MANU RAMOS. El bar restaurante Onneca de Majadahonda sufrió un robo en la madrugada de este jueves 3 de septiembre (2020) que por fortuna se saldó con escaso botín para sus dos asaltantes: una vieja tablet y pequeños destrozos en la ventana que une el local con la calle, según confirma su responsable, Borja de la Fuente. El conocido y popular restaurante de Majadahonda tenía alarma y cámaras de seguridad, por lo que quedó registrado todo lo ocurrido y que según Borja de la Fuente fue lo siguiente: dos jóvenes delincuentes esperaron la hora de cierre del local y a altas horas de la madrugada merodeaban por sus alrededores: «Intentaron primero forzar la cerradura y como no pudieron, «reventaron» la ventana. Entraron dentro y fueron a por la caja registradora. Como nunca dejamos dinero dentro ni tampoco tenemos tragaperras, comenzaron a rebuscar y lo único que encontraron fue una vieja tablet con la que ponemos la música del local. Fue entonces cuando les saltó la alarma y salieron corriendo por donde habían entrado». El encargado añade que la alerta de un vecino también sirvió para que la policía municipal se personara de inmediato. Al llegar al Onneca, tomaron fotografías de los desperfectos y acusaron recibo de la denuncia por robo y allanamiento. Las cámaras de seguridad revelaron posteriormente la identidad de los dos jóvenes malhechores, que han quedado perfectamente identificados y a los que se les va a perseguir con todas las de la ley a pesar de su escaso botín, ya que el mal ejemplo no puede extenderse y no pueden quedar en la impunidad.

Borja de la Fuente afirma que el incidente no ha generado retrasos en la apertura del local y saluda con optimismo la vuelta del verano en Majadahonda: «De momento nos está yendo bien, no nos podemos quejar. Así como agosto fue un poco triste sobre todo por la poca gente que quedaba en la ciudad, este mes de septiembre se ha iniciado con bastante clientela, ambiente y buen pie». El tiempo acompaña y con las preceptivas medidas de seguridad para salvaguardar la pandemia de Covid 19, la economía hostelera comienza lentamente a recuperarse y adaptarse a las nuevas circunstancias. Y lo más importante: los ladrones no se salieron con la suya.