Los ladrones de Las Rozas y Majadahonda detenidos

MANU RAMOS. A principios del mes de julio (2020) daba inicio el operativo del Grupo de Delincuencia Organizada tras detectar un incremento de denuncias donde las víctimas relataban que los robos se habían cometido cuando ellos se encontraban en sus domicilios durmiendo. Agentes de la Guardia Civil, pertenecientes al Grupo de Delincuencia Organizada de la Unidad Orgánica de Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Madrid, en el marco de la operación “Habitat Qofte”, lograron detener este 5 de octubre, solo tres meses después, a los integrantes de un grupo especializado en robar viviendas habitadas y cuya zona de acción comprendía dos ciudades emblemáticas de la Zona Oeste: Las Rozas y Majadahonda.


En las imágenes, el producto de los robos

Tras lograr identificar a los integrantes del grupo, tres ladrones de origen albanés de 25 y 27 años y un varón de origen rumano de 45 años, encargado de logística, se los ubicó en una vivienda del barrio de Vicálvaro. En el registro efectuado la pasada semana, los agentes de la Guardia Civil lograron intervenir multitud de efectos (joyas, relojes, efectos de electrónica, bolsos y telefonía móvil), además de tres vehículos utilizados para perpetrar los robos y dinero en efectivo. Hasta el momento se ha logrado acreditar su implicación en robos acaecidos en Las Rozas y Majadahonda dentro de la zona Oeste de Madrid. Y en Tres Cantos, Cerceda, Colmenar Viejo, Fuente el Saz del Jarama, Torres de la Alameda, Ambite, Nuevo Baztán en el resto de la Comunidad de Madrid. Los robos también se produjeron en Madrid y en las provincias de Toledo y Ciudad Real.

Un estudio pormenorizado de los hechos, permitió descubrir un patrón de actuación muy definido por parte de los autores: siempre eran viviendas unifamiliares, situadas en zonas residenciales. Accedían escalando a las plantas superiores aprovechando que con el calor la gente suele dejar abiertas las ventanas, y en breves momentos eran capaces de desvalijar las viviendas, siendo su meta hacerse con el mayor volumen posible de joyas, el dinero en efectivo, bolsos y cualquier objeto electrónico. La operación se ha visto dificultada al utilizar el grupo a testaferros que ponían a su nombre los automóviles que ellos utilizaban para sus desplazamientos, tanto para realizar las vigilancias de las zonas como para cometer los hechos delictivos.

Majadahonda Magazin