LIDIA GARCIA. «Así era el Madrid del XIX, con aristócratas, buscavidas y bandoleros. ¿Qué le parece el Madrid del XXI? “Todavía vivimos tiempos de corrupción. Y me abruma la gente, la circulación, por eso vivo retirado en Majadahonda”, concluye el escritor, “me pasa como con mi Donosti natal, que ya no lo reconozco. Madrid es una ciudad dedicada ahora exclusivamente al consumismo, y a mi no me gusta el consumismo”. Si Luis Candelas levantara la cabeza… igual se hinchaba a robar a los nuevos ricos que vienen a vivir al centro». Lo dice el escritor vasco José Luis Olaizola, autor de «Luis Candelas, el buen ladrón». Y es que el periodista Sergio C. Fanjul descubre en su novela que «el bandolero más famoso de la capital se hacía pasar por un hombre de la alta sociedad».

José Luis Olaizola (San Sebastián, 1927) suma con esta su obra número 83 en una carrera que le llevó a ganar el Premio Planeta por «La guerra del general Escobar» o el premio Ateneo de Sevilla por «Planicio». También, en el campo de la literatura infantil, el premio Barco de Vapor por «Cucho». A sus lúcidos 92 años todavía tiene ideas para seguir escribiendo. “Tal vez escriba la obra que cierre mi ciclo literario”, dice. Se titularía «El robo del sumario» y estaría basada, con mucho humor, en sus experiencias como abogado. “Luego me hice escritor y escribiendo saqué adelante una familia de 9 hijos” dice todavía asombrado. “No sé cómo lo hice”. Además, desde hace 20 años, Olaizola es presidente la ONG «Somos Uno» dedicada a paliar la lacra de la prostitución infantil en Tailandia. Habla de ellos con orgullo: “Conseguimos que niñas pobres de los arrozales de Camboya, carne de prostitución callejera, acaben estudiando en la universidad”, concluye la entrevista en El País.