JULIA BACHILLER. El traslado en procesión del Stmo. Cristo de los Remedios desde su ermita a la Parroquia de Santa Catalina con motivo de las fiestas que en estos días se celebran en su honor como patrón de Majadahonda, ha contado este año con la inestimable colaboración de la Agrupación Musical de Jesús Nazareno “El Pobre” de Madrid. El acto se celebró el pasado domingo 10 y no solamente puso la música durante el recorrido hasta la parroquia: también dos de los miembros de esta hermandad actuaron como costaleros. Un vídeo de Majadahonda TV que reproducimos en esta misma página recoge los momentos más vibrantes.

El momento más emotivo se produjo cuando con el esfuerzo que realizan los costaleros para sacar al Cristo de la ermita se le vio aparecer en el umbral de la puerta. El silencio, la emoción y la devoción pudieron apreciarse reflejados en la cara de todos los presentes. Una vez en el exterior, elevado sobre los hombros de los miembros de las hermandades de Majadahonda y Madrid, el paso desencadenó los aplausos y admiración de todos los que asistieron al acto litúrgico.

La procesión partió de la ermita precedida de portadores de bastones y estandartes y la banda de música. Tras ellos, el estandarte del Cristo de los Remedios, los miembros de la hermandad a los lados y frente al Cristo portando báculos. Y tras él, la comitiva formada por el párroco de Santa Catalina Juan Francisco Pérez Ruano, los concejales María José Montón, Manuel Ortiz, Ángel Alonso, Gustavo Severien y Manuel Troitiño del Grupo Popular, Antonio Rodríguez y David Ayuso de Ciudadanos y Zacarías Martínez Maíllo del Partido Socialista. También acudieron Alberto San Juan, secretario general del Partido Popular de Majadahonda y Guillermo Lucendo, de la Asociación de Urbanizaciones de Majadahonda.

Pero seguramente lo más destacable fue la presencia de un gran número de vecinos y visitantes que acompañaron la procesión hasta el final del trayecto. El tramo donde se encontraba la mayor afluencia de público fue frente a la Casa de la Cultura por motivo de las fiestas. El respeto ante el paso del Cristo se hizo notar con silencio y numerosos móviles en alto inmortalizando el momento. Cerrando la procesión, la Peña Majada con su presidente y miembros de la misma, con sus camisetas azules y pantalón blanco, presentes siempre en estos actos desde su formación como peña. Se notó la ausencia de la Peña de la Albarda, que por primer año no participó en la procesión y a cuyos integrantes sí se pudo ver y oír con su charanga durante la mañana y parte de la tarde por la Gran Vía.

Finalizó la procesión con la llegada a la parroquia. Un repique de campanas advertía de su presencia. Antes de entrar, un último homenaje de la misma forma que comenzó a su salida de la ermita: la banda interpretó tras un toque de atención el himno nacional mientras los costaleros hacían bailar el trono. Envuelto en aplausos y vítores se accedió al interior de la iglesia, donde ya muchos le esperaban. Tras situarlo al lado derecho del altar se cantó el Himno del Cristo de los Remedios de Majadahonda.

Un aplauso de agradecimiento a la hermandad de Jesús Nazareno “El Pobre” por su colaboración, la bendición del párroco y abrazos emotivos entre los organizadores y participantes de la hermandad fue el punto final al acto. La santa figura permanecerá en la parroquia hasta este jueves día 14 de septiembre, cuando regrese a su ermita. La procesión tuvo una duración de dos horas, en las que en todo momento la colaboración de la Policía Municipal pudo apreciarse facilitando el tránsito de la misma sin ningún obstáculo.

Himno al Stmo. Cristo de los Remedios de Majadahonda
Desde el cielo fulgente que ocupas.
Santo Cristo de los Remedios,
míranos a tus plantas postrados
Implorando tus dulces consuelos.
Tú, que eres patrón soberano
de este pueblo de Majadahonda,
escucha la oración de tus hijos
que te aclaman, bendicen y adoran.
Que viva mi Cristo, que viva mi Rey,
que impere doquiera triunfante su ley.
¡Viva Cristo Dios! ¡Viva el Redentor!
Majariegos, a Cristo aclamemos
como Dios de la ibera nación.
Y, gozosos, su himno entonemos:
Santo Cristo de los Remedios.