JULIA BACHILLER. El auditorio Alfredo Kraus de Majadahonda fue el escenario donde se rindió homenaje a los empleados municipales que han cumplido 25 años y a los que disfrutan de su jubilación porque en ambos casos han prestado su servicio en el Ayuntamiento de Majadahonda. Ante la escueta nota de prensa emitida por el Equipo de Gobierno PP-Vox en la cual se omite a los protagonistas, así como los emotivos discursos que se produjeron durante el mismo, visualizando su retransmisión daremos cuenta de ellos. A los que cumplían 25 años de servicio se les hizo entrega de un reloj y un diploma, y a los que conmemoraban su jubilación, una placa y un libro. Presentes en el acto estuvieron el alcalde, algunos concejales, jefes de Servicio, representantes sindicales, así como  familiares de los homenajeados. Desde Majadahonda Magazin desearles a todos que esos 25 años se conviertan en muchos más, y una feliz jubilación a quienes les corresponda. El reconocimiento a sus 25 años de servicio fue otorgado a Francisco Martínez Prieto, Luis Reneses Sanz, Ángel Mario Jaén Arrabal, el cual quiso hacer público su agradecimiento aprovechando los micrófonos: “me habían dicho que podía decir algunas palabras, y  voy a romper el hielo siendo el primero. No traía nada preparado así que improvisaré: soy muy malo en ello, así que ruego me disculpéis». Tras dar las gracias a la corporación y “a mi concejal María José Montón, compañeros, María (directora de la Concejalía), compañeras, Ana María y Rosa”, de las que dijo: “forman parte de la vieja guardia, casi nos jubilaremos todos al mismo tiempo y son las que me han aguantado durante todos estos años, las que han tenido paciencia conmigo, las que me han sufrido, las que me siguen enseñando día a día. Y se lo quiero agradecer públicamente”, agradecimiento que extendió a los compañeros de su Concejalía y del resto del Ayuntamiento.

Otro de los homenajeados, Raúl Barrio Alonso, declaró: “Quiero agradecer al Ayuntamiento de Majadahonda haberme permitido desarrollar mi trabajo para la escuela municipal de música. Tenemos una extraordinaria, han pasado por mi aula muchísimos alumnos, merece mucho la pena seguir apoyándola”. Para finalizar agradeció su labor a Olimpiades Rivera, director técnico de Cultura: «para mí tiene un valor especial porque estuvo en el tribunal de esa oposición que yo realicé en 1993, y aquí seguimos “Oli” muchas gracias». Fernando Caravaca Caro también agradeció el homenaje recibido. Y seguidamente se hizo mención a los que no pudieron asistir: Antonio González González, Francisco Sanz Zapata y Verónica Álvarez Menendes, quienes excusaron su presencia por motivos personales, recogiendo el reconocimiento el director de Recursos Humanos, Pedro Estrada. Tampoco asistió Roberto Fernández Higueruelo, por motivos de salud y lo recogió Ángel Alonso como concejal de Hacienda.

A continuación se hizo entrega de la placa conmemorativa para los empleados jubilados. Antonio Chaufleur agradeció el reconocimiento. Cesar Redondo, policía municipal, comenzó con una anécdota: “Cuando venía he visto que faltaban las farolas de la Avenida de Guadarrama, y cuando entre aquí (al ayuntamiento) tuve que regular el tráfico para ponerlas”. Y finalizó con una emotiva frase: “Majadahonda es mi ciudad y lo seguirá siendo”. Mercedes Zamarriego recibió su placa y de una manera entrañable reconoció: “soy fatal para estas cosas, pero me encantaría volver a recibir el reloj de los 25 años, pues significaría que eres todavía joven. No tengáis miedo a la jubilación, yo estaba aterrada, se está de maravilla, fantástico, ni me acuerdo de que he trabajado alguna vez en mi vida, ánimo y a por ello”. María Dolores Pedrero, policía municipal, no pudo estar en el acto por motivos familiares y en su lugar recogió el galardón su marido, que al igual que ella es agente municipal. José Luis Laborda, tras su agradecimiento, reconoció:  “el año que viene espero venir yo para que me déis la placa”. Rosa María Gil García, agradeció el gesto por parte del Ayuntamiento diciendo: “Un acto como este le da credibilidad a lo que he vivido. La vida pasa tan rápido que, de los 25 años a la jubilación, esto será el recuerdo de que es cierto”. Entre otros ausentes al recoger la placa se mencionó a Manuel Díaz, José Martin y Esther García por estar disfrutando de su jubilación fuera de Madrid. Recogió sus premios Pedro Estrada, director de Recursos Humanos.

EL DISCURSO DEL CONCEJAL ANGEL ALONSO. La apertura del acto-homenaje estuvo a cargo del primer teniente alcalde y concejal de Recursos Humanos, Ángel Alonso, quien con su capacidad de oratoria ya conocida y fuera de los discursos políticos que nos ofrece en el pleno, dio muestra de ese lado emotivo y humano que a veces cuesta apreciar cuando nuestros políticos, como es su deber, defienden su ideología. Y es que la política enmascara en ocasiones  la humanidad existente en todos ellos. Alonso comenzó diciendo que “la palabra recordar viene del latín “recordis”, que quiere decir volver a pasar por el corazón. Y eso es lo que queremos hacer hoy, y lo que seguro os pasará a muchos de vosotros, que pasarán por vuestro corazón, en forma de recuerdos, personas, momentos, situaciones… y que hoy volveréis a hacer presentes“. Seguidamente aseguró: “Habéis visto Majadahonda crecer y cambiar, y muchos habéis protagonizado ese cambio. El trabajo que habéis realizado ha servido para garantizar que nuestro municipio avance. Y ha servido también para garantizar y consolidar la ciudad que hoy conocemos. Ha servido para que todos tengamos consolidados derechos, y en el trabajo de algunos de vosotros también para hacer que se cumplan los deberes”. Seguidamente de una manera cercana que demostraba su conocimiento y relación con algunos de los homenajeados, comenzó a mencionarlos por su nombre “como han hecho César y Lola en las calles, y muchos otros desde su despacho, ha sido para que nuestros vecinos puedan disfrutar también de sus parques de sus calles y de sus plazas como cada día dedican sus esfuerzos Fernando y Francisco. Para disfrutar de la cultura y del deporte o de los servicios educativos como también se empeñan en ellos nuestros dos “Antonios”, de Educación y el de Cultura. O como hace Raúl desde la escuela de Música. Ha servido para que muchas personas hayan podido recibir apoyo, ayuda y cariño cuando más lo han necesitado, como bien saben Rosa en Sanidad, y Mario en Servicios Sociales. O simplemente, aunque haya veces que no sea tan sencillo, para que todos ellos se sientan atendidos cada vez que han cruzado la puerta de nuestros edificios, como bien sabe Luis«. 

A continuación dio una explicación al libro entregado por motivo del homenaje a la jubilación: “os puede resultar extraño, os voy a explicar el porqué. Es un libro del escritor y poeta uruguayo Mario Benedetti, “La Tregua”. Tras una breve reseña del contenido del mismo, pasó a dar lectura de unas frases: “cuando me jubile creo que no escribiré más este diario, porque entonces me pasarán sin duda muchas menos cosas que ahora y no tendré nada que contar. Pero no: tengo y mantengo la lujosa esperanza de que el ocio sea algo pleno, rico, una nueva oportunidad de encontrarme a mí mismo. Y eso sí valdrá la pena anotarlo”. Para finalizar concluyó: “Os deseo de todo corazón que tengáis esa lujosa esperanza de la que hablaba Mario Benedetti, de aprovechar la oportunidad de seguir encontrándoos a vosotros mismos, que os ocurran toda clase de cosas que merezcan la pena anotar, que viváis la jubilación precisamente como eso, como un júbilo, como una alegría. Y que seáis felices porque os lo merecéis, porque con vuestro trabajo contribuísteis también a hacer más felices a muchos majariegos. Miremos hacia el futuro, con ganas, con esperanza, y con la ilusión de hacer cada día una nueva aventura que merezca la pena vivir”.