Patio interior del nº 6 de la calle Santiago Apostol
ALBERTO ELVIRA. La situación de los vecinos y comercios afectados por el incendio de «La Casa de Loira» es dramática. Una parte están realojados en el Hostal Majadahonda y una de ellas, Luisa María Olteanu, que vive en el 2º B del número 6 de la calle Santiago Apóstol, a escasos metros del epicentro del incendio, ofrece su testimonio: tuvo que ser desalojada de su casa el lunes 20 de julio como medida de precaución ante un posible derrumbamiento. “El lunes nos dijeron que nos teníamos que ir y que tenían orden de realojarnos al menos un día. Hoy –por el martes 21 de julio– nos han dejado volver a los que vivimos en el segundo. Lo que no entiendo es por qué me dicen que no pasa nada, cuando me recomiendan no acercarme siquiera a las ventanas. Además, no entiendo por qué dicen que en el piso segundo no pasa nada, pero a los del primero y a los del bajo no les dejan volver”.
Interior de La Casa de Loira
Luisa María vive con su hijo de siete años, su hermana y su marido, convaleciente tras una operación en una pierna. “Ahora puedo dejar a mi hijo, que tiene miedo, en casa de unos amigos, pero esto no es indefinido”, comenta. El problema al que se refiere Luisa María es que el Ayuntamiento simplemente les remite a las aseguradoras, pero “no nos ofrece ninguna alternativa ni solución”. Tanto comerciantes como vecinos temen sufrir una batalla legal entre las distintas aseguradoras porque, aunque al final les den la razón y los afectados obtengan sus reparaciones, durante el tiempo en que se dirima el conflicto sus vidas y negocios padecerán las consecuencias de un incendio que no provocaron: «Queremos saber cuanto antes si se va a demoler o no el edificio, si se cortarán las calles indefinidamente, si habrá obras, si podremos acceder a nuestras casas y negocios mientras tanto…», se lamentan los vecinos. Lorena Mena concluyó señalando que el Ayuntamiento les comunicó que en 48 o 72 horas “se echaría abajo el bloque, pero no tiene pinta. O inician esto ya o nos vamos a septiembre, que es un mes muy importante para los comercios porque coincide con las fiestas patronales”.
