JULIA BACHILLER. La Casa de la Cultura de Majadahonda fue escenario este viernes del XII Festival Solidario que la ONG Amazonia Requena, acto que realiza anualmente para recaudar fondos destinados a la ayuda humanitaria en esta zona de Perú. Espectacular Festival el que ofrecieron este año, que contó con una gran asistencia de público. Dio comienzo con la intervención del párroco de Santa Catalina, Juan Francisco Pérez Ruano, presidente de esta ONG, quien tras agradecer la presencia de todos quiso recordar a los sacerdotes ya fallecidos: Víctor, obispo de Requena, y Baldomero, párroco de Majadahonda, por su labor realizada en esta organización, creada hace 30 años y que cuenta con la colaboración de Majadahonda desde hace 13 años. Seguidamente destacó la importancia de esta ayuda y como se ve reflejada allí:
“Cuando llegas, Santa Catalina y Majadahonda están por todas partes, te preguntas: ¿he venido a Perú para estar en Majadahonda y en Santa Catalina?¿Por qué?, porque es gente agradecida y sabe que el pueblo de Majadahonda ha sido quien ha contribuido a hacer muchas de las cosas que hoy están disfrutando. Tienen el colegio de Santa Catalina, que es uno de los colegios más importantes en todo Perú, todos quieren ir al colegio de Santa Catalina porque saben que tienen futuro. Ahora lo que está haciendo esta ONG allí, fijaros que cosa tan sencilla y tan bonita, es pagar el desayuno a los escolares, lo que hoy se recaude tiene ese fin, ir a ayudar a los niños que muchas veces la única comida que van a hacer va a ser el desayuno. Pero además ese desayuno escolar tiene una segunda parte, que es la de dar alimento a los ancianos, el desayuno por la mañana a los niños y por la tarde la cena a las personas mayores”. Y finalizó diciendo: ”Si alguno queréis pasar un mes en la selva nos lo decís y os ponemos en contacto con el Padre Juan: si hay alguna enfermera, algún médico, alguno que quiera echar una mano de verdad, el Padre Juan está deseando que vayamos. Un abrazo muy fuerte del Padre Juan para todos vosotros”.
La presentación de las actuaciones estuvo a cargo de Paco, integrante de la tuna, que con su gracia y desparpajo provocó las risas de los asistentes. Comenzó el Grupo Folclórico Bandolero “La Garduña” con Copla de Luis Candelas, Camino Verde, Isas Canarias populares, Cocidito Madrileño y Nochecita Madrileña. Ataviados como bandoleros realizaron una lograda interpretación de estas conocidas canciones, como así les reconoció el público acompañándolos y otorgando unos aplausos merecidos. Seguidamente intervino Nono Molina, que cantó El Cristo de los Faroles, Mi niña Lola, S.O.S y El Emigrante. Impresionante actuación la de este majariego, que fascinó al público, pues con la dificultad de estar sentado interpretó de manera extraordinaria estos conocidos temas y cabe también destacar al guitarrista que le acompañaba, por lo que recibieron aplausos y vítores de todos los presentes. A continuación Estampas de Zarzuela que contó con la colaboración de los Coros y Danzas Francisco de Goya, las cuales bailaron Preludio Barberillo. Seguidillas-En el templo de Marte, Jaleo de la Macarena, Ole de la curra, María la Portuguesa y Seguidillas Manchegas. Vestidas de majas madrileñas realizaron una cuidada coreografía, acompañando su baile con castañuelas y abanicos, precioso trabajo que fue agradecido con numerosos aplausos.
Y como final la Tuna de Ingenieros Industriales de Madrid: si algo tiene la tuna es que anima allí donde llega. Y en esta ocasión eligieron Cascorro, Lloran las estrellas, Con este bolero, Disculpe Usted y Estudiantina Andaluza. Difícil describir su actuación, decir geniales se queda corto: coreados, aplaudidos, vitoreados y despertando las carcajadas de los asistentes, fueron el final perfecto para este Festival. Antes de concluir el párroco subió al escenario, donde inmediatamente uno de los tunos le coloco su capa. Y en agradecimiento se entregaron 4 estatuillas a las actuaciones realizadas. Se reiteraron las gracias a la colaboración de todos y se dio por finalizado el evento, en el cual destacar la presencia de Mari Cruz Márquez, que realiza las funciones de presidenta también en esta organización. Una gran labor en colaboración con el párroco que tuvo su final en la emotiva despedida que otorgó la tuna a todos los asistentes, formando pasillo en el hall y acompañando con sus canciones la salida de todos hacia el exterior.
A Juan Francisco Pérez Ruano le gusta tu enlace: «Éxito de la Fundación Amazonia-Requena:…»