Valeria Quer

Valeria Quer durante una manifestación ©Europa Press

AGENCIA EFE. El Tribunal Superior de Justicia (TSJ) de Castilla y León ha ratificado la sentencia de la Audiencia de Segovia condenando al joven que abusó de Valeria Quer, hermana de Diana Quer, en septiembre de 2017, cuando esta era menor de edad. Los jueces desestiman los recursos que habían presentado, tanto la defensa, como la acusación particular, manteniendo los términos de la condena dictada en Segovia: 2 años de prisión con inhabilitación del derecho al sufragio pasivo, la prohibición de acercarse a la víctima a menos de 500 metros durante cinco años y la indemnización a Quer con 3.000 euros como autor de un delito de abuso sexual. La sentencia de la Audiencia que ahora se ratifica señala en su apartado de hechos probados es que J.P.M. y Quer se conocieron en las fiestas de Majadahonda (Madrid) y durante toda la noche, la adolescente ingirió gran cantidad de alcohol mezclado con diferentes medicamentos antidepresivos que tenía pautados, lo que impidió a la joven recordar buena parte de los hechos ocurridos aquel día.


Valeria Quer, hermana de Diana Quer, con su padre

Según el relato de los hechos, Valeria Quer se fue a casa a las 7 de la mañana aunque quedó poco después de nuevo con el acusado, que siguió suministrándola alcohol y acabó trasladándola a Segovia para acabar en una casa de su familia en el municipio segoviano de Carabias, donde con Quer en estado de seminconsciencia, se produjeron “acercamientos sexuales” y “tocamientos en sus partes íntimas hasta acabar eyaculando en su entrepierna”, según consta en el texto en el que también se matiza que “no consta suficientemente probado que llegase a penetrarla con el pene o a introducirla cualquier otro miembro corporal u objeto”.


Imagen familiar de Valeria Quer, hermana de Diana

Tras este suceso, “como consecuencia de su inestable estado mental derivado de una patología previa de la que ya estaba siendo tratada, la angustia de la desaparición de su hermana, para lo que seguía tratamiento psicológico y tenía prescritos medicamentos antidepresivos, unido a la angustia derivada de la incertidumbre de si el procesado había mantenido relaciones sexuales con ella aprovechando su estado [Quer] fue ingresada el 22 de septiembre de 2017 —cinco días después de los hechos juzgados— en un centro donde permaneció hospitalizada cuatro meses, siendo tratada desde entonces y hasta la actualidad al padecer trastorno postraumático”, concluye el repaso a los hechos probados. señala la revista Acueducto. La sentencia también la recoge Diario de Segovia.

Majadahonda Magazin