J. FEDERICO MTNEZ. Brillante, luminoso, por momentos zafio y cuartelero pero sin duda interesante y con mucho picante. Y sobre todo clarificador. Así inauguró el Ayuntamiento de Majadahonda el primer pleno del año 2020 y sin duda que los concejales «se ganaron el sueldo», nunca mejor empleada la expresión, porque ese fue el primer debate de las mociones: si los ediles se merecen la soldada de su intendencia. Lo planteaba Vox, azuzado por sus bases, y la discusión no desmereció en absoluto: se argumentó a favor y en contra, se peleó con bravura, se lidió con garra… y se votó. Vox se quedó más solo que la una y cada mochuelo volvió a su olivo, el Gobierno al suyo y la Oposición al de enfrente. El debate sobre los temas locales fue apasionante y el de los asuntos nacionales plagado de tópicos, plomizo y aburrido. Ahí suspenso generalizado. No les pagamos a los concejales por emular la tribuna del Congreso -algo para lo que todavía andan en pañales- sino por gestionar y vigilar hasta el último céntimo del gasto y reparto municipal velando por su eficacia.


Juan F. Mtnez

Comenzaba fuerte la sesión cuando Angela Gallo (Cs) llamaba «trileros» a los concejales del PP por estar «trapicheando» continuamente con su política de presupuestaria y de personal. Y Ángel Alonso (PP) replicó que de los 552 funcionarios del Ayuntamiento, solo 20 eran de libre designación, insinuando que muchos técnicos eran heredados incluso de antiguos gobiernos socialistas, hace ya la friolera de 40 años (1979-87).

J. Rodríguez (Vox)

Y así se entró en harina: José Rodríguez (Vox) presentó su moción para quitar la subvención de 77.400 euros a los grupos municipales y la defendió para «dar ejemplo» porque el anterior alcalde Foxá «incumplió la regla de gasto» en 2018 y además esa partida es «opaca»: «cree el ladrón que todos son de su misma condición» le dijo al resto de los concejales, al tiempo que aseguraba que la nueva bajada del IBI se debía a su presencia en el Gobierno y que su hoja de ruta era clara: «menos Estado» y «menos impuestos»: plusvalías, IRPF, sociedades, patrimonio y donaciones iba a ser su «lucha» hasta 2023, al tiempo que desvelaba como había recibido presiones de otros concejales para retirarla «hasta por los pasillos», pues la interpretaban como «un ataque personal». En su último turno, Rodríguez sentenció: «ladran, luego cabalgamos», y recordó que Vox hizo una travesía del desierto sin subvenciones, añadió que la supuesta financiación iraní era de un grupo «que invitó también a Aznar y Zapatero» y se vanagloriaba de que «nos censuran hasta en Twitter».


M. Fort (PSOE)

Manuel Fort (PSOE) replicó con ironía: «yo voy a luchar porque no nos vuelvan locos» y argumentó también con números: de 70 millones de euros de presupuesto municipal «quieren quitar 77.000 de los grupos municipales» cuando el Gobierno PP-Vox gasta 2,2 millones. Fort atribuyó la moción al hecho de que Vox Boadilla hubiese promovido otra similar con respecto a los asesores políticos y a las críticas internas en Vox Majadahonda: «Quítense sus sueldos, que entre los 3 concejales y el asesor cobran 250.000 euros» porque «si su participación en el Gobierno es hacer una recogida de pañales y una exposición de playmobil creo que podremos vivir sin eso». Quitar el dinero a los grupos era a su juicio «pulverizar la acción sobre todo de la Oposición y el modelo democrático» porque el Gobierno nada en la abundancia y dijo que esto era «como el milagro de San Pizarro, que con agua y tierra hacía barro».

I. Rastoll (Cs)

Igual de beligerante fue Ismael Rastoll (Cs), que recordó cómo los dos concejales de Vox no habían firmado ni un solo decreto desde que accedieron al Gobierno, con lo que tienen «los ratios más altos de gasto por concejal» con productividad cero. Recordó también que en Boadilla Vox pedía la supresión de asesores pero solo «porque están en la Oposición» y dijo que en Majadahonda «se han vendido por un plato de lentejas». Y les pidió que renunciaran también a los 1,5 millones de euros de subvención que tiene Vox en las Cortes. No perdió ocasión para señalar que no necesitaban subvención porque reciben «ayudas» de Irán y reprochó sus flirteos y devaneos con otros ex terroristas como Pío Moa.

A. Alonso (PP)

Toda la expectación estaba en que votaría el PP y si Vox había puesto en este tema la raya de su apoyo al Gobierno. Y no hubo sorpresas: Angel Alonso (PP) templó gaitas y, lejos de mostrarse comprensivo, arremetió contra Vox: «electoralismo y populismo como el de la extinta UPyD», dijo en alusión al partido de Rosa Díez. Alonso le achacó un intento de «desprestigiar a la política y a los corporativos» en referencia a los concejales. Y al tiempo recordó que la Oposición es un «contrapoder» necesario en democracia, y aunque el PP «no necesita» esas subvenciones, tampoco las va a quitar aunque retó a Vox a que lo hiciera «como ejemplo». Y desveló el enigma: su voto sería abstención, para que la iniciativa la derrotara solo la Oposición. Decisión salomónica que salvaba lo que pudo ser la primera crisis de Gobierno a los 7 meses de andadura. Puntuaciones (de 0 a 3): Angel Alonso (3), José Rodríguez (3), Ismael Rastoll (3), Manuel Fort (3).

Majadahonda Magazin