JULIA BACHILLER. El pleno mensual correspondiente a abril en el Ayuntamiento de Majadahonda tiene lugar este jueves día 28 a las 10:05 horas, según su orden del día. Desconocemos el motivo por el que esta vez se otorgan estos cinco minutos de cortesía que evitan redondear la hora. Lo que no varía es el lugar de celebración: el salón de actos de la casa consistorial. Dentro del orden del día se someten a aprobación la liquidación del presupuesto del 2021, tanto del Ayuntamiento como la correspondiente al Patronato del Monte del Pilar, así como una modificación de créditos y créditos extraordinarios del año actual que aumentan el gasto público previsto inicialmente. Como punto relevante se somete a valoración la continuidad del servicio de limpieza y recogida viaria, y en el ámbito laboral la modificación del puesto de Jefe de Servicio de Régimen Interior y Apoyo a la Secretaría General. A continuación llega el turno de las mociones, donde llama la atención por segundo mes consecutivo la ausencia de propuestas por parte del Partido Popular. El pleno finaliza con las mociones de urgencia y los «ruegos y preguntas» al alcalde.

En primer lugar tienen lugar las de los grupos de la oposición y seguidamente las de los vecinos, aunque en el pleno del mes de marzo el alcalde decidió «cortarlas» de raíz, impidiendo a los vecinos presentes la formulación de las mismas alegando su pertenencia a diversas asociaciones, empresas y partidos políticos. Las mociones que se debaten este jueves son las siguientes: CS: solicita la entrega del Premio Francisco Umbral en Majadahonda y propone “la apertura nocturna de centros municipales para actividades de ocio”. PSOE: instar a la tramitación urgente de los expedientes de reparación del Polideportivo Huerta Vieja «y buscar soluciones hasta que se lleve a cabo dicha reparación”. En su segunda propuesta reclama “la promoción de la accesibilidad y eliminación de barreras arquitectónicas”. Vox: solicita en su moción “impulsar el transporte público desde Majadahonda a la universidad”, aunque no especifica cual.

OPINIÓN: Tras el desplante que el señor alcalde realizó a los vecinos durante el último pleno del mes de marzo impidiendo que pudiesen participar en los «ruegos y preguntas», esperamos que en esta ocasión, y al comienzo del mismo, advierta de sus intenciones. Es absurdo mantener durante horas a unos vecinos como público para después denegarles el derecho a ser escuchados. Ciertamente el pleno finaliza legalmente tras los ruegos y preguntas de los concejales de la Oposición, motivo por el cual las inquietudes de los vecinos no constan en acta, hecho que se constata al ver cómo tanto la secretaria como el interventor (ambos puestos son independientes y obtenidos por oposición) abandonan la sala. No obstante, este acto que se realiza al finalizar el pleno, y aunque podría considerarse un gesto de atención e interés hacia los vecinos por parte del primer edil y lleva realizándose desde el inicio de la democracia, tiene además un carácter jurídico, ya que está recogido en el Reglamento Funcionamiento y Régimen Orgánico Municipal, conocido como ROM.

Es cierto que a veces no está exento de polémica, como ha ocurrido en algunas ocasiones (en la anterior legislatura los concejales de Cs trataron de impedir con palabras y gestos de desaprobación el uso del mismo por los entonces miembros de Vox que no tenían representación institucional), pero siempre los anteriores alcaldes supieron llevar este trámite a buen fin. Hoy, paradójicamente, son los integrantes de PP y Vox los que respaldan esta prohibición, por lo que solo cabe esperar que sea una fallida estrategia del Equipo de Gobierno para que los vecinos no acudan al pleno para plantear públicamente sus ruegos y preguntas. Si por el contrario el altercado público que tuvo lugar en el anterior pleno ha surtido los efectos oportunos y se reanuda con normalidad este turno, en el día de hoy despejaremos la incógnita.