JUAN FRANCISCO PÉREZ RUANO. *Párroco de Santa Catalina Mártir de Majadahonda. Saluda para las Fiestas del Santísimo Cristo de los Remedios. En la primera quincena del mes de septiembre los majariegos empiezan a regresar de sus merecidas vacaciones, llegan con la alegría de saber que regresan para celebrar con gozo y alegría a su Santo patrón. Pero este año 2021, como ya ocurrió el año pasado 2020, sus entrañables fiestas se ven suspendidas por el maldito virus que lleva atacándonos estos dos últimos años. Las autoridades se ven en la obligación de tener que suspender todos los actos festivos de estos días por el bien de la gente. Esto afecta también a los actos religiosos y así nos encontramos con otro año que nuestro Santo Patrón se queda en su ermita y no baja a la parroquia para los actos religiosos. Pero la fe en nuestro Santo Cristo de los Remedios va más allá de unas solemnes procesiones, aunque para algunos parezca que si no hay procesión, ya no hay fiesta, pues no se luce lo que se ha hecho.
LA INJUSTICIA Y LA MENTIRA EN LA QUE SE HA INSTALADO LA SOCIEDAD. La fe en Cristo va más allá de su Imagen, que veneramos en nuestra ermita. La fe en Cristo es saber acoger el Evangelio que él nos anunció y ponerlo en práctica con su ayuda y la del Espíritu Santo, pues solos ya sabemos que no podemos. Este vivir el Evangelio consiste en cosas muy prácticas, empezado por cosas tan sencillas como buscar la concordia y la paz entre nosotros, quitando el juicio y la murmuración que también se nos da, buscando disculpar al otro en vez de señalarlo ante los demás. También consiste en ayudar a los que nos rodean siendo acogedores y solidarios con aquellos que tienen menos que nosotros y que llegan a nuestro lado muchas veces escapando de situaciones muy dolorosas.Vivir el Evangelio también es rebelarse contra toda injusticia, venga de donde venga, y decir las cosas con caridad pero sin callar la verdad. Muchas veces nuestra sociedad parece un campo sembrado de mentiras.
HAY UNA FIESTA QUE NO PUEDE QUITAR NADIE PORQUE NO DEPENDE DE LAS AUTORIDADES. Vivir el evangelio también es divertirse y pasarlo bien, pero sabiendo respetar a los demás, no por pasármelo yo bien arruino la vida de los que están a mi lado, como vemos que ocurre muchos días en esas supuestas fiestas de algunos, donde no se respeta nada ni a nadie y todos pagamos las consecuencias.Y podíamos seguir con lo que es festejar realmente a nuestro Santo Cristo, pero creo que queda claro que es la auténtica fiesta: es esa a la que el mismo nos invitó cuando nos dijo: “Amaos los unos a los otros como yo os he amado”. Cumplir esto es gritar con todas las fuerzas «¡Viva el Cristo de los Remedios!» y esto es celebrar con autenticidad la fiesta en su honor. Esta fiesta no nos las puede quitar nadie, porque esta fiesta depende de nosotros y no de las autoridades. Que tengáis unas felices fiestas del Cristo de los Remedios y que contagiemos a todos el espíritu de Amor que Él nos enseñó. ¡Felices fiestas y Viva el Cristo de los Remedios!.