuestra Constitución. Y a esto se le ha de sumar lo malo de su gestión, el fracaso sanitario, que no se puede negar. Y su hoja de ruta que nos lleva a la hecatombe.

Queremos conservar la democracia y nuestra pequeñísima libertad que, a la sazón, se nos está, cada día más, recortando. Y no sería de extrañar que el único camino que nos va quedando es el de rebelarnos seriamente, muy seriamente. Con la llegada de este presidente, los que se llaman progresistas «reniegan» de España, se quedan con los móviles de sus mujeres o quieren azotarlas «hasta sangrar»… Es un modelo de hoja de ruta que no es de recibo. Por eso debemos estar al loro y vigilar bien todo a nuestro alrededor.

Majadahonda Magazin