MIGUEL SANCHIZ. El Dr. Salah Shihadeh me comentó este mes de enero de 2024 en la primera parte de la entrevista previa que mantuvimos, el cuidado exquisito que tenia la misma concesionaria con un Gimnasio aledaño a Las Rejas, de su propiedad y tan diferente con el del Spa de Las Rejas. Por eso le pregunto en esta segunda y última parte si está contento en general con el equipo municipal que rige Majadahonda?: «Hablando del Equipo de Gobierno municipal y del Ayuntamiento en general, éste, siendo un ayuntamiento rico (tenemos un IBI altísimo) carece en general (bien por defecto o intencionadamente) de un programa social importante, tanto en la temática de la vivienda como de ayudas suficientes en las capas más desfavorecidas de la ciudad».
¿Cual es el problema del Spa de Las Rejas?. –Respecto al SPA Las Rejas aun siendo un buen SPA-Gimnasio, últimamente tiene una problemática, creo que de mantenimiento, en lo referente al agua, ya que muchos se quejan de que la temperatura del agua casi nunca es la adecuada, problemas de mantenimiento en la maquinaria, si hay una avería tardan mucho en arreglarla (no se soluciona a tiempo). De limpieza también tienen un problema, tanto en los vestuarios como en las duchas, agua estancada en los platos de las ducha. Estas incidencias sí que pueden representar un problema sanitario.
¿Esta usted satisfecho del comportamiento del Ayuntamiento de Majadahonda con respecto a Las Rejas?. –Respecto al Ayuntamiento, es evidente que siendo éste centro una concesión, podrían ejercer más control para cerciorarse de que existe un buen funcionamiento. Parece que últimamente por las gestiones que ha hecho un amigo común (Francisco Cerro) con la Concejalía, ha mejorado algo el tema de la temperatura, pero persiste la dejadez con respecto al cuidado de las saunas y la limpieza.
Para concluir no le voy a hacer ninguna pregunta sobre el tema palestino y su drama actual. Le abro la tribuna y cuénteme en breves palabras su visión del problema. –Con respecto al tema palestino poco se puede decir sobre la situación actual en la que se está practicando un genocidio masivo contra el pueblo palestino, lo que no puede dejar indiferente a nadie. Esto será juzgado en un futuro como un genocidio y un crimen contra la humanidad, llevamos, como palestinos, los últimos 75 años clamando contra esta situación de ocupación, destrucción y masiva aniquilación de este pueblo, haciendo llamamientos a países como EEUU, La UE, G. Bretaña y todo occidente que participan directa o indirectamente a favor del Estado Colonizador, para que paren esta masacre, este Genocidio. ¿No es suficiente con casi 21000 asesinados y casi 2 millones de desplazados? Clama al cielo y a la humanidad! . Ante la respuesta al Genocidio unas palabras para reflexionar: “El valor que la humanidad le da a cada niño muerto de Palestina es directamente proporcional al valor que en el futuro le darán a tus hijos en el mundo”.
Estoy convencida de que el D.Salah es valiente y sensible. NO tiene prejuicio alguno en manifestar su opinión con respecto al Spa ni en exponer sus sentimientos en el tema Palestino..
También añado la profesionalidad del periodista para hacer brotar tanta sinceridad del.interrogado.
Mi opinión de la foto de una mujer pidiendo en Majadahonda es que cuando menos es tendenciosa.
Conozco a esa banda de pedigueños organizados que vienen cada dia desde Galapagar, perfectamente organizados.
En Galapagar yo no los veo pidiendo nunca, si, paseando con sun nietos.
Parece que para ese submundo, Majadahonda es un » negocio».
Por eso, cada día de lunes a viernes, cada mañana a partir de las 9,00 h. alguien los » aterriza»en la Gran Vía y aledaños hasta mediodía.
Un negocio como otro cualquiera.
Entiendo que cada uno se gane la vida como pueda, pero porqué será que no lo ejercen en Galapagar?
A un drama humano como el que acontece en Gaza, con la magnitud de muertes, heridos y desplazados, que cada día se va incrementando, sin duda reprobable, y que la historia y los tribunales pondrán en su sitio a los culpables, se une el drama doméstico de los «pedigüeños» transhumantes, que se ganan la vida ejerciendo ese viejo oficio de la mendicidad, que, independientemente de las mafias que sin duda los controlan y explotan, no es exclusivo y afecta a un determinado territorio, sino que están presentes en todos los pueblos de este país. La solución no pasa por desplazarlos, quitándoselos de encima, de un sitio a otro, sino de ayudar a solucionar la precariedad vital en la que malviven.